Abrir un canal de YouTube es gratis. De hecho, todo lo que necesitas para dar el paso es una cuenta de Google, un móvil y cinco minutos. Generar contenido ya es otra historia y Masahiro Sakurai lo sabe muy bien: a lo largo de dos años y dos meses ha estado dando lecciones magistrales completamente gratuitas sobre la cultura y la creación de videojuegos. De hecho, para hacerlo creó su propio canal y para crear contenido ha gastado la astronómica cifra de 90 millones de yenes. Algo más de medio millón de euros al cambio. ¿Por qué tanto?
La cifra ha sido puesta sobre la mesa por parte del propio director y co-creador de Kirby o la saga Super Smash Bros. al dar por concluido su proyecto en forma de doble canal (en japonés e inglés) llamado Masahiro Sakurai on Creating Games. Un proyecto de dos años dedicado íntegramente a la divulgación sobre la creación, el desarrollo y las lecciones aprendidas en su intachable trayectoria profesional. ¿Pasó de ser un director de videojuegos a YouTuber? No exactamente.
Sakurai volcó en su doble canal sus experiencias, conocimientos y perspectivas, pero también sus recuerdos y filosofía sobre qué hace que los videojuegos, como medio, sean excepcionales. El penúltimo episodio, de hecho, lo dedicó a su amigo Satoru Iwata y ahora se despide de su audiencia recogiendo papeles, sacando conclusiones y, lo más interesante, haciendo una retrospectiva completa del proyecto incluyendo costes, tiempo y la acogida de toda la iniciativa. Una que, ya te adelanto, ha sido especialmente cálida.
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Casi 500 años de reproducciones logradas y ni un solo céntimo recibido
Vaya por delante que Sakurai no ha tirado la toalla. Ni mucho menos. Según él mismo cuenta tuvo la idea mientras montaba el vídeo de presentación de Kazuya para Super Smash Bros. Ultimate, aunque no se emitiría el primer vídeo de la serie hasta agosto de 2022, más o menos coincidiendo con los últimos contenidos lanzados, y el plan fue siempre ofrecer una serie de duración limitada.
Es más, el genio nipón ha compaginado la emisión de Masahiro Sakurai on Creating Games con el desarrollo de un juego que confía en que será revelado más pronto que tarde. Sin embargo, la creación del doble canal fue fruto de una verdadera alineación de astros al contar con una inusual cantidad de tiempo libre que, en lugar de dedicar a viajar por el mundo, decidió emplear en este proyecto.
El resultado final de Masahiro Sakurai on Creating Games tras dos años y dos meses de trabajo:
- 260 vídeos en japonés y sus correspondientes 260 vídeos traducidos al inglés, sin contar con los recopilatorios
- Más de 19 horas grabadas y emitidas disponibles gratuitamente en YouTube
- En horas de visualizaciones obtenidas con el total de los vídeos nada menos que 498 años.
Pero lo más significativo: pese a la inversión de 90 millones de yenes, el total de dinero generado a través de ambos canales es una cifra todavía más sorprendente: 0 (cero) yenes / euros / dólares. ¿El motivo? Básicamente porque ninguno de los 520 vídeos que hoy puedes ver está monetizado. Y no lo vamos a negar, dado el trabajo, el mimo y la calidad de los mismos perfectamente podría hacerlo.
¿Por qué Masahiro Sakurai creó este proyecto?
A partir de aquí toca hacer un apunte: Sakurai creó los guiones, los dirigió y se responsabilizó del proyecto. Lógicamente los gastos sirvieron para contratar a terceros que le permitieran plasmar su visión de manera didáctica y poder transmitirla tanto en japonés como en inglés, pero si en lugar de haber hecho él mismo su parte hubiese contratado a terceros el presupuesto habría sido muchísimo mayor.
De hecho, a lo largo del episodio final de sus canales el propio Sakurai ha calculado cuánto le ha costado cada visualización lograda a lo largo de la historia de su canal a lo largo de esta etapa. Dependiendo del vídeo y su coste en algunos casos la proporción era de 0,54 yenes por vídeo, mientra que en otros casos estamos hablando de casi dos yenes. Lógicamente, estos datos están calculados a fecha de la edición del vídeo de despedida.
