En ocasiones algunos jugadores nos dejan con la boca abierta con las hazañas que llevan a cabo a la hora de pasarse los videojuegos. Un buen caso lo tenemos en un experto de Pikmin, porque ha estado trabajando en la manera de completar la aventura con la menor cantidad de lanzamientos posibles. Algo sorprendente teniendo en cuenta que esta es una de las funciones principales y más necesarias del título de GameCube.
Esto se debe a que a los Pikmin hay que arrojarlos para que recojan objetos que hay por el suelo, para combatir enemigos o para que alcancen lugares a los que no se puede acceder de otra forma. Sin embargo, este jugador en cuestión ha encontrado la manera de no tener que recurrir a estas acciones prácticamente en ningún momento, ya que tan solo ha necesitado un total de tres lanzamientos, nada más.
En las últimas semanas ha estado trabajando duramente en este reto tan curioso y aparentemente tan complicado. Aun así, poco a poco ha ido reduciendo la cantidad necesaria hasta llegar a 35 lanzamientos, pero estaba convencido de que podía bajar la cifra más todavía, algo que lo consiguió a base de investigar rutas y realizar trucos de todo tipo aprovechando los errores del juego.
Como se puede ver en el vídeo que demuestra esta hazaña, obtiene fácilmente 12 de las 30 piezas necesarias para reparar la nave de Olimar. En cambio, para las 18 restantes se las tuvo que ingeniar de múltiples maneras, como por ejemplo llamar a los Pikmin desde determinados lugares para que atraviesen partes del escenario, algo que logra con el propio Olimar, lo que le permite escalar por zonas de los niveles a las que se supone que no debería de tener acceso.
De hecho, solo necesita al pequeño protagonista para empujar ciertos objetos que son necesarios para que posteriormente se ocupen de ellos los Pikmin. En cuanto a los tres lanzamientos, solo los emplea para tres jefes finales con los que no ha encontrado la manera de acabar con ellos que no sea arrojando a un solo Pikmin, aunque lo más alucinante de todo es las tácticas que ha pensado para que todo esto sea posible, por lo que el vídeo no tiene desperdicio.
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