Tras semanas de rumores al respecto, la compra de ARM por parte de NVIDIA es una realidad. Por la suma de 40.000 millones de dólares, NVIDIA pretende hacerse con la propiedad de la empresa de semiconductores, aunque permanece a la espera de la aprobación por parte de distintos organismos reguladores de distintos países, donde ambas empresas están implicadas.
El gigante financiero japonés SoftBank había sido el propietario de ARM hasta ahora, tras adquirirla hace cuatro años por la cantidad de 32.000 millones de dólares, lo que significa que esta operación de venta le ha dejado un beneficio de 8.000 millones de dólares. Hace unos meses, la compañía japonesa decidió poner a la venta ARM, su división de semiconductores, y acabó siendo NVIDIA, otro gigante de la industria tecnológica, quien se hiciera con ella.
NVIDIA pagará 21.500 millones de dólares en acciones a SoftBank, que pasará a poseer un 10% de NVIDIA en forma de acciones, y 12.000 millones en efectivo, para poder cerrar el acuerdo de compra de ARM. Por otro lado, y dependiendo del éxito que ARM tenga durante los próximos años, cumpliendo o no determinados objetivos impuestos en el acuerdo, SoftBank podrá recibir 5.000 millones extra. Finalmente, NVIDIA pagará 1.500 millones de dólares en forma de acciones a los empleados de ARM.
Un movimiendo de peso internacional
Como mencionamos anteriormente, la compra ha de ser aprobada por distintos agentes reguladores de diferentes países. Los gobiernos de China, Estados Unidos, Reino Unido y distintos países de la Unión Europea tendrán que aprobar una adquisición de tal calibre y con un posible impacto tan grande en el mercado tecnológico. Para tranquilizar a dichos reguladores, NVIDIA ha asegurado que ARM continuaría funcionando con el modelo de licencia abierta que ha tenido hasta hoy, y que ha sido una de las claves de su éxito. Y es que, la tecnología desarrollada por ARM está a disposición de otras empresas del sector para que desarrollen sus productos.
Intel, Broadcom, Huawei, AMD, Samsung, Qualcomm o Apple son algunas de las empresas que emplean la tecnología de AMR para implementarla en sus dispositivos. Tras una inversión tan fuerte, y con una lista de clientes tan destacada, NVIDIA querrá mantener dichas condiciones para conservar a estos clientes y sacar rentabilidad a la operación.
Sin embargo, la adquisición no se hará efectiva de manera inmediata, sino que, como consecuencia del proceso de aprobación mencionado, se alargará durante unos 18 meses, según calculan los organismos implicados. Mientras tanto, NVIDIA anunció que mantendrá la sede de ARM en Reino Unido, y además invertirá en nuevas instalaciones en el país, para impulsar la investigación en inteligencia artificial.
Sin duda, se trata de un movimiento ambicioso por parte de NVIDIA, que busca seguir ampliando los horizontes de sus negocios. Desde el campo de los procesadores gráficos, dónde recientemente ha lanzado sus nuevas GeForce RTX 3000, hasta la industria del automóvil, y ahora busca introducirse en el desarrollo de procesadores móviles, presentes en miles de millones de dispositivos. La gran mayoría de fabricantes de móviles a nivel mundial emplean la tecnología de ARM que, si el acuerdo prospera, pasará a ser propiedad de NVIDIA.
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