Hasta qué punto un rediseño Slim de PS5 beneficia a Sony

Cuando el río suena, agua lleva. La nueva PS5, el modelo que reemplazará al existente, se anunció a un mes exacto de celebrar los tres años desde que arrancase la novena generación. La consola ocupa menos espacio, amplía su almacenamiento y, en el proceso, da una tercera opción a quienes, sintiéndose cómodos con el formato digital, no descartan usar la consola para leer discos en el futuro o aprovechar el mercado de juegos de segunda mano. ¿Por qué elegir cuando puedes tener los las dos cosas? Bueno, previo pago de los 120 euros que cuesta su unidad de disco extraíble. Pero, como la propia consola, vayamos por partes.

Sony no esperó al lanzamiento de Spider-Man 2 para anunciar cómo serán las PS5 a partir de ahora. De hecho, las PS5 temáticas  y de tirada limitada inspiradas en el próximo melocotonazo de Insomniac Games fueron lanzados en septiembre junto con las correspondientes cubiertas. Un mes antes de anunciar el relevo. Eso sí, en caso de que hayas estrenado PlayStation hace relativamente poco tienes que saber que las cubiertas, basadas en el personaje de Marvel o no, son la única diferencia estética frente a las PS5 de 2020. A la hora de jugar no habrá ninguna. Al menos, en teoría.

Dicho lo cual, tanto las cubiertas de Spider-Man 2 como cualquiera sus variantes de color son el único accesorio de Sony incompatible con lo que podríamos denominar la tradicional variante Slim de PS5. Porque, y esto es importante, no veremos mejoras una vez la encendamos. Ni mejor rendimiento, ni más potencia gráfica, ni palabras mágicas como el Blast Processing. Otra cosa es el almacenamiento, claro. ¿Merece la pena tener 1TB de almacenamiento?

Por qué Sony ha lanzado una revisión de PS5

La llegada de las nuevas consolas PS5 no es algo que nos pille de nuevas: los rumores vienen de muy atrás y más que un anuncio se trata de una confirmación. Se podría decir que Sony lleva casi un año jugando con las cartas a la vista y, salvo sorpresa, gracias al proceso judicial por la compra de Activision en mayor o menor medida conocemos sus intenciones hasta 2028, incluyendo la llegada de PS6. Al menos en teoría.

Como comentamos, sobre el papel, y a falta de tener la nueva PS5 de 2023 delante, no habrá cambios en la experiencia de juego con respecto a los modelos de PlayStation lanzados desde 2020. Tocará ver si disipa mejor el calor, o no, y la cantidad de ruido que emite, pero a efectos prácticos tienen exactamente las mismas características, incluyendo el mismo procesador x86-64-AMD Ryzen Zen 2.

Entonces, ¿por qué se ha realizado este cambio? La respuesta oficial la encontramos en la web de PlayStation: dar más opciones a los jugadores y flexibilidad.

Para responder a las necesidades cambiantes de los jugadores, nuestros equipos de ingeniería y diseño han colaborado para crear un nuevo formato que ofrece más opciones y flexibilidad.

El objetivo real, por otro lado, tampoco nos pillará de nuevas: elevar lo antes posible la cantidad de unidades distribuidas y vendidas de PS5. Y no es que se estén vendiendo mal o poco. Lo que ocurre es que si se tiene que dar un relevo, éste se debe hacer ahora. Sobre todo, con vistas a que según los mismos rumores hay planes para una PS5 "Pro" en 2024 y una fecha aproximada para PS6. Recalcando una vez más en estos dos últimos casos la palabra rumores al referirnos a fechas.

Metidos en cifras, el precio de los dos nuevos modelos es exactamente el mismo que el que ya hay en las estanterías. O, más bien, el nuevo precio desde verano de 2022. Pero, más allá de su aspecto, hay un factor que le da ventaja a los nuevos modelos: de los 825 GB originales pasamos a disponer 1 TB de almacenamiento. A esto hay que restar lo que requiera la consola para funcionar, claro. Un margen de diferencia que nos permitirá tener instalados dos juegos de tamaño mastodóntico como Gran Turismo 7 o Mortal Kombat 1.

Pero, en la práctica, la nueva PS5 de 2023 es un relevo total para PlayStation. Siguiendo la tradición, y según las palabras de la propia Sony, una vez agotadas las existencias del modelo actual de PS5, la nueva PS5 será el único modelo disponible. Y pese a que todas las sobremesas PlayStation han tenido revisiones, desde PSOne a PS4 Pro, quizás esta sea la más importante y delicada para Sony hasta la fecha y desde que hace videoconsolas.

En qué consiste el rediseño de PS5

A golpe de vista, el nuevo modelo de PS5 no se desmarca de manera significativa del que ya conocemos salvo por dos detalles: de los dos paneles de cubierta (o carcasas) pasamos a cuatro, mostrándose las divisiones entre éstos a través de franjas negras en los dos modelos. Y pese a que se trata de una decisión estética que, seguramente, ayude a la hora de limpiar la consola, la cubierta que cubre el lector de discos es la única diferencia apreciable entre los modelos de PS5 digital y el estándar. Pero es al poner una al lado de la otra o levantarlas cuando se ve y se palpa la diferencia.

