Recientemente hemos visto algunos casos en los que algunos de los personajes de El Señor de los Anillos podrían haber sido interpretados por algunos actores que no fueron los seleccionados finalmente. Este no ha sido el único universo en el que ha sucedido algo así, porque en Juego de Tronos pasó exactamente lo mismo e incluso se llegó más lejos todavía.
Cada vez que pensamos en Daenerys Targaryen es imposible no acordarnos de Emilia Clarke y el brillante papelón que se marcó a lo largo de las ocho temporadas que duró la serie. Sin embargo, ella no fue la primera opción que se tuvo en cuenta e incluso se llegó a rodar el episodio piloto con otra persona, concretamente con la actriz Tamzin Merchant, quien en principio iba a ser la Madre de Dragones.
Conocida por sus papeles en series como Salem, Carnival Row o Los Tudor, con poco más de 20 años en aquel momento, confesó en una entrevista con Entertainment Weekly cómo fue su breve paso por Juego de Tronos. El capítulo piloto en cuestión fue rodado en 2009, aunque no fue hasta un par de años más tarde cuando se estrenó la serie, realizando entre medias una enorme cantidad de cambios.
Como ya sabemos todos, uno de ellos fue el de sustituir a Merchant, aunque en ningún momento ha mostrado su descontento, sino todo lo contrario. Así lo trató de dejar claro en sus afirmaciones al hablar de varias escenas, entre ellas el encuentro sexual que tuvo con Khal Drogo, interpretado por Jason Momoa:
Grabar ese capítulo piloto fue una gran lección. Fue una afirmación sobre escuchar mis instintos y seguirlos, porque traté de salir de esa situación y, durante el proceso del contrato, lo hice. Algunas personas persuasivas me convencieron. Entonces me encontré a mi misma desnuda y asustada en Marruecos montada en un caballo que claramente estaba mucho más emocionado que yo de estar allí.
Fue una lección de que si mis tripas me cuentan una historia que no me entusiasme, entonces no debería tratar de emocionarme sólo porque otras personas me están diciendo que debería de estar emocionada. No tenía ninguna formación como actor, sólo tengo mis instintos. Y lo que me emociona y lo que me motiva es una historia convincente y un personaje convincente. Así que para mi Juego de Tronos nunca fue eso.
Además, no dudó en alabar a Emilia Clarke cuando se enteró que sería su sustituta, asegurando que se notaba que ella sí estaba emocionada de contar esa historia. Aun así, a pesar de lo que ocurrió, no se arrepiente de nada:
Si no me hubieran liberado de mi contrato, creo que me habría llevado a un lugar lejos de la persona creativa que soy hoy. Además, si fuera muy rica y famosa, no tendría tiempo para hacer todas las cosas que mi alma necesita hacer . Expresarse creativamente es una necesidad más importante que cualquier cantidad de riquezas que podía haber ganado con ese papel. Pensé que simplemente me distraería, pero soy solo yo, nadie más. Creo que Emilia Clarke es increíble. Simplemente no sería la creadora que soy hoy. Estoy profundamente agradecida por haber reclamado mi propio camino para forjarlo por mí misma.
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