Uno de los aspectos más importantes en cualquier shooter que se precie es el aim o puntería. Hay que matar, no queda otra, y para matar debes apuntar al lugar adecuado. La precisión se adquiere con práctica, pero muchas veces nos preguntamos qué estamos haciendo mal o en qué podríamos mejorar para alcanzar ese extra que decida un 1vs1.
En el PLAYERUNKNOWN’S BATTLEGROUNDS (PUBG) tenemos que tener en cuenta, principalmente, la distancia a la que estemos disparando desde el objetivo, su dirección y su velocidad. No es lo mismo un duelo a corta distancia que a media o larga, y hay armas o complementos que nos ayudarán en la tarea, aunque nosotros debemos decidir cuándo usarlos.
Por desgracia PUBG aún no cuenta con una herramienta dedicada únicamente a la práctica, así que las partidas normales deben suplir esta función. No se tarda en exceso en entrar a una partida, así que morir rápido no es un problema. Si la práctica lo es todo, lo mejor que puedes hacer es aterrizar en zonas pobladas. Colegio, ciudades, base militar… Los primeros minutos de PUBG están enfocados al combate a corta distancia si caes en estos sitios, pero con el tiempo irás tomando rodaje.
Intenta evitar la opción cobarde (yo aún me estoy reformando), o que si la usas no sea porque asumas que vas a perder cada duelo que tomes. Cada batalla te curtirá en el noble arte de tener suerte y coger arma nada más aterrizar para matarlos a todos, y eso se va a notar en las decisiones que tomes según avance la partida y el círculo se vaya cerrando.
Otro consejo a tener en cuenta es encontrar tu sitio preferido para caer, de la lista de posibles destinos peligrosos. No es lo mismo pelear en una ciudad que en los recovecos de los contenedores de Georgopol o los pasillos del colegio. Con el tiempo te darás cuenta de cuál es tu favorito, y podrás hacer de ese sitio tu mayor ventaja para salir de allí con vida. Te conocerás el lugar como la palma de tu mano, sabrás los lugares donde suele esconderse la gente, cómo posicionarte y, en definitiva, sabrás moverte por el sitio mejor que la mayoría de los que estén allí.
En todos estos lances también acabarás encontrando el arma que mejor se ajuste a tu estilo de juego o con el que te sientas más cómodo. No porque la M416 sea la más popular te va a ir mejor si eres capaz de controlar como nadie el retroceso de una UMP y, por tanto, vas a acertar más balas. Haz que el modo ráfaga de la M16A4 se convierta en el nuevo meta o tus headshots con la ballesta sean recordados. No siempre se gana con una Groza y una AWM en el inventario.
Corta distancia
Los combates a corta distancia los vas a encontrar, sobre todo, al principio y final de la partida siempre y cuando prefieras tener un mid game seguro y tranquilo. En este tipo de peleas lo más importante es la velocidad con la que reacciones: de dónde te disparan, quién ha aterrizado contigo, dónde escuchas los pasos. Ser consciente de tu entorno te ayudará a acertar en tus decisiones y anticiparte al rival.
En esta situación el modo automático del arma es esencial por la cadencia de disparo y, con él, el retroceso del arma. A diferencia de otros juegos como Counter-Stike: Global Offensive, el retroceso en el PUBG no es siempre el mismo y varía con cada arma, pero es bueno tener en mente que la desviación vertical va a ser mucho más acusada que la horizontal.
En el retroceso influyen los complementos que podemos añadir a las armas y que, si bien no lo eliminan, facilitan el control. Los rifles de asalto tienen una atención prioritaria en el juego y siempre estarán en alguno de tus huecos del inventario, pero también hay que tener en cuenta cuál se ajusta mejor a tus habilidades. La AKM es, junto a la Groza, el rifle de asalto más poderoso, pero el retroceso de ambos es muy agresivo en automático. ¿Priorizo daño o priorizo control? Esa es una pregunta que debes responderte.
