Son más de un par de decenas de entregas de la saga FIFA las que hemos podido disfrutar a lo largo de varias generaciones de videojuegos y la franquicia de EA Sports ha evolucionado mucho en todos estos años. Ahora el realismo que destila la serie es absoluto y prácticamente no tiene oposición, aunque hace un par de décadas se atrevía a llamar la atención de formas muy particulares.
FIFA 2001 hubiese pasado como una entrega anual más que no llamaría la atención, de no ser por detalles cómicos tan hilarantes como el que sucedía cuando marcabas un gol en propia meta. Tal y como podéis ver en el vídeo que hay a continuación, la rabia es tal en los jugadores del equipo que les duele el doble el tanto en contra.
Y es que la frustración es tal que un jugador pateará con fuerza la pelota, esta rebotará en el palo más cercano y, sí, le golpeará de vuelta en la entrepierna. Un golpe bajo en toda regla que lo dejará inutilizado durante unos segundos, pero todavía hay más risas aseguradas. Poned el siguiente vídeo en el minuto 8:10 y fijaros atentamente en los jugadores que celebran el gol del Bayern Munich.
Efectivamente, el último jugador en la parte izquierda que intenta superar la valla publicitaria se tropieza y se cae de morros contra el suelo. Festejar un gol con tu afición debe de ser maravilloso, siempre y cuando el tabique nasal se mantenga en su sitio. Todas estas bromas se han perdido con el paso de los años y ahora tan solo permanecen en FIFA 2001.
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