Algo que es innegable de Baldur's Gate 3 es que su trama y su mundo ha atrapado a millones de jugadores, con una historia a la que cada uno le puede dar la forma que quiera a base de las decisiones que se vayan tomando sobre la marcha. Eso es algo que sabe muy bien James Ohlen, quien ha estado trabajando durante 22 años en BioWare, más concretamente en los inicios de la saga Baldur's Gate.
En una entrevista que ha publicado el portal Rock, Paper, Shotgun podemos ver cómo ha narrado su historia, admitiendo que desde siempre ha mantenido una gran pasión por el mundo de Dungeons & Dragons. Es difícil saber cuántas partidas llegó a organizar, pero debieron de ser una auténtica barbaridad, porque él mismo presume de haber superado las 20.000 horas como Dungeon Master cuando BioWare decidió contratarle.
Fue Cam Tofer, un programador de la compañía, el que se encargó de orquestar todo, porque en su momento a principios de los 90 participó en una de las campañas de Ohlen y se ve que debió de salir con muy buenas impresiones, porque su reputación local como organizador de historias de D&D le catapultaron para convertirse en uno de los diseñadores creativos del primer Baldur's Gate.
Ray Muzyka, cofundador de BioWare, le invitó a Ohlen a utilizar las carpetas que había creado repletas de personajes, campañas y mucho más para introducir todos estos elementos en el RPG. No obstante, de primeras no le convenció la idea, pero cuando empezó a hacer uso de estos materiales se dio cuenta de que podía hacer las cosas mucho más rápido, ya que todos los personajes tenían personalidades que él mismo había ideado.
Sin embargo, no fue hasta la llegada de Final Fantasy VII cuando Ohlen quiso superarse a sí mismo y llegar más lejos todavía:
Soy muy competitivo. Al jugar a Final Fantasy VII pensé "Dios mío, estos personajes hacen que los nuestros parezcan un montón de recortes de cartón. Esto es terrible".
Eso condujo al equipo a querer mejorar sus productos más todavía. De hecho, los personajes de este Final Fantasy siguieron siendo una enorme influencia para Ohlen, aunque con el tiempo también hubo otro título que le causó un gran impacto, como fue Chrono Cross, ya que fue uno de los juegos que sirvió para dar vida a Star Wars: Knights of the Old Republic, al igual que el propio universo de Star Wars, claro está.
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