Si bien el UCM copa prácticamente todas las producciones superheroicas de Marvel, lo cierto es que a comienzos de siglo se pudo vivir una época de esplendor con cintas como Spider-Man o la recordada trilogía de los X-Men. Bryan Singer fue el encargado de ponerse al frente del proyecto en el año 2000 y contó con un fabuloso reparto para la ocasión.
Ian McKellen, Patrick Stewart, Hugh Jackman, Halle Berry o Ray Parker fueron algunos de los miembros del elenco que dieron vida al supergrupo mutante. La trama nos trasladaba a la típica situación en la que los héroes liderados por el Profesor Xavier debían ponerle freno a los planes del malvado Magneto, por lo cual todo se resolvía en una épica batalla final.
El conflicto definitivo tiene lugar en Liberty Island, en lo más alto de la Estatua de la Libertad, por lo que los X-Men se lían a guantazos contra la Hermandad de Mutantes. Mientras se encontraban grabando aquellas escenas, Singer le pidió a uno de los especialistas, Scott Leva, que se pusiese un disfraz muy peculiar y apareciese junta los protagonistas para sorprenderlos. Aquí tenéis la secuencia en una toma falsa.
Efectivamente, el mismísimo Spider-Man surge en la parte de atrás para total desconcierto y risas de James Marsden (Cíclope), Famke Janssen (Jean Grey) y Halle Berry (Tormenta). Leva, uno de los especialistas más reputados y veteranos de la industria, se coló de tal forma que terminó pidiendo disculpas por aparecer en la película que no debía.
Todo el equipo se ríe a carcajadas ante lo sucedido y es una simpática forma de imaginar la llegada del multiverso del UCM ocho años antes de su aparición. No fue hasta el 2008 con la primera película de Iron Man cuando definitivamente los personajes de la editorial comenzaron a mezclarse en el cine.
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