La recta final del año está bien cargada de lanzamientos de todo tipo, sobre todo septiembre, porque dentro de un par de meses nuestra cartera nos pedirá un respiro por todo lo que se avecina. Entre los juegos que ya han confirmado su fecha se encuentra The Crew Motorfest, la tercera entrega de la saga de conducción de Ubisoft que una vez más hemos tenido la ocasión de probar.
En esta ocasión la prueba ha sido más completa todavía porque me ha permitido ponerme a los mandos durante un total de cuatro horas y así descubrir todas las cualidades, los puntos fuertes y los detalles en los que flojea este título que en un conjunto global no debería pasar desapercibido para los aficionados a los coches.
Dicho lo cual, si queréis descubrir qué os llegaréis a encontrar en el próximo The Crew, estáis más que invitados a subiros al vehículo y abrocharos el cinturón, porque es el momento de pisar el acelerador a fondo para viajar a la isla de O'ahu.
Unas playlists dedicadas a cada tipo de jugador
Lo primero que hace el juego es darnos la bienvenida a este lugar paradisíaco, con unos preciosos escenarios que no nos cansaremos de recorrer una y otra vez. De hecho, hay que admitir que es una verdadera lástima que el juego no salga en verano, porque los entornos van a juego a la perfección con la época en la que nos encontramos, para así disfrutar de una experiencia que parece más veraniega.
Una vez realizadas las presentaciones y tras haber elegido al personaje que nos representará, el que será nuestro avatar, llega el momento de pasar al tutorial. Un espléndido adelanto que nos permite hacernos una idea de todo lo que nos vamos a encontrar, porque la competición se divide básicamente en las llamadas playlists.
Cada una de ellas está dedicada a las diferentes culturas automovilísticas que hay en el mundo entero o también con las que se hicieron populares en el pasado. Así se muestra en durante los primeros compases, porque cuando te quieres dar cuenta ya estás metido de lleno en una emocionante carrera a toda pastilla para poner a prueba alguno de los diferentes coches disponibles y especializados en estas temáticas.
Tan pronto estás recorriendo unas zonas que parecen extraídas de Japón, con carreras callejeras, como de repente te subes a un todoterreno en plena naturaleza, un vehículo de Fórmula uno que no tiene nada que envidiar al de Fernando Alonso e incluso también es posible pilotar vehículos retro o un moderno y lujoso lamborghini. Y esto no es más que un pequeño aperitivo de todo lo que se desbloquea al instante a partir de ese momento.
Hora de sacar al piloto que llevamos dentro
El objetivo de The Crew Motorfest es el de simplemente participar en competiciones y demostrar que no hay nadie mejor que nosotros a la hora de ponernos al volante. De primeras comienzas con tres playlists distintas para escoger:
- Made in Japan: ideal para los que quieran llevar al límite sus habilidades, con carreras nocturnas que pasarán por montañas y ciudades de neón y en las que no faltarán nunca los giros bruscos, por lo que no queda más remedio que aprender a derrapar o estarás condenado.
- Hawaii Scenic Tour: esta otra te permite descubrir los encantos y los secretos de la isla a lo largo de unos bellos parajes. Aquí la competición no es tan exigente, pero las pruebas son perfectas para descubrir los encantos de O'ahu.
- 911 Legacy, A Porsche Story: la tercera nos lleva al pasado para experimentar el legado de coches icónicos mientras tratamos de ser los primeros en llegar a la meta con coches que quizás no estamos tan acostumbrados a conducir.
La intro de cada playlist es una auténtica pasada, porque están creadas en su totalidad con imágenes reales para que sean más impactantes todavía. Al acceder a cualquiera de ellas se desbloquean al instante una serie de eventos, desafíos, viajes rápidos y otros puntos importantes de esta serie en particular, a los que únicamente tendremos acceso en el caso de haber elegido la playlist que deseemos.
Desde ese momento pasas a tener total libertad para ir a cualquier parte que te apetezca, porque la isla no es más que un colosal mundo abierto que lo puedes recorrer a tu antojo. Como ya pasaba en The Crew 2, con tan solo pulsar un botón puedes pasar de estar corriendo por una carretera con tu coche, transformarlo en avión para salir por los aires y de ahí acercarte a un río para convertirlo en una lancha que te permite desplazarte por el agua.
Si bien el propio juego te da indicaciones (que se pueden desactivar) acerca del lugar al que debes ir, no es obligatorio hacer caso a la ruta y por lo tanto puedes seguir el camino que más te apetezca. En este sentido, al tener un tiempo límite, reconozco que la mayoría de veces opté por pillar el avión y así recorrer rápidamente toda la isla al mismo tiempo que disfrutaba de unas vistas alucinantes, porque lo cierto es que gráficamente el juego es espectacular.
Tanto por la propia ciudad como a la hora de meterte de lleno en las pistas, todo el apartado gráfico es espléndido. Asimismo, las animaciones de los vehículos, así como los sonidos que emiten, también logran meterte más de lleno en todo lo que sucede en la pantalla con una banda sonora que acompaña maravillosamente a todo lo que se vive al volante, pudiendo cambiar los temas que se escuchan de fondo en cualquier momento, así como saltar de una playlist a otra rápidamente.
