Uno de los videojuegos para dispositivos móviles que lleva acompañándome a todas partes desde hace siete años es Pokémon GO. A lo largo de los últimos siete años, no he parado de capturar Pokémon de todo tipo y uno de los dispositivos que me ha ayudado en esta tarea ha sido el Pokémon GO Plus +, dado que solo tenía que conectarlo y ya se ocupaba él solo de capturar a todo sin la necesidad de estar pendiente del móvil.
No obstante, el principal título para el que se creó fue Pokémon Sleep, otro de los títulos de la saga para dispositivos móviles que fue publicado este mismo verano. En su momento, me animé a darle una oportunidad simplemente para comprobar si realmente merecía la pena o si iba a ser algo que iba a desinstalar a los dos días. Lo que no me imaginaba es que después de varios meses iba a seguir enganchado hasta el punto de no haberlo ignorado ni un solo día desde su lanzamiento.
Eso sí, no quiere decir que sea perfecto, porque en realidad ha habido algunos detalles que me han crispado bastante a lo largo de todo este tiempo, aunque el peor de todos no se trata de uno del juego.
Buscando Pokémon a base de dormir
En este juego tomaréis el papel de un entrenador que recibe el encargo de ayudar al Profesor Neroli, quien se dedica plenamente a la investigación de los hábitos de sueño de los Pokémon. Para comprobar cómo se comportan, lo que hace es grabarlos mientras duermen para analizar sus hábitos y las diferentes posturas que adoptan cuando están descansando.
Para llevar a cabo este proceso, necesita la ayuda de un Snorlax, ya que este Pokémon tan glotón y dormilón se dice que es capaz de emitir un poder que adormece a todos los Pokémon que tiene a su alrededor. Es entonces cuando aprovecha para tomar las correspondientes fotografías y así profundizar en los detalles de su investigación de las posturas de los Pokémon mientras están totalmente sopas.
Partiendo de esta base, el objetivo es muy sencillo, dado que solo hay que realizar una única tarea: dormir. Así de simple, hay que acostarse en la vida real y el tiempo que pasas durmiendo es lo que afectará al resultado de la investigación. En este sentido, cuando te despiertas, el juego te dirá cuánto tiempo has pasado durmiendo y eso dependerá de la puntuación que te entregará a cambio, de forma que, cuanto mayor sea, más puntos obtendrás hasta un máximo de 100.
Eso sí, para llegar a semejante cantidad hay que dormir un mínimo de ocho horas y media. Sin embargo, no sé vosotros, pero yo no recuerdo cuándo fue la última vez que dormí tal cantidad de horas. Sobre todo porque suelo trasnochar demasiado y levantarme temprano para trabajar, así que reconozco que probablemente yo no sea el mejor usuario para un título como este en el que la finalidad es precisamente la de dormir.
En cualquier caso, al despertar por la mañana, es posible que el juego te asigne una de las siguientes tres fases de sueño: ligero, medio o profundo. Cada una de ellas dependerá de cómo hayas pasado esa noche. ¿Y exactamente cómo se mide? Pues dependiendo de cuánto te hayas movido mientras dormías. Por lo tanto, si eres de los que da muchas vueltas, será casi imposible que alcances la fase profunda, mientras que aquellos que caigan rendidos y se levanten en la misma postura serán los que tendrán complicado conseguir la fase ligera.
Esto no tendría mayor importancia si no fuera porque cada fase tiene asignada a unos Pokémon determinados. Así pues, hay algunas especies exclusivas que solo aparecerán durmiendo al lado de Snorlax en la fase ligera, otros en la media y otros en la profunda, pero como es algo que no depende exactamente de nosotros mismos, es como echarlo a suertes y confiar que por la mañana te despertarás con la fase de sueño que querías.
Y es que otro motivo por el que es tan importante descubrir la mayor cantidad de Pokémon y posturas diferentes se debe a que es la única forma de progresar en la aventura. Cuanto más avances en la investigación, más islas irás desbloqueando y así de paso acceder a más Pokémon distintos. Es por ello que aquellos que normalmente consigan las mismas fases de sueño progresarán extremadamente despacio.
Pero, ¿puede enganchar un juego de dormir?
La respuesta a esta pregunta es clara: sí. La mayor razón para ello es que nuestro cuerpo nos pide dormir sí o sí diariamente, así que simplemente te tienes que limitar a vivir tu día a día y, quizás, en el mejor de los casos mejorar tus hábitos de sueño si quieres progresar más rápidamente en el juego. Personalmente, no ha sido mi caso en absoluto, porque sigo durmiendo la misma cantidad (tan poca) de horas, pero como decía anteriormente, probablemente yo no sea el mejor ejemplo.
