Fue anunciarlo y empezaron las dudas. Todo controlador que se base en una cámara y en la captura de movimientos necesita de unas determinadas condiciones para funcionar bien o para funcionar de manera óptima como mínimo. De Kinect se ha hablado muchísimo, cosa lógica ya que el aparato en cuestión hace la tira y media de cosas, y siempre se ha puesto en duda que pudiera funcionar en cualquier situación cotidiana.
Bueno, es normal que un sistema así pida una serie de requisitos. Eye Toy también se volvía loco en situaciones de poca luz. Metros de distancia desde la cámara hasta el jugador, una determinada iluminación, unos niveles de sonido aceptables y la sempiterna posibilidad de recalibrar el dispositivo para que vuelva a funcionar si alguno de los requisitos cambian de manera drástica. Microsoft ha publicado un vídeo en el que se intenta aclarar cómo preparar a Kinect para su uso normal.
Al final de todo los requisitos, como era de esperar, son relativamente normales para disfrutar de Kinect en un comedor estándar. Por desgracia los que tengamos la consola conectada al televisor de nuestro cuarto o en nuestra pequeña habitación de juegos no podremos usar nuestro cuerpo para jugar. Seis pasos de distancia desde la tele hasta el jugador son demasiados en mi caso, por poner un ejemplo.
De todos modos queda claro con el vídeo que las opciones de configuración que presenta el cacharro son bastante elevadas. ¿Sufrirá Kinect en ventas por culpa de los requisitos que pide para funcionar de modo óptimo?
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