Pese a lo complicadísimo que resulta que toda una comunidad se una en una misma idea, con la saga Kingdom Hearts hay dos sentencias que prácticamente todos abrazamos por igual. La primera es que los juegos principales son joyas imprescindibles. La segunda es que su historia es un culebrón infumable que parece haberse escrito tras una noche de fiesta y desenfreno.
Sora, Riku, Kairi y compañía son el corazón de una trama que iba por buen camino hasta que la necesidad de explotar la franquicia a base de juegos, que van de aquí para allá como pollo sin cabeza, la convirtió en un sindiós en el que adentrarse de cero es una misión, no imposible, pero sí tremendamente dolorosa.
Nuestra intención de cara al lanzamiento de Kingdom Hearts 3, también con el deseo de que más jugadores puedan sumarse a él sin miedo a acabar completamente perdidos a los dos minutos de empezar, es crear un breve resumen en el que aterricemos los conceptos más influyentes de la trama. Por así decirlo, saber qué es, de dónde viene y a dónde va Kingdom Hearts en menos de 10 minutos. ¿Preparados? Pues vamos allá.
Luz y oscuridad: la eterna lucha
Como en toda historia fantástica que se precie, Kingdom Hearts es una lucha constante entre la luz y la oscuridad. Habiendo personajes Disney y niños héroe por el camino, para que los buenos puedan ganar a los malos tienen dos poderes: el amor y la amistad. Amor y amistad igual te forjan una espada que atraviesa cuerpos y parte corazones en pedazos que te realizan una reanimación cardiopulmonar para traerte de entre los muertos. Poca broma.
El nombre de la saga hace referencia a Kingdom Hearts, un vacío/mundo/lugar donde van a parar los corazones de todos los que lo pierden y que goza de un poder sin igual. Era de esperar que tarde o temprano dos bandos se liasen a tortas para intentar controlarlo, una batalla que se conoce como la Guerra de las Llaves Espada. Precisamente una de esas armas, la Llave Espada X, es la que da por terminado el conflicto, pero acaba destrozada en 20 pedazos (siete de luz y 13 de oscuridad) y se convertirá en la clave de todo lo que vendrá después.
Cientos de años después, y aún con el recuerdo de aquella cruel guerra, tres estudiantes se examinan para convertirse en portadores de la llave espada. Pero ojo, no es que acaben la prueba y vayan a recoger la suya como el que consigue la L después de sacarse el carné de conducir, es la llave espada la que te elige a ti y, a partir de ese momento, eres tú el que decides si la usas como fuerza de luz u oscuridad.
El caso es que estos tres pipiolos llamados Terra, Aqua y Ventus, se examinan de la mano del maestro Eraqus y con un colega de este último, el maestro Xehanort. Del examen sólo sale con honores Aqua, pero Xehanort, que es más malo que el gas, le echa el ojo a los otros dos. A Terra por haber sido incapaz de controlar su oscuridad. A Ventus porque lo maltrató de pequeño y rompió su corazón en dos partes, una de luz y otra de oscuridad. Sí, seguimos en una historia apadrinada por Disney.
La idea era que con ambas partes de corazón, Xehanort pretendía forjar de nuevo la Espada X, así que para evitarlo el maestro Eraqus intentó acabar con Ventus. Terra, que no estaba para muchas tonterías, protege a su compañero acabando con su profesor. En el baile de corazones de un sitio para otro tenemos al de Eraqus metido en el cuerpo de Terra y al de Ventus en el corazón de un niño llamado Sora del que hablaremos más adelante.
Como imaginarás, hay pelea, especialmente porque Xehanort se ha metido en el cuerpo de Terra (porque era viejo y quería carne joven) y a Aqua la jugarreta no le ha gustado un pelo, así que pelea con él tras salvaguardar a Ventus, que está en un profundo sueño, y acaba obligando a Terra a que intente deshacerse del corazón de Xehanort para volver a ser el que era.
La puntería de Terra no es su fuerte, así que acaba con Eraqus en vez de Xehanort. El chaval acaba absorbido por la oscuridad y, con la intención de salvarlo también, Aqua se sacrifica consiguiendo que vuelva a la luz, pero quedando ella atrapada dentro.
Si aún no te has perdido, enhorabuena. Tienes unas veinte oportunidades más para hacerlo si sigues leyendo.