Aprender a cambiar la manera de apuntar desde la cadera a ADS o lo que es lo mismo, desde la mirilla a la altura de los ojos y hacerlo con rapidez también influirá en el resultado de la pelea. En el PUBG puedes apuntar desde la cadera sosteniendo el click derecho del ratón, apuntar desde los ojos con un click derecho rápido o pasar directamente a ADS con un doble click rápido del botón derecho.
La opción de disparar desde la cadera tiene más dispersión de balas y, por tanto, es menos precisa, pero si estás muy cerca o reaccionando rápido es igual de válida. Según se aleja el objetivo, deja de tener sentido y la mirilla del arma toma protagonismo. Aquí es cuando notarás de verdad el retroceso del arma, pero si controlas tus nervios puedes corregir sin problemas sobre la marcha.
Por defecto, la tecla shift delo teclado es la elegida para aguantar la respiración y también nos ayudará con la precisión. Siempre que apuntes desde una mirilla, siempre, recuerda pulsar el shift o aquella tecla que decidas en su lugar. A media y larga distancia hará que tu respiración no interfiera con el disparo, pero a corta también ayuda con el retroceso del arma, pequeño zoom a parte. Muchas veces se olvida este detalle, pero es imprescindible para seguir mejorando en el juego y, con el tiempo, se convertirá en un hábito.
Media y larga distancia
Las distancias medias y largas son un arte en sí mismo dentro del PUBG por la caída de las balas. Cada 15 días podemos ver disparos inverosímiles en las recopilaciones que hace dearsomeone en sus vídeos, y es que tienen su truco, especialmente las largas. Cuanto mayor es la distancia con el objetivo, más en cuenta hay que tener cómo de lejos está, dónde y si se mueve, y para ello existe lo que llamamos distancia de desplazamiento.
Al apuntar desde los ojos, te habrás dado cuenta de que en la parte inferior de la pantalla aparece una distancia de desplazamiento de 100 metros. Esto significa que el punto medio exacto (punta del triángulo si usas una x4) de la mirilla alcanzará al objetivo allá donde apuntes. Si sobrepasas o te quedas corto con esa distancia, tienes que modificar la distancia de desplazamiento para alcanzar dicho objetivo.
Ten en cuenta que cuando abres el mapa, cada cuadrado grande es 1x1 kilómetros, 100x100 metros si haces zoom y ves los más pequeños. En el mini mapa siempre estarás en el centro y la distancia a cualquiera de los cuatro lados será de 200 metros. Estos detalles vienen bien para hacerte una idea de la distancia a la que estás disparando para ajustar la mirilla. Si el objetivo está más lejos, deberás apuntar un poco por encima. Como ejemplo, cada raya horizontal de la mirilla x4 son 100 metros más.
Apuntar a un objetivo en movimiento teniendo en cuenta su velocidad es lo que añade más dificultad a estos cálculos. Un jugador corriendo o un vehículo a la fuga son blancos comunes, y para esos casos debemos modificar aún más nuestra distancia de desplazamiento y desplazarla un poco (o bastante) por delante del objetivo para alcanzarlo con éxito.
Lo mejor para estos casos es corregir sobre la marcha. Por supuesto, en medio de una pelea no nos vamos a poner a contar los metros a los que están los enemigos, pero con la teoría en la mano la práctica es más sencilla. Corregir con un arma automática o semiautomática es más fácil, pero con la Kar98k o la M24 también puedes ver dónde cae la bala y volver a apuntar en consecuencia.
Con el tiempo, la corrección del disparo se convierte en un hábito, al igual que pulsar el shift al apuntar o cambiar al modo automático dependiendo de la situación. Saber protegerse con el entorno también es crucial, y aprovechando la cobertura nunca viene de más inclinarse con las teclas Q y E por defecto para no dejar expuesto tu cuerpo al completo. Si tienes oportunidad, mira también streamings de vez en cuando, porque no hay mejor forma de aprender que observar a los mejores.