El precio original de las consolas de novena generación de PlayStation y Xbox fue de 500 euros. Ya no lo es. Podemos debatir si esa cantidad era mucho o poco en función de la tecnología que se usa para desmarcarse de sus antecesoras, pero estamos hablando de mucho dinero. Lo que es verdaderamente inaudito es que, en lugar de reducir esa cifra con el paso del tiempo, tres años después PS5 y Xbox Series X son más caras que cuando salieron a la venta.
Hay muchos elementos en juego, pero la clave detrás de este extraño ajuste es la inflación. Dicho mal y rápido, el aumento general de los precios derivado de una enorme cantidad de factores que empezaron a manifestarse desde que arrancó la generación de consolas. Lo cual nos lleva a la pregunta original: ¿es normal pagar 550 euros por una consola a día de hoy? Lo creas o no, la cifra no sólo es muy razonable, sino que comparado con lo que costaba una Atari en su época, es casi un chollo.
Y si te dijese que si aplicásemos los 200 dólares que costaba la Atari 2600 de lanzamiento a la inflación actual, su precio hoy en día, según hemos cotejado en VidaExtra a través de calculator.net, sería de 1.003,72 dólares. Y ojo, que si acomodamos los precios originales de otras videoconsolas a nuestra época, no estamos hablando ni siquiera de la consola más cara. Lo cual no quita que esos 200 dólares que hoy no parecen una cantidad tan desorbitada fuese muchísimo dinero en 1977.
Partiendo de esa idea, en VidaExtra hemos querido poner en común y comparar los precios de las consolas más caras hasta la fecha de cara a tener una visión completa y fundamentada del precio de las actuales. No solo PlayStation o Xbox, sino también una Nintendo Switch que aguanta el tipo desde su lanzamiento 2017. Puedes ver el resultado a continuación.
A la hora de realizar este gráfico hemos tenido varias consideraciones muy importantes. De entrada, hemos usado como moneda común el dólar y el precio y año de lanzamiento el de Estados Unidos. Entre otros motivos, para tener una visión más justa y homogénea: no sólo porque en Japón tuvieron la Super Famicom varios años antes, sino porque los 500 euros con los que se lanzaron las consolas de 2020 no equivalían al cambio a 500 dólares, aunque años después ambas divisas se emparejaron.
De hecho, mientras que Nintendo Switch se lanzó en Estados Unidos a 299 dólares en 2017 como estrategia comercial, la consola debutó en el viejo continente por algo más. Dicho lo cual, y según los parámetros aplicados, esos 300 dólares de hace seis años hoy equivaldrían a unos 372 dólares si le aplicamos la inflación.
Con las cifras por delante, toca establecer las cinco consolas más caras de la historia si ajustamos los precios a la inflación. Y las cifras son espectaculares:
5. PS3 y el complicadísimo salto generacional de PlayStation
- Precio de lanzamiento: 600 dólares en 2006
- Precio ajustado a la inflación en 2023: 905,14 dólares
La Sony de PS2 pecó de exceso de confianza al dar el salto generacional ofreciendo su tercera consola un año después de Xbox 360 y a un precio de 600 dólares complicado de asimilar, incluso cuando ésta incluía un lector de Blu-Ray. Eso sí, no tardó en rebajar los precios.
4. La Atari 2600: el lujo de tener los videojuegos en casa
- Precio de lanzamiento: 200 dólares en 1977
- Precio ajustado a la inflación en 2023: 1.003,72 dólares
Estamos en 1977. Comprar un piso de 150 m2 en Madrid, en zona de Plaza de Castilla, costaba 2.500.000 ptas. Es decir, unos 15 mil euros sin aplicar la inflación. Solo así se puede entender que tener los videojuegos de Atari en casa, como Pong, costase una cifra tan elevada como 200 dólares de la época.
3. Intellivision, el precio de superar a la Atari
- Precio de lanzamiento: 300 dólares en 1979
- Precio ajustado a la inflación en 2023: 1.256,72 dólares
Mattel quiso competir frontalmente con Atari en el terreno de los videojuegos y su tecnología era una pasada: sus mandos eran futuristas, contaba con un servicio en línea propio llamado PlayCable y no se vendió nada mal pese a los 300 dólares de la época que costaba.
2. La Neo Geo, la Rolls Royce de las consolas
- Precio de lanzamiento: 650 dólares en 1991
- Precio ajustado a la inflación en 2023: 1.451,41 dólares
La consola de SNK ha sido el objeto de deseo de generaciones enteras de apasionados por los videojuegos y, a la vez, un sueño inalcanzable: las opción más asequible en España era de 79.990 pesetas sin juego. Pero es que eso era otro tema: cada cartuchazo costaba aproximadamente 24.000 pesetas. ¿Una locura? Sí... y no: de manera casi literal, tenías las recreativas en tu casa.
1. La 3DO es la consola más cara
- Precio de lanzamiento: 700 dólares en 1993
- Precio ajustado a la inflación en 2023: 1.473,28 dólares
En VidaExtra hablamos sobre la revolución que quiso ser 3DO y el sonado golpe de realidad que se dio: más que un sistema de sobremesa, era una especie de estándar que cualquier compañía podía licenciar con juegos compatibles independientemente del fabricante. El problema, claro, es que en lugar de ofrecer un precio atractivo y recuperar la inversión con los juegos como SEGA o Nintendo, se puso una etiqueta en base al hardware ofertado. Eso sí, muchos clásicos de culto nacieron ahí.
Bola Extra: el CD-i de Phillips
- Precio de lanzamiento: 400 dólares en 1991
- Precio ajustado a la inflación en 2023: 893,18 dólares
Técnicamente, el CD-i de Philips no es una consola. Realmente es una estación multimedia multiusos que recibió videojuegos, incluyendo algunos de los poquísimos títulos de las estrellas de Nintendo lanzados fuera de sus consolas. Un acuerdo con la Gran N derivado de un lector de discos para SNES que nunca fue y que derivó en los peores juegos de Zelda jamás hechos. Aquella máquina era asombrosa, pero no estaba hecha para jugar.
Visto en perspectiva, nos topamos con que las consolas de Nintendo siempre han tenido un atractivo adicional relacionado con su precio y la presencia de marca. Y pese a que la etiqueta de sus juegos actuales no baja, se trata de exitazos cuyo ciclo comercial dura años. Algunos dejando una huella enorme en generaciones enteras. Eso sí, consolones como SEGA Mega Drive y DreamCast tuvieron un precio tan imbatible como irresistible.
Por último, pero no menos importante, llama la atención que con la excepción de PS3, los precios de las consolas PlayStation tras emparejar el valor del dólar a los diferentes años en los que fueron lanzados son prácticamente idénticos, incluyendo el de PS5. ¿Se mantendrán estas lecturas de cara a PS6? La realidad es que no nos atrevemos a imaginar lo que nos costará una barra de pan cuando salga la siguiente generación de Sony.
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