Xehanort no se va ni con agua caliente
El pifostio acaba con Xehanort vivo pero amnésico y manteniendo un cuerpo joven, así que la jugada le ha salido regular, pero no del todo mal. Menos aún cuando lo recoge un científico llamado Ansem el Sabio que estudia todo lo que se mueve alrededor de los corazones.
Los dos pasan años haciendo experimentos hasta que Xehanort empieza a demostrar que mala hierba nunca muere y le entra el gusanillo de unir corazones y oscuridad para ver qué ocurre. Ansem le dice que ni de coña, pero ni corto ni perezoso Xehanort engaña al resto de ayudantes para que se la líen al científico y lo encierran en otra dimensión. Sin paños calientes.
Habiendo suplantado su identidad, el malo se pone a toquetear corazones y, como no tiene límites, acaba separando su corazón y el de sus ayudantes, dando así lugar a dos seres que van a ser clave en el resto de la historia (así que atentos): un sincorazón y un incorpóreo.
La cuestión es que los sincorazón son como un virus que destroza todo a su paso generando cada vez más oscuridad. Sucumbido un mundo saltan a otro, y es algo que repiten hasta la saciedad hasta que acaban llegando a un mundo en el que las cosas se les ponen de culo. El mundo en el que reside Sora con sus dos amigos, Riku y Kairi.
A uno se lo traga la oscuridad, la otra desaparece y Sora, que tiene el corazón de Ventus, se convierte en portador de la Llave Espada. El arma es rara de narices, pero parece efectiva contra los sincorazón, que al morir dejan caer los corazones que habían ido merendando mundo tras mundo.
El héroe de los zapatos de payaso
Como Sora aún es un poco lumbreras, no consigue detener la invasión y acaba perdido en un mundo en el que van a parar todos los que se han quedado sin hogar. Allí conoce a Donald y Goofy, que están buscando al portador de la Llave por orden del Rey Mickey. Su cometido es viajar mundo por mundo cerrando la puerta a los sincorazón para evitar que el universo se vaya a tomar viento.
El caso es que Xehanort, que no se puede estar quieto, sigue en busca de intentar recuperar la espada X para hacerse con Kingdom Hearts, así que ha engañado a Maléfica para que encuentre a siete princesas (siete fragmentos de luz), y esta ha engañado a Riku para que le eche un cable con el encargo. Como veis aquí nadie se ocupa de lo suyo.
Riku, que ya pintaba ser un poco veleta, acaba sucumbiendo a la oscuridad e intenta capturar a Kairi que, giro de guión, lleva todo el tiempo en el corazón de Sora, y además es una de las princesas que le faltan al puzle de Xehanort. Pelea, Xehanort haciéndose con el control de Riku y Sora clavándose la espada para intentar salvar a Kairi.
¿Pero qué pasa cuando se destruye un corazón? Si has contestado que aparece un sincorazón y un incorpóreo es que has estado atento.
Pero ojo, giro de guión aderezado con poder del amor, Kairi ha sido liberada y se funde en un abrazo con el sincorazón de Sora para convertirlo en Sora otra vez.
Eso sí, del incorpóreo no nos escapamos, que acaba dando lugar a Roxas, que es Sora en otro orden y con la X metida en el nombre porque así es la vida de los incorpóreos. Pero no nos vayamos a ese berenjenal todavía, que queda la gran batalla entre Riku/Xehanort y Sora para que este último acabe ganando. Riku queda liberado y, en otro giro de los acontecimientos, Riku y el Rey Mickey acaban encerrados en el Reino de la Oscuridad.
Hasta aquí llega el preludio y la trama de lo que ocurre en Kingdom Hearts y sus precuelas. Podríamos quedarnos aquí y decir que el malo vuelve, el bueno sigue luchando por no ser un lumbreras y saltar directamente a Kingdom Hearts 3, pero vamos a darle un poco más de chicha al asunto.
El rizo que riza el rizo
Sora, Donald y Goofy dejan a Kairi en su casa y se van de paseo en busca de Riku y el Rey Mickey. Pero tienen tan mala suerte que acaban en el Castillo del Olvido, el lugar donde Aqua había escondido a Ventus. Allí se encuentra con Xemnas y su organización. ¿Quién narices es? Pues si habíamos luchado contra el sincorazón de Xehanort, ahora toca hacerlo contra su incorpóreo.
