El mundo de Dragon Ball es inagotable. Akira Toriyama imaginó un planeta colmado de aventuras capaz de desatar la imaginación de generaciones enteras con elementos de fantasía y ciencia ficción en los que conviven humanos, monstruos, androides y hasta extraterrestres. Cuando Son Goku, el protagonista de su obra, se hizo mayor, nos llevó de su mano hasta los confines del universo. Pero, ¿alguna vez te has preguntado cómo es posible que seres como Freezer, los Dioses de la Destrucción, y hasta los niños del planeta Tierra hablen el mismo idioma?
Lo curioso de todo esto es que Toriyama, que muchas veces se hace el despistado para no tener que dar muchos rodeos en las respuestas, ya había pensado en ello hace más de treinta años. Pero empecemos por lo esencial: ¿En qué lengua habla Goku y cómo puede preguntarle a un delfín una dirección en su propio idioma?
¿Cual es el idioma oficial del Planeta Tierra?
El planeta Tierra de Dragon Ball está gobernado por un único estado federal dividido en 43 zonas. Por decirlo mal y rápido, solo hay un único país en todo el mundo y está dirigido por un rey, quien gestiona el resto de regiones desde el Gran Castillo situado en la Capital central. Y en todas ellas se habla el mismo idioma.
Lo curioso es que estas zonas se pueden leer textos en inglés, japonés, chino e incluso signos extraños. Un ejemplo de esto último es Fungus Town, la ciudad que una vez estuvo bajo el control de la Banda del Conejo de Toninjinka. De modo que hay un idioma común y, además, se dan casos en los que se usa un idioma autóctono.
Que los animales puedan hablar también se explica. Técnicamente hay tres clases de animales:
- Los hombres-animales, como Oolong, Puar o Shu, de la banda de Pilaf, que tienen las mismas características de los humanos, aunque algunos pueden transformarse. Y hablan la lengua común.
- Los animales con capacidad de habla, como la Tortuga del viejo Roshi. Por lo general hablan en lengua común, pero algunos arrastran rasgos propios de su especie durante la conversación.
- Finalmente, los animales sin capacidad de habla. Por ejemplo Bee, el perrito de Mr. Satan y Bu, o los dinosaurios de la Capsule Corporation.
Los terrícolas, por lo general se desenvuelven en inglés con alguna que otra excepción. Trunks escribió "Hope" (esperanza) en su máquina del tiempo, y ahí tenemos el logotipo de la Capsule Corporation o la Kame House. Sin embargo, el sello para contener a Piccolo estaba escrito en Japonés, así como el símbolo de su ropa o los usados en el uniforme de la escuela Tortuga y Grulla. Pero, a efectos prácticos, hay una lengua compartida llamada "idioma universal".
Hasta aquí podemos entender que todos los terrícolas puedan hablar entre sí. Pero, ¿cómo es posible que cuando comenzaran a llegar los guerreros del espacio se comunicasen tan alegremente? Para encontrar la respuesta tenemos que hacer un viaje hasta el planeta Namek.
Piccolo significa "Otro mundo", pero solo una terrícola lo sabe
Hasta ahora hemos hablado de que en el planeta Tierra conviven muchos idiomas y dialectos, pero hubo un tiempo en el que solo tres personas conocían un lenguaje extraño y ninguno de ellos conocía su procedencia: el namekiano. Básicamente, el idioma del planeta Namek.
La historia de las de las propias dragon balls nace de un extraterrestre cuyo nombre se olvidó que, escapando de una catástrofe natural de su planeta, fue a parar a la tierra. Dado su enorme poder y determinación, se postuló a Kami-Sama, el Dios de la Tierra, no sin antes desprenderse de su maldad, la cual se liberó y sembró la destrucción bajo el nombre de Piccolo.
Aquel no era un nombre elegido de manera caprichosa, sino la primera palabra del que será el primer idioma extraterrestre de Dragon Ball. Significaba "Otro Mundo" y, a efectos prácticos, servía para abrir la puerta de su nave espacial. Solo Kami-Sama, su asistente y Piccolo sabían namekiano, hasta que Bulma, la compañera de aventuras de Son Goku, necesitó hacer un viaje a través del espacio y decidió aprenderlo con un propósito: traducir los comandos de voz de la nave al idioma universal.
