Akira Toriyama nos dibujó el final de Dragon Ball en mayo de 1995, y no es ningún secreto: sin previo aviso, Son Goku se despedía de sus amigos y seres queridos durante el Gran Torneo de las Artes Marciales. No se va solo, ya que se va volando -literalmente- junto a un terrícola aparecido de la nada. Un discípulo jovencísimo, pero con un potencial ilimitado. Tal y como él era cuando todo empezó. ¿Y después qué?
A Toei Animation le quedaban montones de capítulos por producir y varios ases bajo la manga: tras alcanzar el último capítulo vino la nueva serie de televisión Dragon Ball GT, nuevas películas, más especiales animados y hasta videojuegos con historias jamás contadas. Algunas, como Dragon Ball Online, escritas por Toriyama. Pero el final de la obra siempre quedó establecido. Al menos hasta 2013.
Con el estreno de Dragon Ball Z: La Batalla de los dioses, el propio Toriyama exploró una enorme parte de la historia jamás contada entre la batalla de Buu y el final de la obra que, con el tiempo, derivó en la serie Dragon Ball Super y finalmente la película y el manga de La Saga de los Superhéroes.
La otra realidad es que en la película y la versión en papel de Dragon Ball Super: Super Hero se da un dato muy revelador: Pan, la nieta de Goku, tenía tres años y en el último capítulo publicado, el final de la obra, había cumplido cuatro. Dicho de otro modo: en teoría solo existe un año de margen para contar y crear nuevas historias sin salirse de el final establecido. En la práctica, y como veremos, eso no es un problema.
Lo que da de sí un solo año en Dragon Ball
Pongámonos en el peor de los escenarios: hasta que Pan sople las velas de la Tarta y cierto saiyan sin cola amañe el sorteo del Gran Torneo de las Artes marciales para encontrarse con Ub falta todo un año. Y eso es una eternidad en Dragon Ball.
Todos los arcos desde que Goku se hizo adulto transcurren en un lapso muy corto de tiempo, con la excepción de aquellos periodos antes de la llegada de Vegeta a la Tierra, la aparición de los Androides del Dr. Gero o antes de que Gohan entrase al instituto. Es más, a modo de referencia, entre el comienzo de Dragon Ball Super (La Batalla de los Dioses) y la película de Broly solo pasan dos años.
Y lo que es mejor, entre un arco y otro Akira Toriyama ha dejado amplios espacios que se prestan a contar historias nuevas. Algo que Toei Animation hizo por su cuenta hace décadas sacándose de la chistera tanto a través de las películas (que no son canon) como en televisión a través de las aventuras de Gohan mientras entrenaba con Piccolo, el regreso de Garlik Jr. o un Torneo de Artes Marciales del Más allá tras el Juego de Cell.
Sobra decir que hay arcos "de relleno" más interesantes y divertidos y otros que han estado mucho menos inspirados. Sin embargo, y esto es interesante, merece la pena tener en cuenta que hay dos grandes historias que solo existen en el papel:
- Tras el Torneo de Poder y sobrevivir a Broly, Akira Toriyama y su sucesor a los pinceles Toyotaro publicaron en el V-Jump la Saga del Prisionero del espacio, en la que Goku y Vegeta se ayudan a los Patrulleros Intergalácticos y aprenden técnicas totalmente originales.
- Y no solo eso: los mismos autores publicaron antes de la Saga de Los Superhéroes la saga de Granola el Superviviente, dónde Goku descubre el legado de su padre y Vegeta despierta el poder del Ultraego.
Lo curioso de todo es que, incluso en estas, hay historias intermedias realmente interesantes que solo se han mostrado en especiales de televisión. Y también tenemos presente que hay una barbaridad de años durante la etapa del pequeño Son Goku en los que se dedicó a vivir aventuras por todo el mundo.
Así que, incluso si se quiere dedicar este último año restante a un gran arco argumental (y hay piezas sueltas de sobra para hacer grandes cosas), también está la posibilidad de contar historias jamás contadas y, ¿por qué no? Sacarse personajes de la chistera capaces de expandir el universo de Dragon Ball hacia nuevas direcciones: en 2013 Toriyama dibujó Jaco, el Patrullero Intergaláctico y en el proceso nos regaló una precuela en toda regla de su obra.
Y sin embargo, también es posible ir mucho más allá del último episodio de Dragon Ball. Entre otras cosas, porque Akira Toriyama imaginó como sería.
El futuro lejano de Dragon Ball más allá de Son Goku y sus amigos
En febrero del año 2010 se creó el videojuego Dragon Ball Online, un MMORPG basado en el mundo de la obra de Akira Toriyama, pero con una premisa muy interesante: en lugar de regresar a la etapa conocida por los fans, se ubicaría temporalmente en el año 1.000 de la cronología de Dragon Ball. Es decir, 216 años después del último capítulo del manga. Y lo mejor de todo es que el propio Toriyama participó en la creación de esa historia.
