El 2016 será recordado como el año en el que las diferentes compañías iniciaron la batalla por ser líderes en la realidad virtual. Oculus Rift es uno de los dispositivos que más papeletas tiene de llevarse el gato al agua y en Sony son plenamente conscientes de ello, tal y como ha admitido el vicepresidente de la compañía Masayasu Ito en una entrevista al medio Polygon.
Es inevitable que los usuarios, al tener probablemente todos los dispositivos una fecha de lanzamiento situada para este año, decidan compararlos por ver cual es el mejor, aunque el directivo de Sony no cree que sea totalmente justa esta equiparación en el caso de ellos.
Según ha declarado hay que partir de la base que su periférico funcionará únicamente en una PlayStation 4, una consola que no alcanza la potencia de un ordenador de gama alta con un precio superior a los mil dólares, que viene a ser más o menos lo necesario para que funcione correctamente Oculus Rift en una máquina.
Si sólo hablamos de la calidad de gama alta, sí, me gustaría admitir que Oculust puede ofrecer una mejor realidad virtual. Sin embargo, se requiere un ordenador muy caro y muy rápido. La principal ventaja para Sony es que nuestro dispositivo funciona en una PlayStation 4. Es más para un uso diario, así que tiene que ser fácil de utilizar y hacer que sea más accesible.
Esto no es por lo tanto para una persona que utiliza un ordenador de gama alta, sino para el mercado de masas.
Sony no ha especificado aún la fecha en la que pondrán a la venta PlayStation VR y sobre todo el precio que tendrá, un detalle que está siendo una barrera gigantesca para muchos antes de animarse a dar el paso a esta nueva tecnología. Aún así, teniendo en cuenta las palabras de Ito igual la cantidad de euros que costará su periférico no resultará demasiado elevada.
Vía | Polygon
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