De todos modos, suelo dedicarle al juego unos 5-10 minutos al día, nada más. Simplemente, cuando me despierto por la mañana, lo primero que hago es abrir el juego para rellenar el informe diario de horas y puntos obtenidos y ver qué Pokémon han aparecido. Asimismo, a estos hay que darles de comer galletas para ganarse su amistad y que te ayuden diariamente en la investigación a base de entregar bayas y alimentos para dárselos de comer a Snorlax.
Esto se debe a que Snorlax va ganando puntos de vigor cuanto más grandote se vaya volviendo a base de atiborrarse a comer todo lo que le demos. Así de paso irá subiendo de nivel, lo que de paso influirá en la rareza de los Pokémon que surgen, por lo que al final todo es un ciclo constante. Y de nuevo he de hacer hincapié en el hecho de que todo depende sobre todo de cuánto duermas, y como es algo que hay que hacer todos los días, por eso me gusta hacer todo esto nada más levantarme.
Además, todo este proceso también sirve para que los propios Pokémon de los que te ganas su amistad vayan subiendo de nivel, obtengan mejores habilidades o evolucionen. Como buen coleccionista que soy, pues es un motivo de peso para que el juego me enganche tantísimo día sí y día también. No obstante, los niveles de Snorlax se reinician cada lunes, pero así es una manera de animarte a probar diferentes combinaciones de equipos o viajar a otras islas para avanzar en la apodada Dormidex.
Su objetivo es a su vez su mayor problema
Llegados a este punto, si nunca habéis jugado a Pokémon Sleep, tal vez os estéis preguntando cómo el juego es consciente de cuánto tiempo hemos dormido exactamente. Para ello hay dos métodos y ninguno de los dos es bueno, por no decir una auténtica… en fin, os podéis imaginar el calificativo negativo. Desde luego resulta curioso que una propuesta que se basa en dormir registre tan rematadamente mal este acto.
Una de estas formas es entrar al juego justo antes de irte a dormir, pulsar en la opción correspondiente y a partir de ese momento se pondrá a contar minutos. El problema está en que el móvil hay que dejarlo encendido y no se puede apagar la pantalla en ningún momento, lo que puede provocar un enorme gasto de batería o que se caliente en exceso. Motivos más que suficientes para que jamás me haya decantado por esta posibilidad.
Ahí es donde entra en escena la segunda de ellas y por lo que se creó el dispositivo Pokémon GO Plus +. En este caso al irte a dormir tienes que dejarlo a tu lado, pulsar en el botón del centro y nada más, pudiendo apagar el móvil y olvidarte de él. Por la mañana solo hay que conectar ambos y listo, así de simple. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce y es precisamente este dichoso aparato el que ha logrado enervarme en una innumerable cantidad de ocasiones.
Todo se debe a que el dichoso dispositivo no funciona tan bien como alguien esperaría. Uno se puede ir a dormir a las 2 o 3 de la madrugada, por ejemplo, y cuando te levantas por la mañana el juego igual te dice que te dormiste a las 4 o 4:30. Eso para empezar, pero es que a la que te muevas un poco más de la cuenta el aparato puede considerar que te has despertado y entonces deja de contabilizar más minutos.
Por lo tanto, puede que hayas dormido 5-6 horas y en realidad solo te haya registrado la mitad de tiempo, lo que perjudica considerablemente al progreso que hayas realizado hasta ese momento durante la semana. No obstante, a pesar de que pueda parecer que no se puede hacer nada para remediarlo, sí que hay un método para que contabilice la cantidad real: dejar el Pokémon GO Plus + en una superficie plana.
De esta forma, desde el primer momento que pulses el botón considerará que te has dormido y contabilizará a la perfección todos los minutos, pero la pega es que haciendo esto solo registrará fases de sueño profundo, nada más. Naturalmente no es la mejor solución, pero reconozco que este método ha sido uno de los mayores motivos por el que no he dejado Pokémon Sleep completamente de lado.
Así ha pasado que durante las últimas semanas es la solución que he empleado, pero sé que tarde o temprano tendré que colocarlo en la cama de nuevo si quiero avanzar en el progreso del resto de fases en la Dormidex. Por el momento me he aprovechado que los eventos de diciembre omitían este detalle al poder aparecer cualquier tipo de Pokémon, sin importar la fase de sueño, al igual que ocurrirá una vez más la semana que viene para celebrar el Año Nuevo y el inicio del 2024.
Por el momento, seguiré jugando a Pokémon Sleep porque me tiene muy enganchado dentro de su simpleza, aunque mi paciencia tiene un límite y como Pokémon GO Plus + me siga estropeando la experiencia lo acabaré mandando todo a paseo, sin importar que ya lleve medio año jugando.
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