¿Qué pasa hasta entonces? Mucho y de todo: según la cronología de la guía oficial del juego, Mr. Satan siguió ganando el Gran Torneo de las Artes Marciales durante años, eso estaba claro. Pero lo mejor es que con el paso de los años, los personajes conocidos darán continuidad a sus vidas:
- De entrada, Krillin y Ten Shin Han reviven las escuelas de la Tortuga y la Grulla respectivamente. Mientras tanto, Pan continuará el legado de sus abuelos Goku y Mr. Satán heredando la escuela de artes marciales del último. Lo cual extendió la pasión por la lucha a nivel planetario.
- Pero lo más curioso es que los hijos de los Saiyans también crean su propia escuela: gracias a las investigaciones de Gohan se consigue desencriptar y explicar al gran público los secretos de la energía espiritual y sus posibilidades. Algo que facilitará que Goten y Trunks creen su propio estilo de combate.
- Por otro lado, muchos de los habitantes de Namek se han establecido en la Tierra y hasta han acomodado una parte de ésta a las condiciones de su planeta natal, contribuyendo enormemente a la prosperidad gracias a sus conocimientos, sus artes, sus poderes únicos y su ciencia.
Debido a estos acontecimientos, y los estudios de Gohan, el mundo entero experimenta durante las siguientes décadas un fenómeno curioso: además de los increíbles avances científicos, se vive una edad dorada para los luchadores y practicantes de artes marciales. Sobre todo, cuando no todos las emplean para la justicia.
Es más, el ejército de la Red Ribbon ha renacido recientemente y, por si fueran pocos los líos de los Terricolas, también han aparecido unos namekianos malvados con las mismas ambiciones del cruel Rey Piccolo Daimaoh. Como resultado, el planeta entero experimenta una nueva época llena de aventuras, tecnología y pasión por las artes marciales. ¿Y qué pasó con Son Goku? La historia de Dragon Ball es intencionadamente ambigua al respecto, pero se insinúa que él y Vegeta abandonaron la Tierra cuando sintieron que su prolongada vida de guerrero saiyan estaba a punto de consumarse para tener el combate final.
Quizás las aventuras de Goku y sus amigos tengan los días contados, pero está claro que hay direcciones muy interesantes que explorar hasta que esa batalla definitiva se celebre. Y no solo eso: tanto en Dragon Ball Online como en Dragon Ball Heroes y Dragon Ball Xenoverse se lleva explorando durante años el concepto de saltos en el tiempo y realidades paralelas mucho antes de que las películas de Marvel quemasen esa idea.
Juntando en las mismas historias las transformaciones de Super Saiyan 4 y el Ultrainstinto y, ya puestos, entremezclando acontecimientos clásicos con personajes creados para la ocasión.
Hay planes para toda una década de Dragon Ball en marcha
Podemos especular sobre cómo y en qué direcciones irán las aventuras de Son Goku más allá de Dragon Ball Daima, pero lo que sí sabemos es que no veremos el ocaso de la franquicia ni a corto ni a medio plazo. Es más, actualmente hay planificados diez años de contenidos y el propio Toriyama ya ha designado a sus sucesores: Toyotaro se encargará del manga y Sasuke Toriyama, su propio hijo, cuidará del legado de su obra.
¿Una década es mucho o poco? Bueno, juegos como Dragon Ball Heroes rebasaron ese tiempo hace varios años. Dragon Ball Xenoverse 2 salió en un no tan cercano 2016 y sigue recibiendo contenidos, y en 2024 tenemos Dragon Ball Super Card Game FUSION WORLD un nuevo de cartas coleccionables en físico y digital que planea competir con Magic The Gathering y Pokémon TCG. Visto con perspectiva, y a falta de conocer los planes para el papel y la animación, es una cantidad de tiempo viable para los fans y que, por cierto, se presta a prorrogas indefinidas.
Así que regresando, a la cuestión original, Dragon Ball tiene los días contados desde el punto en el que actualmente se encuentra la historia de sus personajes hasta su inevitable final, fijado en el Weekly Shonen Jump de mayo de 1995, pero tenemos claras dos cosas: en un lapso de al menos un año pueden pasar muchas, muchísimas cosas dentro del Dragon World, y fuera de él, en el mundo real, hay planes para seguir llevando las aventuras de los saiyans todavía más lejos.
El propio Toriyama dejó abierto el destino de sus personajes en la última viñeta que dibujó, Son Goku y sus amigos siempre tendrán las propias dragon balls, las esferas de los deseos, ante cualquier problema. Lo que él mismo no sospechó es que será realmente la pasión y la devoción de sus fans lo que mantendrá viva su obra de manera indefinida. Convirtiéndola en un fenómeno atemporal capaz de traspasar generaciones. En un mito que no cesa.
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