La industria del anime ha ido creciendo a lo largo de los últimos años y, como era de esperar, muchas productoras han querido llevarse parte del pastel. Si bien Crunchyroll ha sido la gran beneficiada, Netflix también se ha llevado una buena parte del contenido nipón. Sin embargo, esto parece que dejará de ser una prioridad.
A través de una entrevista en la revista Weekly ASCII, el periodista Munechika Nishida y el productor Atsushi Matsumoto aseguran que Netflix ha perdido interés por invertir en anime debido al elevado precio de algunas obras a la hora de conseguir sus licencias. Pero no solo ha sido eso, esta tendencia se debe también al enorme éxito de los dramas coreanos.
"A diferencia de los dramas surcoreanos, la animación japonesa no se encuentra en una situación en la que pueda conseguir por sí sola la máxima audiencia. Casos especiales, como el Juego del Calamar, encabezan decenas de países de todo el mundo, pero no es así nunca con el anime japonés. Creo que esto ocurre en contadísimas regiones, como algunos países asiáticos, incluyendo obviamente Japón, y diversas zonas de Estados Unidos"
El gran éxito de obras surcoreanas en Occidente, unido al bajo costo que supone conseguir alguna de estas licencias si las comparamos con la mayoría de animes, ha provocado que la estrecha relación que tenía Netflix con la animación japonesa haya bajado poco a poco a lo largo de los últimos meses.
Aún así, la compañía seguirá apostando por animes de gran éxito, como es el caso de One Piece, y de obras japonesas que están seguros que cosecharán buenos números en Occidente.
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