Análisis de Streets Of Rage 4: Mr. X Nightmare, la justicia callejera de SEGA eleva su rejugabilidad hasta el infinito

El regreso de Axel y Blaze a las calles de Wood Oak City a manos de Dotemu es mucho más que un grato reencuentro con los beat'em up clásicos: Streets of Rage 4 es una secuela en todos y cada uno de sus matices. Una secuela soberbia. Y la expansión Mr. X Nightmare la hace todavía mejor y más interesante a base de redondear su propuesta de juego. Y, en el proceso, eleva su rejugabilidad hasta el infinito.

Porque, como ya dijimos en nuestro análisis original, Streets of Rage 4 dura lo que tú quieras, pero las fases son 12. Una docena de escenarios terriblemente rejugables, todo sea dicho, gracias a un estupendo sistema de progresos y el reclamo de una experiencia multijugador online y offline que se presta de maravilla a improvisar partidas. Pero siguen siendo 12 fases.

Dotemu, Guard Crush y Lizardcube, responsables del juego con el beneplácito de SEGA, son plenamente conscientes de lo anterior y, a base de novedades muy bien planteadas, se lleva al propio Streets of Rage 4 y su soberbia experiencia de juego un paso más allá de su propuesta original con Mr. X Nightmare.

La nueva expansión declina la sencilla idea de aumentar la cantidad de escenarios del modo historia en favor de un nuevo modo Survival que condensa la esencia de los beat'em up de Mega Drive y, a su vez, logra que cada nueva partida sea totalmente única y original. No solo a nivel de desafíos, sino de posibilidades jugables. Promoviendo que hagamos cadenas interminables de combos y nos luzcamos en cada ronda.

¿La clave? El doble combo que nace de un nuevo modo que genera niveles aleatorios sumado a la posibilidad de configurar nuestro propio estilo de lucha a base de obtener nuevas técnicas para los personajes del juego. Incentivando constantemente que experimentemos con combos tan espectaculares como imposibles.

Así, siguiendo la estela de Sonic Mania Plus, otro magistral homenaje a la 16 bits de SEGA, Streets of Rage 4 amplía contenidos habiendo pasado más de un año desde su lanzamiento. Algunas de las novedades, las más modestas, vienen de la mano de una actualización gratuita; pero las más interesantes, las que impulsan drásticamente la cantidad de horas original, están incluidas en Mr. X Nightmare.

Es entonces cuando toca plantearse lo inevitable, si bien su precio es realmente tentador (el DLC puede adquirirse por solo 8 euros en Steam, PS4 y Xbox y muy pronto en Switch) ¿lo que se ofrece es suficiente como para convertirse en la nueva experiencia estrella del juego? Ya te adelantamos que es la mejor excusa para retomar las partidas.

La pesadilla de Mr. X, un modo Survival con posibilidades infinitas

Los estragos de Wood Oak City causados por los mellizos Y, los hijos del infame Mr. X, pillaron con la guardia baja a Axel, Blaze y compañía. Definitivamente, el rubiales abanderado de Streets of Rage sigue golpeando con una rotundidad brutal, pero no se puede decir que está en su mejor forma. Precisamente por ello, los héroes callejeros han decidido tomar la iniciativa y prepararse para cualquier eventualidad.

El Dr. Zan, uno de los protagonistas de Streets of Rage 3, les propone un plan descabellado y con bastantes fisuras, pero realmente interesante: usando una replica artificial de la maquiavélica mente del mismísimo Mr. X, los héroes de Wood Oak City se enfrentarán a infinitas simulaciones de combates contra toda clase de enemigos y bajo cualquier tipo de condición. En pocas palabras, deberán enfrentarse a la pesadilla de Mr. X.

A diferencia del modo Historia de Streets of Rage 4, la premisa argumental de Mr. X Nightmare acaba ahí. Y no necesita más. Como ya comentamos, no es una adición de nuevas fases, aunque veremos entornos, enemigos y armas originales; sino más bien una sucesión de niveles generados aleatoriamente en la que de manera gradual se va elevando el nivel de desafío. Eso sí, obtendremos potenciadores y mejoras muy interesantes con cada nivel superado.

El tamaño de cada nivel varía y equivale al área que normalmente se destina a cada trifulca en los modos Historia y Arcade. A veces es una localización urbana, otras un portaviones y a veces un cuadrilátero. De hecho, las condiciones cambian constantemente, de modo que hay trampas, condiciones ambientales, explosivos, caídas libres, rayos láser colocados a maldad y montones de variantes.

