A estas alturas no os contamos nada nuevo al decir que Suicide Squad: Kill the Justice League no ha salido bien parado desde que fue publicado en febrero. Entre las malas criticas que recibió y que la cantidad de jugadores está por los suelos desde el pasado mes de abril, el juego de acción del universo de DC no ha logrado levantar cabeza y eso ha provocado una grave situación en Rocksteady.
Según ha informado Eurogamer, algunos empleados se han puesto en contacto con el susodicho portal para informar de que recientemente se ha producido una oleada de despidos por el bajo rendimiento que ha obtenido el título. Debido a esto, el departamento de control de calidad se ha reducido a la mitad, lo que supone que de los 33 miembros que formaban parte de él solo 15 han conservado sus empleos.
Y no son los únicos que se han visto afectados por todo esto. Por ejemplo, un miembro de la compañía ha expresado que ha sido despedido durante este último fin de semana mientras estaba de baja por paternidad. Todo esto supone que los que todavía forman parte del equipo contarán ahora con una carga de trabajo muy considerable, como han señalado algunos de los empleados que han solicitado permanecer en el anonimato.
Además, no es que se haya optado por prescindir de los que llevaban poco en la empresa. Si bien es el caso de algunos de ellos, también se ha despedido a varios que llevaban trabajando para Rocksteady desde hace más de cinco años. Esto nos deja con una situación muy polémica sobre la que no se ha querido pronunciar todavía el propio estudio, al igual que Warner Bros. tampoco ha mencionado nada al respecto.
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