A partir de aquí toca ser más específicos y dar datos concretos: la nueva PS5 es un 30 % más reducida en tamaño y su peso pasa de los 4,5 kg (con lector de disco) a 3,2 kg. Un 18 % menos. La sorpresa es que si optamos por la versión digital esa reducción de peso sube al un 24 %, pasando de 3,9 kg a tan solo 2,6 kg. En cuanto al mando, es exactamente el mismo DualSense que llevamos viendo desde 2020.

Una PS5 más pequeña, desde luego. Pero no perdamos la perspectiva: el modelo de 2022 es enorme, con lo que las medidas de este modelo slim siguen alejándose de lo que solemos considerar como una consola compacta. Especialmente si lo comparamos con cómo se redujo el tamaño de las anteriores PlayStation.

A partir de aquí toca abordar un matiz importante: la nueva PS5 viene acompañada de una nueva base que, en esencia, sirve para tenerla en horizontal. O tumbada, si lo prefieres. No es que no se pueda poner en vertical, sino que en lugar de ofrecer un único accesorio para las dos posiciones con cada consola, Sony ofrecerá otro tipo de soporte especial que, de hecho, se pondrá a la venta por separado.

Siendo más específicos, poner de pie la nueva PS5 con el soporte oficial es sumar otros 30 euros adicionales a su precio. Algo que ya se hacía en PS2, no lo vamos a negar. Aunque, por otro lado, damos por hecho que ya se están fabricando las alternativas con o sin licencia oficial.

El último cambio significativo de la nueva PS5 es precisamente cómo se ha eliminado la diferencia entre ambos modelos (estándar y digital) y, a grandes rasgos, la razón de ser de este rediseño: bajo la cubierta destinada a proteger el lector de discos encontramos una unidad de disco Ultra HD Blu-ray específicamente diseñada para PS5 que es extraíble. De modo que se puede añadir a la PS5 que no la tiene.

Sabemos que Sony comercializará esa misma unidad de disco para quienes apuesten por el nuevo modelo digital de PS5, pero queda por ver si éste también vendrá acompañado de esa cuarta cubierta. Queremos entender que sí en base a su precio: nada menos que 119,99 euros.

Más allá de su presentación y aspectos, y a falta de ver la consola desmontada (algo que a Sony últimamente le gusta hacer), nos topamos con que tendremos los mismos menús, los mismos juegos y, a diferencia de las revisiones posteriores de PS2 y PS3, la misma retrocompatibilidad con el sistema PlayStation anterior. No habrá dos experiencias de PS5. Si a la hora de la verdad hace lo mismo, ¿por qué ofrecer un nuevo modelo?

Cómo beneficia a Sony el rediseño de PS5

Arrancamos el verano de 2023 con una promoción realmente atractiva: PS5 rebajaba temporalmente su precio de venta recomendado por primera vez desde su lanzamiento. De hecho, para millones de usuarios el peaje a pagar para conseguir una PS5 durante los dos primeros años se tradujo en lotes de consola, accesorios y juegos que suponían un desembolso que, en según qué fecha del año, se llegaba a duplicar su precio original.

Sobra decir que los primeros meses de PS5 fueron "maravillosos" para especuladores, pero la otra realidad es que si fuese por PlayStation habría llenado las tiendas de consolas nuevecitas y a estrenar. Hasta qué punto la escasez de PS5 y las inesperadas oportunidades de hacerse con una jugaron en su beneficio es algo que no se puede medir, pero está claro que de haber podido duplicar sus cifras con una distribución mejor, se habría hecho.

La rebaja obedecía a un doble propósito: elevar de manera efectiva la cantidad de unidades PS5 vendidas (lo cual es una obviedad) durante el periodo veraniego y empezar a dar salida al stock de los modelos originales de la consola ahora que había suficiente. Sobre todo, para realizar el relevo a la nueva Recordemos que cuando éstas se acaben, solo será posible hacerse con el nuevo modelo de PS5. ¿En qué beneficia a Sony este movimiento?

• De entrada, la llegada de un nuevo diseño que reemplaza al anterior impulsa enormemente las ventas de ambos. Tanto los de interesados en tener una PS5 con lector extraíble y 1TB de almacenamiento, como los que ven este movimiento como una cuenta atrás oficial para hacerse con la primera versión.
• Por supuesto, la fecha de salida es un elemento clave: el anuncio se produce en un momento en el que PlayStation se encuentra diversificando sus franquicias (la película de Gran Turismo, la serie de The Last of Us) y acaba de estrenar su nueva propuesta de cine y entretenimiento desde consolas PlayStation. Además, los lanzamientos de sus juegos en PC buscan atraer al público hacia PlayStation.
• Con esto por delante, no podemos olvidar lo esencial: PlayStation Studios desarrolla juegos, pero Sony vende hardware. Consolas PS5, faltaría más, pero también mandos, auriculares, reproductores multimedia, televisores, y muy pronto hasta un sistema portátil para jugar en remoto. Incluso promueve que las carcasas de PS5 sean las licenciadas. La llegada de una nueva PS5, incluso si es un rediseño, da un fuerte impulso a todo lo anterior. Sobre todo, adelantándose al periodo navideño.

