Han pasado tres años y medio desde el fallecimiento de Kentaro Miura, y su pérdida aún se siente profundamente entre los fans del autor. El mangaka japonés se ha convertido en un ícono de la cultura japonesa, dejando un legado tan grande que, aunque su manga haya seguido adelante, no ha sido tarea fácil mantener el nivel de calidad y profundidad de Miura.
En una entrevista con el medio japonés Magmix, el actual supervisor de Berserk, Kouji Mori, afirmó que el equipo ha enfrentado múltiples dificultades al dibujar los nuevos capítulos de la serie, especialmente con la compleja armadura de Guts, que ha causado muchos dolores de cabeza al equipo encargado de continuar la obra.
"Es tan difícil de dibujar que casi parece que se hizo a propósito. Ha sido una locura", comenta Mori, quien elogia a Yoshimitsu Kurosaki, uno de los principales pupilos de Miura. Según el supervisor, Kurosaki ha sido fundamental para capturar la esencia visual de los protagonistas y lo compara incluso con el propio autor original.
Finalizar una obra de la magnitud de Berserk no está resultando nada fácil. Sin embargo, los artistas involucrados tienen la esperanza de llevar el manga a su conclusión, rindiendo así un homenaje digno a uno de los mangakas más influyentes de la historia.
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