El Arte de A Plague Tale: Requiem, de GTM Ediciones: el alma y la esencia del videojuego de Asobo llevada al papel

¿Sabías que se llegó a plantear que Amicia, la protagonista de A Plague Tale: Requiem, tuviese un brazalete lanzallamas en el juego? ¡Un brazalete lanzallamas! La idea es que pudiese escupir espectaculares bocanadas de fuego desde un saliente colocado desde su antebrazo. Una cosa espectacular. La nueva maravilla de Asobo Studio no necesita esa clase de inventos para ser una obra maestra, pero imaginar cómo hubiese cambiado el juego de haber pasado el corte le da un valor especial a El Arte de A Plague Tale: Requiem.

Publicado por GTM Ediciones (la misma editorial de otros libros obligadísimos como Crónicas Yakuza, el Libro Hueco o El Arte de Blasphemous), y distribuido por la propia Plaion España, El Arte de A Plague Tale: Requiem es un exquisito compendio que refleja el trabajo, el nivel de detalle y el cariño que Asobo puso en su mayor proyecto propio hasta la fecha. Una secuela a A Plague Tale: Innocence que, según se cuenta en el libro, no estaba planeada originalmente. Pero, claro, aquel universo que combina la crudeza del medievo francés y acertadas pinceladas de fantasía todavía tenía una gran historia que contar.

El Arte de A Plague Tale: Requiem es el making of definitivo del juego en formato de papel. De hecho, cuenta con una edición especialmente atractiva: GTM Ediciones no solo ha cuidado el formato con un volumen apaisado que lo distingue de sus otros libros y con cubiertas de tapa dura al cromo mate encuadernado en hilo. Pero todo eso caería en saco roto si fuese un mero artículo de decoración. Lo bueno es que no tardamos en descubrir que este Artbook no solo emana el mismo cariño que Asobo puso en el juego, sino que le da a este último un valor mucho más especial y, en un mismo movimiento, nuevos matices al propio videojuego.

Un libro que es, a todos los efectos, el acompañante perfecto para la odisea de Amicia y Hugo, así como la excusa perfecta para darle una segunda jugada a A Plague Tale: Requiem. Ampliando lo mostrado en el juego no solo desde el punto de vista artístico al detenerse en sus pequeños y grandes detalles, sino también desde el punto de vista creativo: el fundador de Asobo David Dedeine, el director del juego Kevin Choteau, el guionista jefe Sébastien Renard y los principales responsables de A Plague Tale: Requiem aportan al libro tanto como las propias imágenes y piezas de arte a través de notas de pie de página, entrevistas y textos muy bien maquetados.

Convirtiendo, a todos los efectos, El Arte de A Plague Tale: Requiem en el libro esencial para aquellos que quedaron deslumbrados ante el videojuego. No solo a nivel de narrativa o de presentación, por supuesto, sino especialmente del viaje emocional de Amicia y Hugo. Estableciendo con palabras los pensamientos y motivaciones de éstos a lo largo de esta nueva aventura. Ofreciendo respuestas a preguntas que, quizás, ni siquiera nos habíamos planteado. Y, en última instancia, aportando todavía más matices, trasfondo, peso y significado, a uno de los mejores juegos de 2022.

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El Arte de A Plague Tale: Requiem, el alma y la esencia del videojuego llevada al papel

Como comentamos, A Plague Tale: Requiem es un viaje emocional en todos sus aspectos. Su historia toma la forma de videojuego de aventuras e infiltración con un muy potente componente cinemático, de modo que puede trasladarse a otros medios como el cine, la televisión o las novelas, pero ningún otro formato logra empaparnos tanto en la crudeza de la época, la belleza de sus paisajes y hasta experimentar lo mejor y lo peor de la gesta que a través de unos mandos. El Arte de A Plague Tale: Requiem no se mide con el videojuego, sino que le da un valor todavía más especial al resultado.

Como todo libro de arte, El Arte de A Plague Tale: Requiem se apoya especialmente en su contenido visual. Tenemos enormes ilustraciones que fundamentan y sacan un partido espectacular al formato apaisado del libro poniendo en común tanto el material dibujado y de referencia que se usó para dar forma a la secuela de A Plague Tale: Innocence como los resultados finales, incluyendo espectaculares fotografías del juego o unos modelos de personajes rebosantes de detalles que, además, ganan peso con las notas y comentarios a pie de imágen.

Los paisajes y el contexto son reclamos mayores en el videojuego, y en El Arte de A Plague Tale: Requiem además se le aporta todavía más importancia a éstos gracias a unos textos convenientemente integrados en las páginas principales para no eclipsar el poderío visual de las ilustraciones, pero capaces de ofrecer la misma riqueza: en cada uno de ellos el equipo de Asobo se sincera sobre lo que querían despertar en el jugador a través de cada localización o cada secuencia. Logrando que el lector empatice con ellos y entienda los aspectos más sutiles de manera diferente.

Como comentamos al principio, hay montones de ideas, conceptos y diseños que se quedaron en el tintero. O, más bien, que no pasaron de ser una imagen conceptual sobre posibles ideas. A veces apariencias para los personajes principales que no pasaron el corte y otras escenas o mecánicas que se podían desviar demasiado del tono del juego. Y eso que A Plague Tale: Requiem suele intercalar elementos de fantasía para mantener un cierto equilibrio emocional y ápices de esperanza y superación en el jugador de cara la realidad que se manifiesta cada vez con más crudeza en el juego.