Finalmente hay un último aspecto crucial que debe ser tratado de modo independiente: PlayStation Studios estrenará en 2023 cinco juegos (Horizon Call of the Mountain, Firewall Ultra, Marvel's Spider-Man 2, Stellar Blade y MLB The Show 23) más la versión completa de Horizon Forbidden West. En un año tan potente, en el que se han juntado tantos lanzamientos esperados, perder el posicionamiento de marca sería un error fatal.

Sobre todo cuando sabemos que Nintendo tiene una nueva consola entre manos y los planes conjuntos de Microsoft y Activision Blizzard. Ante eso, PS5 no puede estar fuera de la conversación. Y ofrecer un nuevo modelo ayuda. Y tiene su razón.

Ofrecer un nuevo modelo de consola es algo que llevamos viendo desde hace más de 40 años. De hecho, hasta la propia NES y la SNES tuvieron revisiones que las hacían más atractivas en vísperas (o ya sumergidas) en su propio relevo generacional. Además, claro, de abaratar los costes de producción y reforzar la venta de los juegos que estaban en las estanterías. En el caso de SEGA hasta hemos visto una Mini Consola basada en la Mega Drive 2, y Xbox nunca ha sido la excepción.

Lo excepcional aquí, con el caso de la nueva PS5, es que la mayoría de estos factores anteriores no se da. Quizás se haya logrado abaratar el proceso de producción, pero eso no lo sabremos hasta que la veamos por dentro. Pero lo realmente insólito es que no hubo una tradicional rebaja del precio previa desde el lanzamiento, sino todo lo contrario.

Pero, siendo justos, la preocupación real de Sony no es tanto revitalizar ventas de una consola que se vende sola, sino algo mayor: llegar cuanto antes a los 50 millones de PS5 vendidas. Lo cual nos lleva al último punto: ¿en qué momento tendrá lugar este relevo?

Cuándo estará disponible la nueva PS5, qué pasará con la original y qué planes hay por parte de Xbox

El nuevo modelo PS5 llegará primero a Estados Unidos a finales de este mismo año. Se espera que llegue a las estanterías y al portal de venta directa de Sony (direct.playstation.com) a partir de noviembre y después se irá comercializando en el resto del mundo. Dicho lo cual, y de manera oficial, el modelo anterior de PS5 estará disponible hasta agotar existencias. ¿Por qué no un lanzamiento global?

La intención de Sony es que PS5 sea la consola más vendida en navidades, especialmente con una Switch que aspira a ser el sistema de videojuegos más vendido de la historia, y el camino hacia el éxito pasa por conquistar el Black Friday en Norteamérica. Sin embargo, también hay un segundo motivo clave: ofrecer una distribución a escala planetaria expondría a pasar por los mismos problemas de 2020. Y eso no le interesa a nadie.

Por otro lado, que el nuevo modelo de PS5 llegue a nuevos países más allá del mes de noviembre habilita que los modelos originales se sigan distribuyendo con normalidad en los periodos festivos de finales de año (y principios de 2024) en aquellos mercados en los que la marca PlayStation está bien cimentada, incluyendo Europa y Japón. Aquí todas las ideas están bien atadas.

No podemos olvidar dos detalles trascendentales en forma de hardware: entre noviembre y finales de año veremos el lanzamiento de PlayStation Portal y el Mando Access. Dos periféricos que, junto a unas recientemente lanzadas PlayStation VR2, diversificarán el uso y el atractivo de PS5.  ¿Veremos bundles de nueva consola con alguno de estos accesorios? En Black Friday todo es posible, aunque en nuestro cabe la posibilidad de que ya estemos hablando de 2024.

¿Y qué harán Nintendo y Xbox mientras tanto? Por parte de la Gran N se espera que para entonces tengamos novedades en torno a Nintendo Switch 2 (o como se acabe llamando) mientras que Xbox también tiene sus propias cartas a la vista: según pudimos ver, Microsoft lanzará un nuevo modelo de Xbox Series X únicamente digital con de 2TB de almacenamiento que reducirá notablemente su consumo de energía.

Sin embargo, y pese a que también se ha mostrado un nuevo mando de Xbox, la prioridad de Microsoft se centra en el Game Pass y, por extensión, en su juego en la nube.

Para algunos fabricantes y desarrolladores, la novena generación de consolas acaba de empezar. Phil Spencer, de Xbox, asegura que estamos al final del principio de la nueva generación. Y no les faltan razones: a PS4 y Xbox One todavía les quedan alegrías por mostrar y no se está aprovechando del todo el poderío de los nuevos sistemas. Tres años después, es hora de que empiece a notarse y juegos como Forza Motorsport o Marvel's Spider-Man 2 son los que deben marcar la diferencia.

No para beneficio de Microsoft, Sony o Nintendo, sino para ilusionar a los que dan sentido y razón de ser a la mayor industria del entretenimiento del mundo: los jugadores.

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