Y es entonces cuando se genera la gran duda: si el canal ha costado 90 millones de yenes, ¿en qué se ha ido tanto dinero? La respuesta rápida es que prácticamente el 80% de los costes han sido para la edición del contenido y aproximadamente el 15% sirvió para traducir los contenidos para el segundo canal en inglés. Y, sin embargo, Sakurai considera no solo que mereció la pena, sino que ha supuesto una buena inversión.
Pese a que Sakurai siempre fue consciente de que había puesto su alma, corazón y una enorme cantidad de dinero en crear su proyecto, y también que éste tendría un principio y un final, considera que a través de él ha hecho una inversión de cara al futuro de los videojuegos haciendo una modesta aportación y orientado a los desarrolladores, creativos y directivos profesionales, pero también a los que están empezando o sienten una genuina pasión por el medio.
En cualquier caso, y lo digo de corazón, considero mi canal como una buena inversión para lograr un futuro más brillante para los videojuegos. Lo cierto es las inversiones se hacen con la esperanza de tener un beneficio a posteriori, así que supongo que esto lo podría considerar algo más cercano a una donación o un trabajo voluntario.
Desde la perspectiva de un director, sería muy complicado ensamblar un equipo para crear un videojuego actual con apenas 100 millones de yenes. Todavía no puedo hablar de conclusiones definitivas, pero basándome en el dinero que he invertido diría que el canal ha salido bastante bien.
Cada día se lanzan en el mundo montones de nuevos juegos e incontables personas están dándolo todo en cada proyecto. En lugar de engrosar todavía esa cantidad de lanzamientos consideré que este canal ayudaría a mejorar la calidad todos los juegos al menos un poquito. Y deseo de corazón haber puesto mi granito de arena para la industria.
Sakurai aspira a que su doble canal de YouTube sea tan parte de su legado a los videojuegos como sus propias obras. Y pese a que es consciente de que la industria evoluciona a pasos agigantados, hay aspectos que son atemporales. Como resultado, y de manera oficial, Masahiro Sakurai on Creating Games es un muy valioso regalo para todos los enamorados de los videojuegos. Pero no será su última aportación a esta pasión.
Masahiro Sakurai ha concluido su etapa de YouTuber... ¿Y ahora qué?
Pese a que los vídeos de Masahiro Sakurai on Creating Games se subieron y editaron de manera periódica, los guiones y temáticas fueron creadas y quedaron establecidas desde el principio. Y no solo eso, ya que llegados a cierto punto tuvo que compaginar su faceta en YouTube con una propuesta para hacer un juego que le llegó, que aceptó y que espera que sea anunciada en algún momento a partir de la emisión del episodio final de sus canales.
Sabemos que en el juego no anunciado en el que está implicado Sakurai comenzó su producción en algún punto del año 2022, con lo que a partir de que se comenzaron a emitir los videos y el contenido tuvo que diversificarse tanto en su trabajo real como en su proyecto divulgativo. Porque los canales son una maravilla y sus contenidos son de visionado prácticamente obligado para cualquier desarrollador pero, como comentamos, no generan ingresos.
A partir de aquí solo podemos especular con la clase de proyecto en la que está embarcado Sakurai, y estamos convencidos de que ha dado pistas en sus vídeos, pero viendo su trayectoria profesional sospechamos que quien le hizo la propuesta fue Nintendo. De hecho, no está de más recordar que Iwata le propuso hacer Super Smash Bros. Brawl cuando el juego había sido oficialmente anunciado y ni siquiera se había empezado a hacer.
Con todo, su trayectoria también incluye el legado reciente de Kid Icarus o Kirby. Y asumiendo que sea para Nintendo -lo cual es bastante probable- el motivo por el que su proyecto sigue siendo confidencial obedecería al hecho de ser parte del catálogo de una Nintendo Switch 2 que podría anunciarse de manera oficial en cualquier momento. Pero esto ya sea quizás asumir demasiado.
Lo que sí tenemos claro es que sea lo que sea en lo que Sakurai esté implicado será una maravilla en la que ha puesto toda su pasión. Tanta como para dejar aparcada de manera indefinida su poco rentable pero muy enriquecedora labor de YouTuber.
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