En lo referente al formato en el que se nos presentan los contenidos, GTM Ediciones vuelve a acertar al ofrecer una toma de contacto inicial en la que se nos ofrece la visión del estudio de desarrollo frente al desafío de dar forma a una secuela no planificada, una introducción al universo y los personajes con su muy necesario resumen del primer título en dos sencillas páginas especialmente amenas de leer y, posteriormente, se explaya tomando como referencia las cuatro grandes localizaciones y etapas en las que transcurre la trama. Desde la Provenza a un epílogo que no detallaremos aquí, pero cuyo desglose justifica perfectamente que añadamos el libro a nuestra biblioteca.

A partir de la página 192, este compañero al viaje emocional de los protagonistas del videojuego comienza a cerrarse sumando tres aportaciones muy especiales al lector. La primera es una guía para Cosplay de Amicia en la que se desglosa al detalle cada uno de los elementos que componen su vestuario o los más sutiles matices del modelo del personaje. El segundo es la primera pieza de arte conceptual creada para A Plague Tale: Requiem, en blanco negro y con la firma de Olivier Ponsonnet (no podía faltar en este compendio). Finalmente, una carta escrita por Neil Druckmann, de naughty Dog, en la que el creativo de Uncharted y The Last of Us se deshace en elogios al videojuego de Asobo. Y no es para menos.

Una edición fantástica para uno de esos juegos que dejan huella

El Arte de A Plague Tale: Requiem se niega en rotundo a pasar desapercibido como libro. No solo por sus contenidos, los cuales dan un valor adicional al videojuego, sino por un formato casi de libro de mesita que lo hace sobresalir en las estanterías lo coloques como lo coloques.

Que su formato sea apaisado lo hará sobresalir de tu biblioteca si lo colocas junto a otros libros de arte o tomos esenciales como los de Hyrule Historia. Pero lejos de ser algo malo, está muy bien aprovechado: GTM Ediciones aprovecha el formato para darle más peso a las ilustraciones e imágenes. Más riqueza al material original. Un acierto de todas todas.

A diferencia de otros libros de arte basados en juegos con un potente componente cinematográfico, gracias a la disposición apaisado es posible ofrecer una maquetación más generosa en imágenes que da amplios márgenes para introducir textos con aportaciones del director, los diseñadores o destacados miembros del estudio de un modo que no lograría hacerse con el formato tradicional.

A veces con imágenes que ocupan dos páginas, otras salpicando de diseños y otras con detallados storyboards de secuencias completas.

Lo cual nos lleva de lleno al tema de los inevitables spoilers del juego. La edición que nos trae GTM Ediciones se mantiene fiel al original construyendo el libro de modo que al empezarlo no serás consciente de lo que ocurrirá a posteriori. De hecho, la mejor manera de disfrutar El Arte de A Plague Tale: Requiem es compaginar nuestros propios avances en el videojuego con la información y las piezas visuales y escritas de sus páginas.

Ahora bien, si avanzamos demasiado sin haber completado la aventura es más que probable, por no decir seguro, que nos encontremos con sorpresas y revelaciones destinadas a experimentarse con los mandos en la mano y no en papel.

Y, sin embargo, todas esas dudas, incertidumbres y cualquier posible lazo suelto que nos haya quedado al llegar al final de A Plague Tale: Requiem queda totalmente resuelto en su libro de arte. Culminando y poniendo el broche perfecto al viaje de Amicia y Hugo a través del formato de papel.

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La opinión de VidaExtra

El Arte de A Plague Tale: Requiem es un soberbio compendio que no puede faltar a quienes han vivido el videojuego. Complementa, enriquece y añade nuevos matices a lo que se experimenta en pantalla y, a la vez, transmite todas esas ideas no implícitas en el desarrollo de los acontecimientos a través de un formato que acentúa el talento de Asobo Studio y su empeño por calar y dejar huella en el jugador a través de la crudeza de un periodo hostil y la valentía y perseverancia de sus protagonistas.

Hay un matiz que merece una mención muy especial y que nos hemos guardado para el final: si bien, al mirar en las primeras páginas nos encontramos con que la idea, las entrevistas a los creadores, los textos y el grueso del trabajo son autoría de Jean Zeid (autor de los también recomendables aunque en francés Art et jeux vidéo o L'art de Quantic Dream), la versión que nos trae GTM Ediciones junto con Plaion cuenta con todos los textos exquisitamente traducidos de Ramón Méndez González, una autoridad en la materia cuyos diez años de experiencia se notan en cada página del libro.

Porque hay algún desliz si nos ponemos extremadamente puntillosos, pero localizar un libro tan excepcional El Arte de A Plague Tale: Requiem requiere un tacto especial con el tratamiento de los acontecimientos, e incluso las páginas en las que sólo se muestran imágenes o arte conceptual que fue descartado hay muy pequeñas referencias. Y todo cuenta.

Tras el epílogo, el propio Neil Druckmann establece que las ilustraciones recopiladas en el propio libro de arte son, palabras textuales, de las mejores que jamás ha visto en un juego. Definitivamente, éstas suman puntos adicionales. Pero solo son el reflejo y la suma del impresionante trabajo que un estudio relativamente modesto, al menos en comparación con otros como por ejemplo la propia Naughty Dog, han logrado poniendo empeño, corazón y alma en un videojuego.

Así, El Arte de A Plague Tale: Requiem no solo es el broche dorado al viaje creativo para darle forma al videojuego, sino una estupenda extensión del mismo que se pone a disposición de los jugadores. Logrando que aquellos que quedaron sacudidos, impactados, encandilados a veces y fundamentalmente impresionados con el viaje a través de lo imposible de Amicia y Hugo lo atesoren como esos antiguos álbumes de fotografías que de vez en cuando se sacan y en el que cada imagen y sus pequeños detalles tienen su propia historia. Elementos que, sumados y en conjunto, logran que el libro de arte oficial de A Plague Tale: Requiem sea tan imprescindible como el propio videojuego.