Los droides de Star Wars son mucho más que meros trozos de metal, circuitos y directrices. Lucasfilm y Disney los han usado durante décadas como un reclamo para los espectadores, ya sea transmitiendo adorabilidad y/o como recurso cómico. Los más conocidos (y vendidos en merchandising) son R2D2, C3P8, BB-8 y BD-1. Sin embargo, los fans de Star Wars: The Clone Wars saben muy bien que los droides de combate separatistas pueden llegar a ser el Club de la Comedia.
Hemos visto muchos momentos graciosos de los Droides de Combate, concretamente de los modelos B1. Son los más extendidos en la cultura popular y a menudo la imagen del bando Separatista en las Guerras Clon. Por regla general, están lejos de ser eficientes en combate, pero su sentido del humor nos ha dejado momentos irrepetibles.
Y no solo son graciosos, también un poquito chismosos y cotillas. Encontramos la prueba en uno de los enfrentamientos más icónicos: Obi-Wan Kenobi vs General Grievous en Star Wars: La Venganza de los Sith. Si paráis la película (versión de Disney Plus) en el minuto 1:21:57 o del minuto 0:45 del vídeo que tenéis bajo este párrafo, veréis cómo un droide da un toquecito a su compañero distraído para que no se pierda cómo Grievous desenfunda sus cuatro espadas láser.
Si queréis saber más detalles sobre este combate, ya os hablamos sobre el origen de la moto que utiliza Grievous durante el mismo y que originalmente la muerte del general iba a ser mucho más... brutal, por así decirlo. En cuanto a los droides, también os revelamos que existió uno que se pasó el bando de la República, actuó como espía e incluso se ganó el respeto de Anakin, llegando a pedirle una espada láser. Pero si queréis ver más payasadas, os recomendamos The Clone Wars.
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