Vamos a hablar de un videojuego al que no podréis jugar. Bueno, corrijo, podréis jugar si os alistáis en la armada de Estados Unidos y recibís entrenamiento especial con el ‘US Army’s Dismounted Soldier Training System’.
Se trata de un juego desarrollado por RealTime Immersive Inc para el ejercito y que tiene como objetivo ir entrenando a los soldados en diversas situaciones de combate que pueden llegar a ocurrir en la realidad. Para ello cuenta con un apartado gráfico sencillamente brutal. Un golpe de realidad alejado de cualquier visión cinematográfica y que intenta plasmar del modo más veraz posible el entorno. ¿El monstruo que lo mueve? CryEngine 3.
Ha costado la friolera de 57 millones de dólares, un precio parecido al presupuesto que podría manejar un título AAA en la industria actual, pero por supuesto no está a la venta. Los dos vídeos son sencillamente espectaculares pero a mi el que más me ha llamado la atención es el segundo. Ojo al minuto final, cuando enseñan las bondades del editor visual para diseñar las misiones y demás. ¿No os dan ganas de hacer un nivel?
Atención al detalle, los escenarios son mucho, muchísimo más grande que cualquier cosa vista hasta ahora en títulos bélicos. Ni ‘Modern Warfare 3’ ni ‘Battlefield 3’ pueden competir en amplitud de entorno. Supongo que un mapeado tan extenso será un requisito básico de la simulación, algo que en un juego arcade no tiene que ocurrir.
Por cierto, ¿alguien sabe si este tipo de simuladores sirven para algo? Es una cosa que siempre me he preguntado pero no tengo la suerte de conocer a nadie relacionado mínimamente con el ejercito. Quizá para ensayar cuestiones tácticas…
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