¿Quién no ha querido pasar sus vacaciones alguna vez en la Toscana italiana? Un paraje único, con estampas de ensueño y en el que es imposible no relajarse...a menos que estemos en pleno conflicto bélico y con una pérdida familiar por medio.
1944, la Segunda Guerra Mundial se encuentra en su apogeo y la lucha entre el ejército del Eje y los Aliados se recrudece. Bajo este contexto, una muchacha aparece muerta en un lago y las extrañas circunstancias alrededor de su muerte desencadenan imprevisibles consecuencias.
Martha Is Dead propone esta premisa, en la que el folklore de la zona en la que nos encontramos juega un papel vital. Tras haber tomado contacto con el título dirigido por Luca Dalco, todo apunta a una propuesta que transita entre el horror y la tensión psicológica.
Ni terror, ni survival horror
La primera vez que pude ver Martha Is Dead, llamó mi atención su puesta en escena, valiéndose de diferentes representaciones realizadas con marionetas. Una fobia popular y que bien explotada puede lograr bastantes puntos entre el público. Sin embargo, no he probado estas secciones durante mi tiempo de juego, por lo que todo indica que se trata de un apartado más puntual para el título.
La sección que he podido jugar nos traslada día a día tras el fatídico acontecimiento. Durante toda la partida, tuve la clara sensación de que en algún momento la acumulación de tensión iba a estallar en forma de jump scare o con un sonido de estruendo. Nada más lejos de la realidad.
Durante la presentación, Dalco nos dejó claro que no estamos hablando del formato habitual de un juego en el que el pánico nos acecha por la espalda. El responsable se refiere a Martha Is Dead como un thriller psicológico, que si bien en algunos puntos logra tocar el horror, juega más con la mente. Los conflictos propios y ajenos que se encadenan en la psique son la principal vía por la que transcurre la obra.
El contraste también juega su papel. La Toscana es bella y luce espectacular con el Unreal Engine 4 en marcha, especialmente durante los soleados días en los que se logra apreciar el buen trabajo artístico y gráfico. Con todo, la luz siempre proyecta sombra y también puede ser un lugar idóneo para hacernos pasarlo mal. Los sótanos de la casa en la que vivimos no son muy acogedores a ninguna hora del día, al igual que la zona de mercería.
Si eso sucede durante las horas de sol, la noche no se queda a la zaga. Tenebrosa, oscura como una cueva, nuestro salvador será un farol o mechero que cumplen perfectamente con su función: apenas iluminar. No se debe entender como una crítica, sino como una perspectiva interesante, ya que no podemos dirigir la fuente de luz y ésta únicamente apunta hacia abajo. Por lo tanto, apenas vemos algo más allá de nuestros pasos, lo que genera una gran incertidumbre al avanzar.
No faltan tampoco los tramos totalmente perturbadores e imaginados, sacados de una mente inestable, haciéndonos recorrer un bosque en busca de palabras para formar frases o servirse del gore para reflejar lo que está sucediendo en la vida real.
Un álbum inquietante
No estamos solos en este viaje. Una compañera inseparable se unirá a nosotros, en forma de cámara fotográfica de la época. Es la principal herramienta de acción y que nos permite tomar fotos de cualquier cosa que queramos, recordando a Project Zero. Eso sí, existen diferentes puntos de interés que nos revelan más información si realizamos una instantánea.
Este punto es clave en Martha Is Dead, ya que la recreación del uso de una cámara de antaño está perfectamente simulada. No todo es tan sencillo como colocar un trípode, apuntar a donde queramos y presionar el botón. Al igual que sucede en la realidad, tendremos que tomar una buena posición o girar las manivelas para establecer un correcto enfoque, todo ello señalizado a través de marcadores para asegurarnos de que la foto es excelente.
No termina aquí el proceso. Estamos hablando de una cámara que utiliza un carrete que debe ser revelado, así que no debemos fallar a la cita con la sala roja. Imprimir, encuadrar y un paso por el baño para ver el resultado de lo que hemos fotografiado. El juego ya nos avisa de que se ha reducido la cantidad de pasos reales a realizar, favoreciendo el dinamismo de toda una experiencia resumida en pequeños minijuegos.
Apenas me acostumbré al aparato y ya pude comprobar que tendrá incluso mejoras a lo largo del juego. Un flash, imprescindible para los momentos más oscuros, se incorporó a la cámara y todo apunta que la versión de la cámara entre que comenzamos el título y el final, será realmente diferente.
No todo será buscar la mejor estampa. Como en muchos juegos de este corte, tocará leer y escuchar mucho. Los escenarios cuentan con varios objetos que podemos comprobar, acompañándose de reflexiones internas (recomendado el doblaje italiano) y que nos aporta nuevos datos para la trama. A su vez, podremos hacernos con otros elementos que nos valdrán más adelante.
Esto es debido a que Martha Is Dead cuenta con varios objetivos. Tenemos un diario en el que se recoge, ya no solo las misiones activas, sino todos los diálogos realizados en orden cronológico, perfecto para ese repaso si no hemos estado atentos. A su vez, habrá que echarle un vistazo de vez en cuando, ya que nos encontraremos con más pensamientos plasmados en el papel de todo lo que le está sucediendo al personaje.
Realmente interesante el apartado relacionado con el mapa, ya que si bien no tuve tiempo a explorarlo todo, parece realmente grande. No estamos hablando de un juego claramente lineal, sino que ofrece un buen grado de exploración, sin que se acerque ni mucho menos a un mundo abierto. Cabe añadir que existen diferentes opciones de diálogo y acción, que a falta de realizar más pruebas, no queda claro si realmente escoger entre una u otra realmente repercute en la trama.
Martha Is Dead baila entre el agua del terror y el del suspense. En ese equilibrio se mantiene y, por lo visto hasta ahora, maneja la tensión sin esfuerzo. Un título atractivo para los amantes del género, que llegará a PS4, PS5, Xbox One, Xbox Series X/S y Steam en una fecha de lanzamiento todavía por anunciar para este 2021.