Se ha hecho de rogar lo suyo, sobre todo porque en principio se esperaba su lanzamiento para 2018, pero por fin Crate Entertainment ha anunciado que Grim Dawn pondrá rumbo a las consolas con una versión para Xbox One que saldrá a la venta el próximo 3 de diciembre.
Su llegada se producirá con la denominada Definitive Edition, lo que supone que, al igual que sucede en el caso de Steam, se tratará de su edición más completa. En ella se incluirá el DLC Crucible y también las expansiones Ashes of Malmouth y Forgotten Gods.
En el caso del primero introduce un nuevo modo de juego en el que hay que hacer frente a toda clase de monstruosidades en unas arenas de batalla a lo largo de decenas de oleadas en las que la dificultad irá en aumento, de ahí que suponga todo un desafío para aquellos que deseen demostrar de qué pasta están hechos.
Por su parte, las dos expansiones amplían el mundo y la historia principal con nuevos capítulos, personajes, enemigos, facciones y otros tantos contenidos nuevos con los que se mejora considerablemente la experiencia general de este RPG de acción que encantará a los aficionados de la saga Diablo.
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