Fue en 2002 cuando Sam Raimi nos deleitó con la primera adaptación en la gran pantalla de Spider-Man. El trepamuros ofreció un espectáculo visual descomunal y regaló escenas icónicas, siendo una de ellas el famoso encuentro que se produce bajo la lluvia junto a Mary Jane Watson.
La pelirroja y Parker se fundieron en un apasionado beso en el que el héroe cuelga boca abajo de su telaraña y el instante quedó inmortalizado para la posteridad. Sin embargo, resulta que no fue tan idílico como podíamos imaginar a tenor de las declaraciones realizadas por Kirsten Dunst. La actriz ha participado en la próxima emisión de The Jonathan Ross Show y ha confesado cómo vivió aquella escena.
"Recuerdo que Sam Raimi me dio un libro de besos famosos para que me inspirara, pero también quería que fuera especial, aunque en realidad fue un poco miserable hacerlo. Llovía a cántaros, estaba helada, Tobey no podía respirar, así que era casi como si le estuviera resucitando."
Lo cierto es que se puede entender perfectamente que grabar la secuencia no debió ser nada agradable. Tobey Maguire tuvo que sostenerse en una posición muy incómoda para estar listo, al mismo tiempo que a ambos actores les caía una enorme cantidad de lluvia fría. Lo peor de todo es que seguramente al intérprete se le colasen gotas de agua por los agujeros de la nariz, lo cual le dificultaría la tarea de respirar.
Dunst siguió dando voz y rostro a MJ en las posteriores dos entregas dirigidas por Sam Raimi, aunque la cuarta película nunca llegó a ver la luz y se dio paso a una nueva era de protagonistas. Ahora, la actriz se encuentra inmersa en la promoción de Civil War, la producción de acción de Alex Garland.
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