No es fácil predecir una moda, de lo contrario todo el mundo tendría la fórmula del éxito. Pero es curioso lo que está sucediendo este 2020 en cuanto a los videojuegos, con un Fall Guys que ha revitalizado la pasión por Humor Amarillo o, en un caso bastante más atípico, Among Us triunfando dos años después de su lanzamiento con el tremendo juego que da tener a un infiltrado en la nave...
Y ahora la nueva moda se llama Phasmophobia, el juego más vendido de Steam a día de hoy y que actualmente se encuentra en Steam Early Access, tras debutar en dicho servicio el pasado 18 de septiembre. Pero, ¿a qué se debe su gran éxito?
Terror, cooperación... y el efecto de los streamers
Que un juego de terror como Phasmophobia, del debutante estudio Kinetic Games, se coloque en el puesto número uno de los más vendidos actualmente en Steam, no es nada sencillo. Máxime teniendo en cuenta que está por encima de la pre-compra de Cyberpunk 2077, el citado Among Us (pese a poder jugarlo gratis, cuesta realmente 3,99 euros) o el lanzamiento de Amnesia: Rebirth, donde Frictional Games vuelve a demostrar su poderío para hacérnoslo pasar tan mal.
Juegos de terror hay muchos, para colmo. El género ha experimentado un boom con la Realidad Virtual, al ser completamente inmersivos con ese salto extra en primera persona. Y en Steam es un género bastante más poblado que en consolas, donde tienen cabida todo tipo de experimentos hasta que alguno da con la tecla correcta y sus creadores se pueden permitir el lujo de hacer conversiones.
Entonces, ¿cómo es posible que una ópera prima de un equipo desconocido se aúpe al primer puesto con otro juego de terror? Para empezar, porque no estamos ante la típica experiencia en solitario como en Resident Evil 7: Biohazard, ni tampoco ante el habitual multijugador asíncrono, como en Dead by Daylight.
Phasmophobia es una experiencia cooperativa para cuatro personas, donde tienen que colaborar obligatoriamente para averiguar qué presencia paranormal nos ha tocado por la zona. Para ello dispondremos de varias herramientas, como cámaras con visión noctura o linternas con luz infrarroja, a modo de ayuda.
Pero esto tiene truco, por supuesto. Kinetic Games ha creado un juego de terror donde aparece un término de moda: procedimental. Sí, porque cada una de las diez presencias fantasmales aparecerá de modo aleatorio en cada partida, para que ninguna sea igual. Y cada uno de esos espectros, entes y demás, tendrá un patrón distinto a identificar para cumplir la misión y certificar su presencia.
Y esta combinación da mucho juego en Twitch y demás portales de retransmisión, algo que ha ayudado enormemente a que la popularidad de Phasmophobia haya subido como la espuma en tan solo un mes desde su lanzamiento, con más de 224.000 seguidores y casi 14.000 espectadores a día de hoy, reflejándose también en Steam, con más de 41.000 reseñas, donde un 96% son positivas. Y si vemos sus cifras en SteamDB, tuvo un pico de 87.000 jugadores en los últimos 10 días.
Pero, ¿cómo se juega a Phasmophobia en realidad?
Como es lógico, viendo su tráfico en Twitch, los principales youtubers y/o streamers del sector nacional (e internacional), como ElRubius, AuronPlay o LOLiTO, han contribuido a que su fama se haya disparado, teniendo en el caso de Menos Trece el canal que mejor está tratando sus mecánicas, mostrando a su vez sus distintos escenarios y tipos de fantasmas en varios vídeos muy completos.
Phasmophobia es una experiencia que hay que tomarse con calma y que requiere un estudio previo, sin ir a lo loco. El motivo es que, debido a que partida varía completamente, no podremos hacer siempre lo mismo a la hora de detectar a un fantasma. Hay que fijarse en los objetivos, leer su nombre (para llamarlo después a viva voz, sí, con el micro) y saber sus pros y sus contras para poder entablar ese contacto paranormal. Porque cada uno dejará sus propias "marcas" en el juego.
Alguno preferirá la oscuridad, otro la luz; unos se dejarán ver si tan solo hay una persona en la habitación... Y de igual modo, cada fantasma va dejando pistas de su sello personal, como apagando las luces bruscamente, cerrando puertas, mostrando sus huellas... Todas estas acciones son importantes, porque tenemos que analizarlas desde nuestro libro y ver a qué tipo de fantasmas se corresponden para ir descartando los demás. Y tras identificarlo al 100%, escapar con éxito.
Esto tiene más miga de lo que parece, puesto que el juego nos pondrá todo tipo de pegas. Para empezar, cuando salimos del camión (foto inferior), tendremos cinco minutos hasta que el fantasma se vuelva agresivo y peligre seriamente nuestra cordura (como si fuese nuestra vida). Por otro lado, desde dicho camión se podrá monitorizar mejor lo que suceda ahí fuera, siempre y cuando se haga un uso correcto de la cámara y todo tipo de medidores de EMF. Y por último, teniendo en cuenta su peculiar sistema de comunicación por cercanía (5 metros) o por radio.
Y es que si nos alejamos unos pocos metros, nuestros compañeros no nos oirán y tendremos que usar la radio. Lo curioso es que para comunicarnos con los fantasmas, también lo haremos a viva voz, llegando a usar incluso una Ouija.
Desafíos variables y con el gran aliciente de la RV
Obviamente, por muy terrorífico que suene (salvando un apartado técnico mejorable, eso sí), también nos reportará una buena sesión de risas debido al caos provocado a la hora de compenetrarse con los compañeros, tarea harto complicada, especialmente las primeras horas de juego hasta que uno se acostumbra sus mecánicas. Es, sin dudas, otro de los culpables de su éxito.
Si a esto le unimos la posibilidad de jugarlo con un dispositivo de Realidad Virtual, sin importar si el resto de personas lo juegan en modo normal, tenemos el título con más potencial para ser el regalo estrella en Halloween, donde para colmo tan solo cuesta 11,59 euros en Steam Early Access. Es el típico juego que triunfa si lo jugamos con colegas (o desconocidos), o simplemente viendo cómo reaccionan otras personas, sobre todo si se asustan, como sucedió con Song of Horror.
Además, sus números, para ser un juego en desarrollo, no están nada mal, al ofrecer siete mapas distintos en los cuáles nos puede sorprender cualquiera de sus diez tipos de fantasmas. Porque ese toque procedimental da mucho juego al no saber con qué nos puede sorprender cada partida, teniendo que analizar cuidadosamente cada actividad paranormal que presenciemos y no dejar de lado la ayuda de nuestros otros acompañantes, teniendo cada uno un rol esencial.
Al final, para lograr el éxito no se necesita mucho más, pero en el caso de Phasmophobia se han unido buenas decisiones, el apoyo de los streamers y la proximidad de Halloween. Y como es lógico, Kinetic Games tiene grandes planes para 2021, con la versión final del juego (algo más cara), con más contenido (equipo, mapas, fantasmas y demás), y donde esperamos venga acompañada de las correspondientes conversiones a Nintendo Switch, PS5 y Xbox Series X.
Viendo su soso tráiler de hace meses, cualquiera diría lo que se avecinaba...
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