Que el estreno en las salas de cine de Aquaman and the Lost Kingdom el 25 de diciembre de 2023 parece una de las pocas certezas a estas alturas de la película. Y es que un reciente informe de The Hollywood Reporter recoge que las regrabaciones, descontento e intervención de James Gunn en la producción son una constante.
Tal y como señala el medio, durante el mes de junio se han producido una ronda de grabaciones nuevas en las que han tenido que intervenir actores como Jason Momoa y Patrick Wilson. Es relativamente normal que esto suceda, pero lo que es más preocupante es que nos referimos a la tercera ocasión en la que el elenco tiene que ponerse delante de las cámaras porque el resultado inicial no convence.
James Wan se está encargando de corregir los errores y pulir las escenas que no satisfacen a los mandamases de Warner Bros.. Programada originalmente para diciembre del año pasado, en cuanto Aquaman and the Lost Kingdom entró en la fase de posproducción los problemas comenzaron a surgir. Los pases de prueba no eran esperanzadores, lo cual desembocó en dos regrabaciones entre el verano de 2022 y comienzos de 2023. Tras la fusión de la empresa con Discovery, los nuevos jefes de cine Michael De Luca y Pamela Abdy asumieron la responsabilidad.
Las fuentes consultadas señalan que Abdy se puso al frente de la edición al comprobar que seguían sin dar con la tecla, pero el resultado fue incluso peor en las nuevas proyecciones internas. Una vez más, otra ronda de regrabaciones se produjo, siendo esta la más reciente. Al parecer, el problema radica en que la historia resulta confusa, aunque hay que sumar un factor más.
En un primer momento se iba a incluir a Michael Keaton en su papel de Batman para la secuela de Aquaman y asumiendo un rol similar al de Nick Furia en el UCM. Debido a que un momento dado se creyó que la película podría estrenarse en marzo de 2023, antes que The Flash, así que en Warner Bros. se apresuraron en llamar a Ben Affleck para que hiciese del Caballero Oscuro y que sustituyese una escena filmada por Keaton. "Fue bastante caótico", señala una fuente sobre una cinta que ha vivido la intervención directa de James Gunn y Peter Safran.
Los máximos responsables del DCU han cortado de raíz el problema eliminando cualquier aparición de Batman, ya que no quieren confundir a los espectadores con líneas argumentales que no van a tener continuidad. Finalmente, Gunn dio su opinión sobre el corte más reciente, dando luz verde a que se filmase de nuevo en junio durante cinco días para terminar de una vez por todas con la posproducción.
Veremos qué rendimiento logra en taquilla Aquaman and the Lost Kingdom, ya que el presupuesto ya se ha disparado hasta los 205 millones de dólares y cada tanda de regrabaciones solo ha hecho aumentar más el coste.
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