La trilogía de precuelas de Star Wars nos narró los acontecimientos previos a las primeras cintas creadas por George Lucas. Allá por finales de los 90 y principios de los 2000 se decidió contar una historia que necesitaba nuevos actores para los personajes. Dos de los más importantes fueron tanto Natalie Portman como Hayden Christensen.
La primera interpretó a la reina Padme Amidala de Naboo, mientras que Christensen adoptó el rol del joven Anakin Skywalker. Sus primeras interacciones juntos se produjeron durante la grabación de Star Wars Episodio II: El Ataque de los Clones, donde podíamos ver cómo su romance comenzaba a nacer.
En una reciente entrevista con GQ, la actriz ha recordado cómo se llevó uno de los elementos distintivos de Skywalker durante aquella película. Hay que recordar que el joven aprendiz era un padawan jedi a las órdenes de Obi-Wan Kenobi, por lo que llevaba el pelo rapado junto a la distintiva trenza que caracteriza a los alumnos.
Es precisamente esa trenza la que Portman se adjudicó para llevársela a su casa. "De la segunda [película], tomé una de las trenzas de Anakin, tenía esa pequeña trenza colgando, luego la perdí, ¿sabes? Así que eso me sirvió de mucho", señala la intérprete. Un accesorio que seguro que más de uno querría tener en su casa como recuerdo de la saga.
Por otro lado, la actriz ha sido cuestionada al respecto de si volverá a retomar su papel como Padme en Star Wars. Esa una opción que han escogido tanto Ewan McGregor como Hayden Christensen para la propia serie de Obi-Wan Kenobi y ella asegura estar dispuesta. "No tengo información sobre ello. Nadie me ha pedido que regrese, pero estoy abierta", aclara Portman.
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