Análisis de Hi-Fi Rush: el mejor juego de Xbox en mucho tiempo es también un firme candidato a GOTY 2023

Análisis de Hi-Fi Rush: el mejor juego de Xbox en mucho tiempo es también un firme candidato a GOTY 2023

16 comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail
Hi-Fi Rush

Lo va a tener difícil teniendo en cuenta todo lo gordo que se nos viene en 2023, pero aunque la lucha por el GOTY vaya a ser encarnizada, dudo mucho que vayamos a encontrarnos con algo tan divertido, pulido y original como Hi-Fi Rush en los próximos meses.

La gran sorpresa de Tango Gameworks y Microsoft sirvió para dar alas a los que creemos que otra industria del videojuego es posible. Que los riesgos pueden convertirse en increíbles sorpresas, y que ahorrarte un pastón en marketing con algo tan simple como un “esto existe, juégalo ya” puede servir para dar forma a un videojuego soberbio.

Entre Dreamcast y Platinum Games

Rompiendo con todo lo que habían mostrado hasta ahora, Hi-Fi Rush es mucho más que un juego de acción y ritmo con un aspecto visual para enmarcar. Como si los astros del “casi muertismo” se alinearan, lo de Tango huele tanto a Dreamcast como a Platinum Games, y esa es una mezcla que quienes somos fans de lo mejor de aquella plataforma ya desaparecida, y lo más celebrado de un estudio en decadencia, no podemos evitar aplaudir.

De la mano de Chai, un joven que se ve envuelto en la conspiración de una compañía dedicada a mejorar humanos a base de implantes robóticos, nuestro protagonista acabará envuelto en una batalla contra los jefazos de esa megacorporación con un brazo con poderes y un reproductor de música como corazón.

Esa última es la excusa para que todo lo que ocurre en Hi-Fi Rush, desde nuestros ataques hasta los elementos que hay por el escenario, se muevan al ritmo de la música. Hasta la interfaz o los golpes que dan los enemigos vendrán marcados por un metrónomo que regula hasta el más mínimo detalle del juego y su jugabilidad.

Hi-Fi Rush podría quedarse en eso, en un juego de acción más con la excusa de la música como nota discordante, de no ser porque el nivel de orfebrería que hay detrás de cada una de sus decisiones lo convierten en uno de los títulos más redondos que han caído en nuestras manos en muchísimo tiempo.

El ritmo de Hi-Fi Rush en manos de un arrítmico

Permitidme que, antes de nada, hable del elefante en la habitación. Si has llegado hasta aquí, aún no has probado el juego, y estás en las Antípodas de ser una de esas personas que tiene el ritmo en las venas, creo que te conviene saber que quien escribe estas líneas es uno de los cachos de carne con ojos más arrítmico que te puedes echar a la cara. Y pese a ello, entre mis récords de puntuación dentro del juego casi todo se reduce a puntuaciones A o incluso S.

Con la clásica dualidad de ataques flojos y fuertes, los combos de Chai deben realizarse al ritmo de la música, sí, pero el juego no te pone ninguna traba si eso no es lo tuyo. No es menos cierto que para alcanzar las puntuaciones más altas tendrás que aprender a seguir el compás que marca el juego, pero Hi-Fi Rush te lo pone tan fácil para conseguirlo que parece pura brujería de unos y ceros.

Hi-Fi Rush

Además de varios niveles de dificultad que son más o menos benevolentes con los errores a la hora de pulsar un botón, el juego cuenta con suficientes ayudas para que seguir el ritmo nunca sea un problema. Aquí podría hablar del gato que te acompaña marcando el ritmo de forma visual, o de todos los otros elementos que se incluyen para apoyar en ese sentido, pero en realidad hay algo mucho más simple que eso.

El tiempo que tarda el personaje entre que pulsas el botón de ataque y realizar la animación está hilado también a ese mismo compás, así que si cuando tu particular espada toca el cuerpo del enemigo vuelves a pulsar el mismo botón, ya estarás atacando al ritmo de la música casi sin darte cuenta de ello. Y sí, con los ataques fuertes y más lentos, de dos compases, la estrategia funciona igual de bien. El juego hace todo lo posible porque pelees lo mejor posible mientras disfrutas de sus combates.