¿Eso quiere decir que en el espacio del universo Dragon Ball hay multitud de idiomas? Definitivamente sí. Literalmente, hay miles. Según Dragon Ball: Compendio 4, hay más de 7.000 solo en el universo en el que habitan Son Goku y sus amigos. Pero, a efectos prácticos, todos hablan el mismo idioma común.
Con respecto al idioma, aparte del namekiano, su lengua madre, también está confirmado que dominan el idioma universal, que es la lengua que se utiliza en todo el universo, incluyendo la Tierra.
Los planetas que hay esparcidos por el universo a menudo poseen muchas peculiaridades culturales. Como todos los extraterrestres saben hablar más o menos el idioma universal, seres de diferentes planetas se pueden comunicar sin problemas cuando se encuentran. Aun así, al parecer existen más de 7.000 idiomas en el universo.
¿Lo mejor? No es información que Toriyama pensase a posterior, sino que ya se mostró la primera vez que Freezer habla con los Namekianos durante la saga de Namek.
De hecho, una peculiaridad de las dragon balls de Namek, además de su enorme tamaño, es que sólo se pueden pedir deseos en el idioma namekiano. Si se usa el idioma universal, aunque el dragón sagrado de Namek lo pueda comprender, no se produce ningún efecto. A fin de cuentas, y como dijo el Gran Anciano de Namek, es una medida eficaz para evitar que se le den malos usos a las esferas de los deseos.
La manera en la que se componen los universos de Dragon Ball también es compleja, pero está muy bien organizada: el Universo 6, en el que existe la tierra, está a cargo de Jaco de la Patrulla galáctica y bajo la vigilancia de los dioses Kaio Shin (de la creación) y Beerus (de la Destrucción) y todos ellos usan el mismo idioma universal. Lo cual se aplica también a los otros 11 universos e incluso a los inframundo, los reinos de los demonios y hasta el más allá.
Dicho lo cual, incluso se puede decir que hay una jerarquía propia dentro de los idiomas: pese a que los ángeles y los dioses hablan el idioma universal, y como ocurre con las dragon ball de namek, para invocar al Súper Dragon Sagrado en Dragon Ball Super hay que conocer el lenguaje de los dioses. Lo divertido de esto último es que, a efectos prácticos, es básicamente el japonés hablado al revés.
Entonces, ¿estaba todo pensado desde el principio?
La primera vez que Akira Toriyama mostró el idioma namekiano todavía no había imaginado que Piccolo era un extraterrestre. Posiblemente, ni siquiera se había planteado los orígenes saiyanos de Goku. Fue durante la celebración del 23ª Edición del Gran torneo de las Artes Marciales en la que Piccolo y Shen (un humano al que Kami-Sama tomó prestado el cuerpo) hablaron sin que se les entendiese.
La idea era sencilla: los dos eran capaces de entenderse en un lenguaje completamente desconocido. Pero, hasta entonces, no había barreras más barreras en el idioma en Dragon Ball que el desconocimiento del propio Goku en conceptos como qué es "esa sopa amarga llamada café" o qué significa "casarse".
A medida que la ambición y la escala de Dragon Ball fueron creciendo, Toriyama supo atar muchos cabos sueltos y construir diferentes culturas y simbologías con lo ya publicado. Del mismo modo que no es casualidad que el trono del rey Piccolo Daimaoh sea casi idéntico al del Gran Anciano de Namek. Y pese a ello, el padre de Goku y Arale tuvo presente, entre aventuras y batallas apoteósicas, que algo tan simple y sencillo como el idioma debía estar presente en el Dragon World y mucho más allá, pero, jamás lo consideró como un obstáculo ni para sus personajes ni para sus lectores.
Algo que tiene mucha lógica: para los Saiyans de verdad, las palabras están de más: la mejor manera de expresarse es saciando su interminable sed de combate.
Ver 1 comentarios