Uno de los videojuegos del momento y del año es sin duda Baldur’s Gate 3. La obra de Larian Studios abandonó su acceso anticipado la semana pasada para dar la bienvenida a su versión final, un momento que estaban esperando cientos de miles de jugadores de todo el mundo que se habrán puesto a jugar sin parar durante estos días. Eso sí, mucho ojo porque las prisas no son buenas consejeras.
Algo que es habitual en cualquier RPG es el hecho de que al ganar puntos de experiencia acabas subiendo de nivel a los personajes. No obstante, como podemos leer en GameStar, en esta tercera entrega de la saga hay que tener mucho cuidado y leer bien la letra pequeña, sobre todo al llegar al nivel 3 para no cometer un error fatídico.
Al alcanzar ese punto aparece el típico mensaje de subida de nivel, pero entre las indicaciones figura una en la que se muestra que se ha aprendido una nueva subclase. El problema reside en que el propio juego asigna automáticamente una a nuestro personaje y se quedará con ella si no nos percatamos de ello y no tocamos nada para modificarlo.
Un error que es fácil de cometer por pasar de pantalla rápidamente y no fijarnos en lo que pone en ella. En el caso de verlo bien, es fácil elegir en ese instante cuál queremos que sea la subclase de nuestro héroe, dependiendo de la clase principal que hayamos seleccionado previamente. De lo contrario, puedes dar a aceptar algo que ni siquiera te habías planteado.
Por lo tanto, si acabáis de empezar a jugar o planeáis hacerlo a corto plazo, no os olvidéis de este detalle al conseguir el nivel 3. Aun así, no quiere decir que no haya marcha atrás, porque se puede cargar una partida anterior para subsanar este error o visitar el campamento y pagar 100 monedas de oro, el precio que cuesta restablecer las características de nuestro personaje.
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