Un combate formidable

Es ahí, entre demenciales peleas contra masillas esperando a que les sueltes tu combo más espectacular, o frente a jefes finales que te tienen esquivando, haciendo parry y desviando proyectiles, donde Hi-fi Rush brilla con una luz especial, pero no es el único punto en el que lo hace.

El despliegue visual del que goza, a medio camino entre un anime occidentalizado y una serie de dibujos plagada de chascarrillos de Cartoon Network, es una de las cosas más bonitas que han pasado por nuestros ojos recientemente. Un logro pulido hasta la extenuación que bien podría compararse sin ningún tipo de reparo con otros grandes logros de la animación como las últimas películas de Spider-Man.

Ver a Chai moverse al son de la música, o comprobar hasta qué punto los movimientos del escenario y los enemigos lo hacen también al unísono es una de esas experiencias que son fáciles de catalogar como imprescindibles. El nivel de cuidado es tan despampanante que, hasta las narices de la cantinela de los graficotes, ojalá todos los juegos tomasen este camino.

Recordando por momentos a Sunset Overdrive en su planteamiento estético, los primeros compases de la aventura nos hicieron llorar un poquito por no estar ante algo tan ambicioso como el juego de Insomniac Games, pero lo cierto es que la linealidad de su aventura le acaba sentando de fábula y, para cuando quieres darte cuenta, ya has aprendido a apreciar que esto en un mundo abierto no habría sido ni la mitad de redondo.

Su peor cara: las plataformas

Enviado a la guerra del mercado como un juego de precio reducido (me flipa que esto sólo cueste 30 euros), puede que incluso querer ser más de lo que debería a veces le juega una mala pasada. Pese a gozar de unas 10 horas de aventura, un buen puñado de desafíos esperando a ser completados, multitud de secretos a descubrir, ataques a desbloquear, e incluso un modo reto en el que ir superando oleadas de enemigos, lo único que podríamos reprocharle a Hi-Fi Rush es que por momentos intenta alargarse más de la cuenta.

La repetición de ciertas secciones, aunque con otras zonas de plataformeo y enemigos para aportar algo de variedad, a veces se sienten demasiado repetitivas como para no arquear un poquito la ceja. Una experiencia alargada de forma artificial sin ninguna necesidad que, de haberse quedado en apenas siete u ocho horas habrían dejado un sabor de boca aún mejor.

Donde no hay tela que cortar, me temo, es en la poca mano que siguen teniendo este tipo de juegos para los saltos. Las zonas de plataformas a menudo se sienten torpes e imprecisas, lo que sumado al salto de un personaje con mucha altitud pero poco control en el desplazamiento aéreo, da para un buen puñado de ocasiones en las que toca repetir una sección.

Hi-Fi Rush

Por suerte el juego es plenamente consciente de ello y, lejos de encabezonarse en el reto, casi todo lo que haces es lo suficientemente ágil y accesible para que lo importante sea descansar de las peleas y recrearte con los mil y un detalles escondidos en sus escenarios y toda la acción que ocurre a su alrededor.

La opinión de VidaExtra

Ni necesitamos juegazos enormes de grandes presupuesto, ni revoluciones de mecánicas destinadas a cambiar el curso de la industria, ni mucho menos gráficos fotorrealistas apoyados por la nube y mejorados por la IA. Lo que necesitamos y queremos es algo tan simple como Hi-Fi Rush.

Un juego original y tan bien pensado como ejecutado que, con tan sólo ponerte a los mandos durante los primeros minutos de la aventura ya seas capaz de presentir que estás ante uno de tus nuevos juegos favoritos. Puede que Microsoft y Xbox no pasen por su mejor momento a nivel creativo, pero juegos como Hi-Fi Rush son la excusa perfecta para recuperar la fe no sólo en su papel dentro de esta industria, sino también en el futuro del videojuego que tenemos en el horizonte.

Imprescindible

Hi-Fi Rush

Hi-Fi Rush

Plataformas Xbox Series y PC (versión analizada)
Multijugador No
Desarrollador Tango Gameworks
Compañía Microsoft
Lanzamiento 25 de enero de 2023

Lo mejor

  • Un estilo visual alucinante
  • Combate original pero accesible
  • Funciona como un reloj suizo

Lo peor

  • A veces se alarga en exceso

Comentarios cerrados
Inicio