Casi ni recuerdo la cantidad de artículos y editoriales de todo tipo que se publicaron a finales de 2007 y principios de 2008 asegurando que éste sería el año de PlayStation 3, y lo cierto es que muchos de los argumentos que esgrimían resultaban de lo mas poderosos. Sin embargo, el tiempo ha pasado y, por unas razones u otras, la consola de Sony no ha terminado de cuajar tampoco en esta ocasión.
Pero la esperanza es lo último que se pierde, o eso dicen, y en Sony tienen esperanza para dar y regalar. La muestra la tenemos en unas recientes declaraciones del mismísimo Shuhei Yoshida, Presidente de los Sony Worldwide Studios, en las cuales responde con gran entusiasmo a las alusiones al 2009 como curso definitivamente propicio para su consola doméstica.:
Todas las piezas empiezan a encajar en lo que a hardware, coste y precio se refiere, y estamos incrementendo la capacidad de los discos duros, el contenido que ofrecemos a través de nuestra red y los grandes títulos en los que estamos trabajando, y que llegarán estas Navidades. Todo eso irá llegando este año...
Buenas intenciones no le faltan. El problema que veo, es que todas estas promesas de futuro recuerda claramente las que ya acompañaban a la aseveración de que 2008 sería el año de esta consola y, bueno, a la vista está que no ha sido así.
No sé qué pensaréis vosotros, pero los hechos demuestran que PlayStation 3 necesita algo más que un poco de espacio extra en el disco duro, novedades en la PSN y unas pocas exclusividades para pegar el salto definitivo en ventas que se le ha venido escapando desde que empezó a comercializarse.
Y con esto me refiero sobre todo al mercado japonés y al estadounidense, donde la consola queda muy por detrás de sus competidoras; está claro que en Europa les va bastante mejor. La promesa de que el año que viene sí que será el de PlayStation 3 empieza a sonar vacía, al menos mientras no se decidan a aplicar una política de precios algo más agresiva, y al mismo tiempo empezar a ofrecer un catálogo que se desmarque verdaderamente del de XBox 360.
Pero el tiempo pasa, y Sony demuestra no tener intención de cambiar de rumbo por ahora. ¿Qué pensáis vosotros? ¿Acierta la compañía manteniéndose en una dinámica que, durante esta generación, les ha dado para ir tirando con lo justo, pero no les ha permitido alcanzar el claro liderato? ¿Les será eso suficiente, o deberían plantearse las cosas de otra manera?
Vía | Videogaming247
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