A falta de pocos días de su estreno, poco a poco estamos conociendo más y más acerca de cómo fue la producción de One Piece, el live-action de Netflix que pretende dar un golpe en la mesa en la industria y demostrar que las adaptaciones pueden ser muy buenas.
La serie, desde luego, no ha escatimado en gastos y, a diferencia de otros proyectos del mismo género, su propio creador sí que ha seguido de cerca los pasos de los directores y escritores para que la historia y los detalles no se fueran de madre. Y es que, a través de una entrevista con la directora Emma Sullivan, hemos podido conocer lo implicado que ha estado Oda en este proyecto.
"Todo pasaba por las manos de Eiichiro Oda. Por ejemplo, filmamos una escena donde Kuina y Zoro peleaban. Cuando Oda la vio, dijo: 'No quiero que lleven esas máscaras de Kendo, hay que volver a grabar'. Así que volvimos a Ciudad del Cabo para volver a rodarla. Y fue mucho mejor, quedó bastante bien. Así, todas las escenas y guiones pasaban por él".
A lo largo de la entrevista con ScreenRant, Sullivan desvela el enorme esfuerzo que puso Netflix y Oda para que esta adaptación saliera adelante. Tal y como ha comentado la directora, cada escena contaba y, si hacía falta volver a Sudáfrica para rodar una escena de 10 minutos, la productora lo hacía sin rechistar.
El live-action de One Piece no ha parado de ofrecernos contenido nuevo todos estos días, desde la reunión de Iñaki Godoy con el mismísimo Eiichiro Oda hasta escenas detrás de las cámaras donde vemos a los actores emocionados por el trabajo que están haciendo. Solo queda esperar al 31 de agosto para poder disfrutar de lleno de esta adaptación que apunta a ser uno de los bombazos del 2023.
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