Ha habido muchos momentos en los que Juego de Tronos ha dejado traumatizados a los espectadores de la serie. Desde la Boda Roja hasta el enfrentamiento entre La Montaña y Oberyn Martell, la producción de HBO ha sido extremadamente explícita cuando ha sido necesario. Sin embargo, esto ha causado más de un problema a algunos miembros del elenco.
En una entrevista con el programa estadounidense The Late Show with Stephen Colbert, la actriz Hannah Waddingham, quien interpretó a la septa Unella en las últimas temporadas, afirma que desarrolló una claustrofobia crónica tras rodar una de sus últimas escenas de la serie, específicamente la secuencia en la que Cersei la tortura como venganza.
"Juego de Tronos me dio algo que no esperaba, que fue una claustrofobia crónica. Fue horrible. Diez horas de haber sido sometida a la tortura del submarino. Estaba atada a una mesa con todas estas correas de cuero. No podía levantar la cabeza porque pensé que sería demasiado obvio que estaba suelta".
La actriz revela que incluso Lena Headey, quien interpretó a Cersei, se sintió bastante mal cuando comenzó a tirarle litros y litros de líquido en la cara y vio que estaba sufriendo mucho. Pero al final, Waddingham sabía a lo que iba y explicaba que Juego de Tronos jugaba en otro nivel en todos los sentidos, por lo que aguantó y dejó una de las escenas más angustiantes de toda la serie.
Por suerte, parece que ha sabido manejar este problema, así que esperemos que a largo plazo pueda recuperarse poco a poco de este trauma. Y no es la única persona del elenco que ha sufrido problemas debido a la serie; hace varios meses, Pedro Pascal reveló que acabó sufriendo una infección en los ojos después de tomarse fotos con fans que querían recrear su muerte en la serie.
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