El problema es que el Castillo del Olvido hace honor a su nombre y, conforme van avanzando en él, Sora pierde sus recuerdos. Pese a que vuelven a encontrarse con Riku y consiguen dejar a la Organización XIII en las últimas, acaba teniendo que echarse a dormir en una cápsula para recobrar sus recuerdos. Una siesta de un año que le sirve a Xehanort, que en realidad sigue dentro de Riku, para seguir manipulándolo y que acabe de lleno en la oscuridad.
Xehanort y Xemnas van de la mano a liarla parda para crear un Kingdom Hearts artificial. La idea es acabar con los sincorazón y aprovechar los corazones liberados para dar forma a ese engendro de corazones, lo que les sirve de excusa para camelar a Roxas y convertirlo en miembro de la organización. La cosa sigue liándose mientras Sora duerme y Roxas, acompañado de un amigo de la organización llamado Axel, decide que eso de las sectas con gente encapuchada no le va mucho y se pira.
Por suerte anda por allí Riku, que ha entrado en razón y quiere capturar a Roxas para que pueda unirse a Sora y que este despierte de su letargo. Despertarse después de un año debe sentarle a uno fatal, pero encima hacerlo para enterarte de que tu amiga Kairi ha sido secuestrada, debe ser una faena.
En todo ese proceso ha sido de gran ayuda Ansem, el sabio que fue desterrado por Xehanort. De hecho a él le debemos el hito de destruir el Kingdom Hearts artificial de Xemnas, pero para hacerlo acaba jugándose el cuello y termina atrapado en el Reino de la Oscuridad junto a Aqua. Por suerte no todo sale mal. Sora y Riku le dan la del pulpo a Xemnas y se van a su casa tan contentos con su amiga.
Este podría ser un buen punto para dar por zanjada la historia una vez más, decir que vivieron felices y comieron perdices y punto y final. Pero como los punto y final no dan dinero, la historia tiene que liarse un poco más. Resulta que Mickey ha descubierto algo que, si me permitís la licencia, no tiene ya ni pies ni cabeza.
El rizo que riza el rizo que rizó el rizo
Si Xehanort sincorazón está destruido y su incorpóreo también, por obra y gracia del espíritu santo Xehanort ha vuelto a la vida. Le pasa a él y al resto de miembros de la organización. ¡Sorpresa!
La cosa pinta regular, así que Sora y Riku tienen que ponerse a entrenar para intentar pararle los pies una vez más, convirtiéndose no sólo en portadores, sino en Maestros de la Llave Espada.
Ambos se van por ahí a entrenar para descubrir el plan de Xehanort ha sido irse de paseo espaciotemporal en busca de miembros de la organización y sus versiones de otras épocas. Todo con la intención de conseguir las 13 partes de oscuridad que darán vida a la Llave Espada X.
Entre los cuerpos que necesita está el de Roxas, que está en Sora, así que Riku tiene que acudir en su ayuda y, de rebote, Lea (persona original de Axel que también había resucitado porque sincorazón e incorpóreo blablabla) echa un cable para proteger a Roxas (y a Sora). El caso es que al protagonista siempre le tienen que sacar las castañas del fuego, así que lo de convertirse en Maestro de la Llave Espada ni de coña.
El que sí lo consigue es Riku, que el tío se lo ha currado, y Lea/Axel, que también se merece un premio, se convierte en portador. La fiesta sería casi perfecta de no ser porque, oh, sorpresa una vez más, Xehanort ha conseguido sus 13 partes de oscuridad y ahora va en busca de las siete de luz. ¿A quienes necesita? A siete princesas que deberán ser protegidas por los siete portadores de la Llave Espada: Sora, Riku, Mickey, Aqua, Ventus, Lea y Kairi.
Riku y Mickey se van en busca de Aqua a la oscuridad, Kairi y Lea se van a entrenar, y Sora, Donald y Goofy, se ponen las pilas para recuperar los poderes que han perdido durante la última batalla. ¿Cómo? Pidiéndole ayuda a otro personaje que perdió y recuperó su fuerza, el mítico Hércules.
Y hasta aquí el festival de giros, nombres y pifostios que es la saga Kingdom Hearts. Un resumen en el que hemos obviado no pocos nombres y personajes para hacerlo más llevadero. Lo importante es que los que hayáis llegado hasta aquí sepáis qué es lo que os depara Kingdom Hearts 3. A continuación tenéis un completo vídeo en el que podréis ver toda la historia de la franquicia en poco más de media hora. Preparad palomitas (y paciencia).
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