Cae la primera pieza del tablero. Tras la demanda realizada por el estado de California contra Activision Blizzard, un cambio de dirección se acaba producir entre sus representantes. J. Allen Brack abandona su puesto de presidente en Blizzard "en busca de nuevas oportunidades", si bien todo apunta a que se trata de una de las grandes consecuencias tras la publicación de casos de acoso y abuso en la empresa.
Así lo ha anunciado la propia Activision en un comunicado en su página web, donde señalan que a partir de ahora Jen Oneal y Mike Ybarra actuarán como co-líderes de Blizzard. Ambos compartirán "la responsabilidad del desarrollo y la responsabilidad operativa de la empresa". Uno de los puntos que más se destaca sobre los dos es su compromiso con hacer de la compañía un lugar más acogedor y seguro.
Ambos son líderes de gran carácter e integridad y están profundamente comprometidos a garantizar que nuestro lugar de trabajo sea el entorno más inspirador y acogedor para la excelencia creativa y para mantener nuestros más altos estándares de desarrollo de juegos.
Oneal es una veterana que lleva 18 años en la industria, habiendo sido directora de Vicarious Visions. Entre sus últimos trabajos, se encuentra haber dado apoyo a las franquicias de Diablo y Overwatch. Por su parte, Ybarra ha trabajado 20 años en el sector de los videojuegos, siete de ellos como responsable principal de Xbox. Ha sido vicepresidente ejecutivo y gerente general de Battle.net.
Un comunicado desde la web de Blizzard nos permite leer el siguiente mensaje del propio J. Allen Brack, presidente saliente:
“Estoy seguro de que Jen Oneal y Mike Ybarra proporcionarán el liderazgo que Blizzard necesita para desarrollar todo su potencial y acelerarán el ritmo del cambio. Anticipo que lo harán con pasión y entusiasmo y que se puede confiar en ellos para liderar con los más altos niveles de integridad y compromiso con los componentes de nuestra cultura que hacen que Blizzard sea tan especial"
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