El software de PS4 se ha actualizado añadiendo como una de sus máximas novedades la posibilidad de sustituir tu DualShock por un iPhone o iPad, pero también el no tener que depender de una televisión o estar sentado frente a ella. Eso sí, disponer de Internet es imprescindible y contar con una buena conexión no es opcional.
De partida, la idea pasa por una app gratuita en la Appstore de iOS, de modo que podemos usar nuestro dispositivo (iPhone, iPad o iPod Touch) como una segunda pantalla o para potenciar nuestras comunicaciones, lo cual no viene nada mal. Ahora bien, ¿hasta que punto cumple con nuestras expectativas?
De partida, podrás jugar a prácticamente cualquier juego de PS4 desde tu móvil. Tal y como suena. A lo que hay que sumar que tu móvil o tablet Apple pueden usarse como micrófono adicional, para escuchar lo que ocurre en el juego e incluso aprovecharte de que cuentas con una segunda pantalla en función de lo que necesites. Pero lo esencial es cómo lo hace.
Qué hacen el PS4 Remote Play y que diferencias hay con el PS4 Second Screen
Como comentamos, Sony ha habilitado una nueva app en la Appstore, aunque La manera más rápida de acceder a ella si ya tienes la app oficial de PlayStation instalada es pulsar sobre el nuevo icono, aunque también te dejamos el link justo abajo.
- PS4 Remote Play (Requiere Requiere iOS 12.1 o posterior)
Dicho de otro modo: además de tener el software actualizado, necesitaremos disponer de iPhone 7, iPad (6ª generación), o iPad Pro (2ª generación) o posteriores.
El Remote Play no viene a sustituir las funcionales del PS4 Second Screen que lleva un par de años disponible, aunque si no te dedicas a emitir tus partidas en streaming posiblemente ya no necesites esta última.
La idea principal es que con el PS4 Remote Play puedes acceder a todo lo que ocurre en tu PS4 a través de la red Wi-Fi, de modo que sólo necesitarás tres pasos para poder jugar desde cualquier lugar al que llegue tu conexión:
- Verificar el uso compartido desde tu PS4.
- Disponer de una cuenta de PSN que tendrás que validar en la App para asociarla a la consola (si no, cualquiera podría colarse en tu partida)
- Que tu dispositivo iOS esté conectado a la misma red que tu PS4.
Una vez hechos estos dos últimos pasos veremos cómo nuestro móvil aparece vinculado en la pantalla de nuestra TV y, a la vez, la imagen de queda fielmente reflejada en nuestro móvil, desplegándose un teclado virtual en pantalla con todos los botones de PlayStation.
Es interesante tener en cuenta que podemos usar nuestro dispositivo tanto en vertical como en horizontal. La elección es al gusto ya que que si preferimos ver todos los botones (incluidos los sticks) la pantalla quedará reducida a la mitad superior del dispositivo. Algo que no es conveniente en cualquier juego (FIFA, por ejemplo)
Un aporte interesante es que la si usamos el móvil en posición horizontal, los sticks y el botón táctil del DualShock pasan a ser invisibles. Siguen estando ahí y no son sustituidos por la cruceta, aunque habrá situaciones y juegos en los que posiblemente su uso se cobre un porcentaje de nuestra visibilidad.
En el caso de que usemos el móvil en vertical, el botón táctil pasa a ser la pantalla de juego.
Por último, el botón de Playstation, Share y Options quedan relegados a la parte inferior en todas las opciones, pudiendo ocultarlos si lo deseamos.
Ponemos a prueba el juego remoto en iPhone e iPad
De poco sirve tener todos los botones si no les puedes dar uso. Sin embargo, al final todo depende del juego que vayas a usar y, sobre todo, lo dispuesto que estés a sacrificar los gatillos durante las primeras partidas.
Existe un retraso con respecto a la pantalla, aunque hay que reconocer que es asumible en la mayoría de juegos (olvídate de jugar online en Dead or Alive 6 o de que tu coche llegue de una pieza en Dirt 2.0), aunque ya se nos advierte que esta app no es compatible con todos los juegos. Por nuestra parte ha funcionado a la perfección en aquellos que hemos probado.
El tema de la visualización tiene sus más y sus menos. Olvídate de la nitidez del juego remoto en PC, y verás petardeos en la imagen y el sonido en función del juego, así como unas caídas de resolución muy notorias, pero a efectos prácticos puedes jugar al modo historia o arcade de Dragon Ball FighterZ sin llegar a frustrarte.
La calidad de la experiencia es proporcional al apartado visual del juego. La caída de resolución afecta más a algunos juegos que a otros, y cuando las escenas están cargas de elementos -incluyendo cinemáticas- es imposible saber que está pasando.
Aunque no deja de ser una alternativa a la hora de jugar, desde luego.
La jugabilidad es quizás el asunto más delicado: no guardes tu PS Vita en el cajón todavía. Tenemos por delante que las pantallas táctiles no pueden competir -ni de lejos- con la fidelidad que ofrecen los sticks. Pero es posible jugar sorpresivamente mejor de lo esperado.
Por poner un ejemplo, durante nuestras partidas de Fortnite y Overwatch nos hemos podido desenvolver de manera más satisfactoria de lo que podría parecer inicialmente. Eso sí, en estos dos juegos en concreto nos topamos con un doble problema: la puntería sumado a que el gatillo digital ahora hay que usarlo con el pulgar.
Desafortunadamente, al menos en mi caso, el parpadeo o las distorsiones pueden llegar a ser un verdadero problema en los momentos menos oportunos.
Una ventaja añadida es que el la app ofrece chat de voz utilizando el micrófono de tu dispositivo móvil. Y va de maravilla. Aunque se hecha en faltan las opciones específicas que se ofrecen en PS4 Second Screen, como una pantalla dedicada íntegramente a los chats de texto cuando jugamos en streaming. Por otro lado, el hecho de poder introducir texto en PS4 usando el teclado de nuestro dispositivo móvil es más que agradecido.
Lo que le pediríamos a las futuras versiones de esta app es poder asociar el DualShock 4 a iPhone o iPad de manera inalámbrica, lo que sería un movimiento maestro para la consola de Sony permitiendonos llevar nuestras partidas a cualquier habitación o circunstancia.
En definitiva, la experiencia de RemotePlay en iPhone e iPad cumple con lo que promete con dos precios a pagar: es totalmente dependiente de la calidad de tu Internet y si estás muy acostumbrado a tu DualShock tienes que mentalizarte a jugar sólo con los pulgares.
Olvidate de jugar a FIFA 19, pero su sistema no impedirá que nos echemos unas partidas a juegazos Sonic Mania o partidas ligeras -aunque no competitivas- a Street Fighter V.
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