Vamos a por el más dificil todavía. Ni pantallas planas, ni alta definición, ni plasma, ni LCD, ni nada por el estilo. Al parecer, no hace falta tener un televisor de miles de euros ni de chorrocientas pulgadas para poder echar una partidita a tu consola favorita.
Y si no, que se lo digan a este japonés, que ha conseguido jugar con su Wii en un televisor de sólo una pulgada y media, más pequeña que la de muchos móviles. Esto si que tiene mérito, porque seguramente te quedes bizco antes de poder terminar una partida en condiciones.
Y yo me tendré que estar haciendo mayor o algo, porque cuando yo era chico los juguetes no tenían estas tecnologías, como mucho iban a pilas... ¿Una (mini-)pantalla que funcione en una casa de muñecas? Esto se lo cuento a mi abuela y me toma por loco.
Vía | Ecetia
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