Todas las series de retos tienen lugar en la misma isla, pero en diferentes partes de ella en base a la que escojamos, lo que de paso influye en su temática. Por otro lado, sobre el entorno me ha resultado curioso que te puedes llevar por delante todo lo que quieras para conducir sin miedo, así que puedes arrasar con vallas, árboles pequeños, arbustos, papeleras, farolas, etc., aunque eso sí, la carrocería pagará las consecuencias con rayones y abolladuras.
Una vez alcanzado el destino dará comienzo la carrera de verdad, donde se indica el tipo de carrera que es, el coche que vas a pilotar, el récord establecido y las recompensas que te llevarás a cambio. Sobre esto último, la cantidad aumentará o disminuirá en base al puesto que se alcance y especialmente a la dificultad establecida, porque puedes cambiar el nivel de la inteligencia artificial, quitar o poner las guías del suelo, activar o desactivar el nitro y mucho más.
Por lo tanto, cuantas más facilidades te pongas, menor será la recompensa y viceversa. Eso sí, en mi caso yo empecé jugando en la dificultad establecida por defecto, que era algo por encima de la media, y no tardé en pasarlo bastante mal. Así pues, no me quedó más remedio que disminuirla tras varios intentos fallidos por alcanzar uno de los puestos necesarios para completar la carrera.
Hay que decir que los errores se pagan muy muy caros, porque los adversarios no perdonan el mínimo error. Por suerte, hay una función de rebobinado que te permite retroceder en el tiempo unos cuantos segundos, por si has hecho un mal giro, te has chocado con algo que no debías o lo que sea, pudiendo utilizar esta capacidad todas las veces que quieras sin ningún tipo de límite, lo que no quiere decir que el juego sea más sencillo así.
Otro problema que me encontré es que determinados coches derrapan en exceso, aunque no lleves una velocidad demasiado elevada, provocando que en algunos momentos se descontrolen demasiado y no te quede más remedio que tirar del freno al máximo para no irte a tomar vientos. Por supuesto imagino que esto es cuestión de práctica, pero si ya de primeras cuesta pilotar determinados coches… mal vamos.
Por lo demás, la mayoría de carreras son prácticamente idénticas. El escenario varía, pero los objetivos son similares, ya sea el de llegar de los primeros en un circuito sin vueltas o en otros que hay que dar varias, sin pasar por alto los puntos de control, porque a la que te dejes uno estás condenado y ya te resulta imposible ganar, de ahí que el rebobinado sea tan útil.
En general me ha encantado competir en cada carrera que me he encontrado por su ritmo tan frenético, por cómo van cambiando de escenarios y de coches y porque también la experiencia en general al volante resulta divertida. En cambio, he echado en falta una mayor variedad de pruebas o algo más equilibrado para los tres tipos de vehículos disponibles en el mundo abierto, porque las playlists únicamente me ofrecían retos dedicados al coche y ninguno al avión o la lancha.
Al menos, independientemente de si ganas o pierdes, te llevas dinero o experiencia, pero el hacerse con la victoria también sirve para recibir piezas del coche de distintos niveles y rarezas, como si fuese un RPG. Más que nada porque en cualquier momento se puede modificar el coche principal para colocarle otras llantas y ruedas, cambiarle el motor, los frenos, los colores, etc. Y hasta hay opciones para los más expertos que quieran profundizar más todavía en ciertos detalles.
El escenario principal, la excusa para regresar siempre a la isla
Lo que parece ser la campaña principal no es el único modo de juego disponible, porque en cualquier momento también es posible acceder a lo que se llama escenario principal. Se trata de un modo que es el que se encargará de mantener vivo el juego mediante eventos semanales, ya que cada siete días se celebrará uno nuevo con sus propias temáticas y características.
En ellos es posible ganar experiencia y recompensa a base de completar tareas. Por ejemplo, una de ellas es revisitar pruebas completadas anteriormente y que van variando cada semana, del mismo modo que también se puede explorar la isla y completar diversos desafíos, como pasar por lugares en los que te hacen una foto o por los que debes de conducir a toda velocidad, otros que consisten en esquivar obstáculos y tampoco faltan las carreras de persecución.
Aun así, el plato fuerte se lo queda la competición contra otros adversarios del mundo entero, porque aquí es donde se desbloquean mejores recompensas. Cada evento se divide en nueve pruebas en las que no hay rebobinado que valga, porque te vale para un uso personal, pero el resto van a su bola, al igual que tampoco hay niveles de dificultad, por lo que no queda más remedio que valerse de la habilidad de uno mismo para ganar.
Tengo claro que The Crew Motorfest no me ha enseñado todas las cartas, aunque al menos las primeras sensaciones que me ha dejado han sido muy positivas. Quiero creer que en la versión final habrá una mayor variedad de pruebas, sobre todo dedicadas al avión y la lancha, o que el hecho de derrapar se pulirá más todavía, pero al menos me ha encantado viajar por O'ahu con unas emocionantes carreras.
- Plataformas: PC, PS4, PS5, Xbox One y Xbox Series X/S
- Multijugador: Sí
- Desarrollador: Ubisoft Ivory Tower
- Compañía: Ubisoft
- Lanzamiento: 14 de septiembre de 2023
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