La resaca post E3 sigue su curso y las declaraciones en torno a Wii U continúan surgiendo desde todos los bandos. Por un lado Sony afirma no estar preocupada por el nuevo lanzamiento de Nintendo y asegura que no se acelerará la llegada de PS4 para contrarrestar el posible efecto de la nueva consola. Por otro Ubisoft, por boca de su presidente Yves Guillemot, asegura que los ports de juegos de PS3 y Xbox 360 a Wii U se verán igual o mejor. Y por último está la propia Nintendo, que debería vendernos la moto, pero prefiere decir las cosas tal y como son.
El encargado en esta ocasión ha sido Shigeru Miyamoto, que asegura lo que todos ya intuíamos para bien o para mal, que la gracia de Wii U está en el mando y que la potencia de la máquina no será su punto fuerte. De hecho afirma que para que el precio sea competitivo las capacidades técnicas de la máquina deben ser simples.
“Estamos intentando encontrar el equilibrio correcto entre la CPU y la GPU, el procesador gráfico, y ofrecerlo todo aprovechándonos de las capacidades HD del sistema.Por supuesto intentamos, con mucha delicadeza, hacer todo esto a un precio apropiado. Así que no sé si seríamos capaces de sentarnos aquí y afirmar que va a sobrepasar necesariamente y de forma drástica a los sistemas que hay ahora. Forma parte del equilibrio que estamos buscando, intentando encontrar entretenimiento nuevo y único.
“
No contento con el varapalo que podría sufrir Nintendo a raíz de estas declaraciones, Miyamoto se descuelga de la estrategia seguida por su compañía asegurando que es “imprudente“ haber presentado una consola con este tipo de mando. Queda a disposición de cada uno pensar en si se refiere a la presentación acontecida durante el E3 o a la máquina en si.
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