Cuando dejas en manos de auténticos maestros una herramienta con gran potencial, se pueden llegar a producir fantasías de todo tipo. Y es que en Digital Foundry han sido capaces de conseguir que una Xbox Series X tenga instalado en su interior Windows 98 para poder jugar a todo tipo de catálogo retro.
¿Cómo ha sido posible? El mérito se lo podemos atribuir a DOSBox Pure, un emulador de RetroArch, junto a una copia del antiguo programa de Microsoft. Para que todo ello funcione es necesario acceder al Modo Desarrollador de la consola de nueva generación a través del Programa de Partners de la compañía estadounidense.
Una vez hecho y tras configurar DOSBox Pure con una copia de Windows 98, ya está todo listo. Eso sí, hay que tener en cuenta que se debe jugar con el mando de Xbox actuando como ratón, ya que el sistema sí detecta un teclado, pero no puede hacer lo mismo con el otro periférico. A partir de este punto, desde Digital Foundry no tuvieron mayores problemas a la hora de jugar a Turok , RollerCoaster Tycoon y Command & Conquer: Tiberian Sun.
Lo mejor es que todas las obras funcionan perfectamente en la Xbox Series X y el rendimiento es ligeramente superior al de un PC de la época. Además, también consiguieron que Paint y Word 97 corriesen de forma normal. Una demostración más de cómo la comunidad exprime las posibilidades, tal y como sucede cuando se consigue que Doom funcione en prácticamente cualquier cacharro.
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