Los rumores acerca de la aparición de todos los actores que interpretaron a Spider-Man para Spider-Man: No Way Home se hicieron realidad. La cinta del UCM consiguió reunir al trío de icónicos protagonistas para golpearnos muy fuerte con la nostalgia, pues habían pasado años desde que vimos por última vez a Andrew Garfield y a Tobey Maguire enfundarse el traje del trepamuros.
Especialmente llamativa fue la vuelta del intérprete que dio vida a Peter Parker en la década de los 2000, aunque faltó en la ecuación Mary Jane Watson, la inolvidable pareja del personaje. De haber aparecido en la cinta de Jon Watts, hubiese sido Kirsten Dunst la que hubiese ocupado ese rol, pero no sucedió.
Y si no lo vimos en la gran pantalla no fue por falta de ganas de la actriz. En una entrevista concedida a GQ, Dunst fue cuestionada acerca de si le pidieron formar parte del elenco de Spider-Man: No Way Home y ha dejado claro que nadie se puso en contacto con ella, pero que "lo habría hecho". Eso sí, parece que todo se debió a una decisión creativa, ya que probablemente el regreso de MJ hubiese supuesto también el retorno de la Gwen Stacy de Emma Stone.
Por otro lado, Dunst opina que Spider-Man de 2002 "era más inocente. Sam Raimi era como un director de culto, así que parecía que estábamos haciendo una película indie disfrazada de película de superhéroes". En ese camino de la experimentación se ha pronunciado, pues está bastante interesada en que la relación entre Parker y MJ vuelva.
"Vale, cojamos a Tobey [Maguire] y a mí y hagámoslo de una extraña forma indie en la que sea como un tipo diferente de película de superhéroes. Como hicieron en la película Chronicle. Podría ser genial", ha explicado la artista.
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