Los libros, las películas y los videojuegos nos han hablado en infinidad de ocasiones de dioses y criaturas mitológicas que habitaban en el pasado. Sus historias y leyendas se han ido narrando a lo largo de generaciones y gracias a ello se han mantenido vivas con el paso de los siglos. Entre todos estos seres se encuentra el imponente Kraken.
Considerado como uno de los monstruos más grandes, impactantes y temibles que se ha llegado a imaginar la humanidad, esta criatura pertenece al folclore nórdico de la Edad Media. El que sea algo real o no es algo que se ha investigado desde hace muchísimo tiempo, pero ¿cuál es su historia para que se siga hablando de él después de cientos de años?
Una de las bestias más letales que habitaba en las profundidades del mar
Un calamar gigante capaz de tragarse barcos enteros. Esa podría ser la descripción simplificada de lo que era el Kraken, el cual era conocido por atacar a navíos que se atrevían a surcar los mares de Noruega, entre Islandia y Groenlandia. Cualquiera que reuniera el suficiente valor para ello era difícil que viviera para contarlo.
Tal era el poder del Kraken que se dice que con sus brazos podía abrazar a cualquier barco y destruirlos fácilmente. No obstante, en el caso de que no fuese capaz de ello, también contaba con la capacidad de generar un torbellino tan fuerte que hundía a los navíos bajo el agua y no se volvía a saber nada de ellos.
Debido a su tamaño era capaz de atacar a cualquier barco sin problemas y tragarse a toda la tripulación para así alimentarse. Aun así, a pesar del riesgo que suponía encontrarse con él, había quien quería ir tras su búsqueda, sobre todo los pescadores más intrépidos, porque se decía que cuando el Kraken surgía del agua salían disparados cardúmenes de peces que capturaban los pescadores para así hacerse con una ingente cantidad de alimentos.
Por otro lado, para ponernos un poco más en situación, el término Kraken proviene de krake, una palabra del nórdico antiguo que se utilizaba para definir a los monstruos marinos, al igual que en el alemán actual Kraken (el plural de Krake) significa pulpo.
Toda su historia se remonta a un relato escrito en 1180 por el rey Sverre de Noruega. En un manuscrito antiguo se podía leer que el Kraken era uno de los muchos monstruos marinos que habitaba en las aguas y se decía que tenía un tamaño colosal. De hecho, era tan inmenso que se comparaba con una isla y se mencionaba que tenía el aspecto de un calamar gigante.
Con el paso de los siglos su historia no desapareció, pero no fue hasta 1752 cuando se hizo más popular su nombre gracias al obispo de Bergen, Erik Ludvigse Pontoppidan, quien lo describió en su relato Historia Natural de Noruega, señalando que esta bestia era capaz de todo lo mencionado anteriormente. Estas historias generaron un gran temor entre los navegantes por puro desconocimiento de no saber qué se encontrarían al partir de viaje.
Unas décadas más tarde, en 1801, el naturalista francés Pierre Denys de Montfort escribió otra novela que hablaba sobre algunos de los moluscos más grandes que existían en el mundo, entre ellos el pulpo colosal y el pulpo kraken. El relato venía acompañado por imágenes, que sirvieron para ponerle cara al Kraken, pero también por anécdotas que decían que esta criatura había acabado con una decena de barcos de guerra británicos.
Sin embargo, para desgracia de Montfort, esta historia se acabó desmintiendo porque en realidad se descubrió que los navíos fueron arrasados por culpa de un huracán. Como consecuencia, su carrera se hundió por completo y acabó muriendo de hambre en 1820. Eso no quita que no se volviera a hablar del Kraken, porque su leyenda cobró más peso en 1853 gracias al naturalista noruego Japetus Steenstrup.
En aquel momento se topó con un cefalópodo gigante, al que llamaron Architeuthis dux, en una playa danesa. Sin duda fue el más grande de todos los que se habían registrado hasta ese momento, dado que tenía una longitud de 18 metros contando sus largos tentáculos, algo totalmente fuera de lo habitual, porque la mayoría son bastante más pequeños.
Asimismo, los ojos del calamar gigante están considerados como los más grandes de todos los animales del mundo, algo que es comprensible porque los necesita para navegar por las oscuras profundidades del océano, dado que es capaz de sumergirse a más de 1.100 metros y se dice que puede alcanzar hasta los 2.000 metros. A pesar de todo, este animal sigue siendo un misterio y sabe muy poco sobre él, hasta el punto que no está claro si es un único tipo de calamar o en realidad hay más.
La presencia del Kraken en los videojuegos
Novelas como Veinte mil leguas de viaje submarino, de Julio Verne, o también Los trabajadores del mar, de Víctor Hugo, hicieron referencia al Kraken al hablar de este famoso calamar descomunal que fue hallado. En el cine tampoco se le ha dejado de lado, de ahí que haya hecho acto de presencia en Furia de Titanes o también en Piratas del Caribe: El cofre del hombre muerto.
En cuanto a videojuegos, el Kraken ha estado presente en una cantidad bastante considerable. Algunos de los ejemplos más recientes los tenemos en Sea of Thieves cuando fue añadido por medio de una actualización gratuita y podía aparecer en cualquier momento para atacar a los barcos de los jugadores.
Sobre todo lo hemos podido ver como jefe final en unos cuantos RPG, entre ellos Golden Sun, Final Fantasy, World of Warcraft o Shining Force II, por nombrar algunos. En el aclamado Return of the Obra Dinn también se le puede ver en uno de los capítulos o también como un enemigo que incordia a Donkey Kong en alguno de los niveles de Donkey Kong Country Returns y Donkey Kong Country: Tropical Freeze.
Y alguien que también se atrevió a plantarle cara fue Kratos en God of War II en una épica batalla. Su presencia fue muy llamativa al ser una de las pocas criaturas que apareció en aquel momento en la saga sin tener nada que ver con la mitología griega. No obstante, ahora que esta se ha ambientado en la mitología nórdica sería un momento ideal para volver a hacerle pedazos.
Por si no fuera suficiente con todo lo anterior, Kid Icarus: Uprising, Risen 2, Wonder Boy in Monster Land, Tomb Raider: Underworld y hasta el difunto Evolve fueron otros juegos que también se acordaron del Kraken y decidieron incluirlo de alguna forma a este temible monstruo. Lo que haga falta con tal de que su leyenda siga perdurando sin importar la cantidad de años que transcurran.