No es que haya una brutal cantidad de escenarios a nivel de fondos y decoración, pero en lo referente a las posibilidades va sobradísimo. De hecho, existen dos variaciones dentro del propio modo Supervivencia:

• Por un lado, la Simulación Aleatoria nos propone enfrentarnos a solos o con otros jugadores a una sucesión de niveles, enemigos y mejoras generados sobre la marcha, incluyendo batallas con jefazos finales y tramos pixelados.
• Por otro, en la Simulación Semanal los niveles generados, así como las mejoras y el tipo de enemigos, sí están establecidos en un orden ya determinado que, como se adivina por su propio nombre, se replantea de cero cada siete días.

El propósito central de Mr. X Nightmare es sorprender constantemente al jugador en cada nueva partida, pero también ofrecerle nuevos recursos. Veremos enemigos completamente inéditos y una muy generosa suma de armas que van desde anguilas eléctricas a unos enormes bastones con doble acabado acolchado a lo Gladiadores Americanos, pasando por peces espada.

Sin embargo, la verdadera nueva capa de profundidad en lo jugable se logra con la posibilidad de desbloquear nuevos ataques para todos los personajes y poder crear nuestro propio estilo de combate. En cada partida generaremos un nivel de progreso y al alcanzar ciertos niveles ganaremos una técnica. ¿Lo mejor? Podremos alternar de estilo y ataques de manera sencillísima antes de empezar la partida.

Un detalle esencial es que si nos hacemos con la expansión de Mr. X Nightmare podremos acceder a sus contenidos de manera directa y desde el principio. Es decir, en Streets of Rage 4 es necesario completar el modo Historia para acceder al modo Arcade, la selección de niveles o el modo Combate con Jefes. Además, claro, de los personajes adicionales. Todo lo que ya hemos obtenido lo seguiremos teniendo en su sitio.

Y ojo, la expansión viene acompañada por nuevos temas compuestos por Tee Lopes, a quien ya hemos podido escuchar en Sonic Mania, League of Legends y Monster Boy and the Cursed Kingdom, entre otros títulos. La banda sonora siempre ha sido uno de los puntos fuertes de la saga, uno de los aspectos más cuidados de esta cuarta entrega y, lógicamente, las nuevas piezas suman puntos adicionales a Mr. X Nightmare.

Dicho lo cual, si empezamos la partida desde cero, y con Mr. X Nightmare  ya instalado, podremos acceder al modo Supervivencia sin rodeos, trámites o tutoriales. Y lo que es mejor: con los tres nuevos personajes listos para entrar en combate. Definitivamente, ellos son el segundo gran reclamo de esta nueva hornada de contenidos.

Tres villanos se unen al equipo de Axel y Blaze

Más allá del modo Survival, Mr. X Nightmare da nuevo valor a los modos Historia, Arcade y Combate (el Vs. de toda la vida) con la incorporación de tres nuevos personajes jugables. O, más bien, la posibilidad de jugar con  tres jefazos finales de Streets of Rage 4 con un repertorio de movimientos y combos completamente en sintonía con los cinco héroes originales.

Estel Aguirre, quien debutó en esta entrega, se suma a Axel y Blaze junto con el veterano Max Thunder (quien debutó en Streets of Rage 2) y el mismísimo Shiva, mano derecha de Mr. X, jefazo final recurrente de la saga y, de manera muy excepcional, personaje jugable en alguna ocasión. Y lo que es más interesante: el estilo de combate de cada uno de ellos aporta más valor y capas de variedad al multijugador de Streets of Rage 4.

Estel Aguirre, una amazona de ciudad capaz de dar golpes explosivos

La oficial de las Fuerzas Especiales se enfrentó a Axel, Blaze y compañía durante su peculiar cruzada por Wood Oak City sin saber que sus instrucciones obedecían a los intereses de los mellizos Y. Si ya era intimidante como adversaria, como aliada es una bomba de relojería. Todo un fichaje.

Estel aporta al panel de seleccionables un estilo muy interesante, ya que es capaz de cubrir enormes distancias gracias a sus técnicas explosivas, sus asaltos y al enorme alcance de sus patadas y golpes. Además, su ataque especial es todo un homenaje al Streets of Rage original.

Shiva, el implacable maestro de artes marciales

Rápido como el Viento, silencioso como el Bosque, feroz como el Fuego, inamovible como la Montaña. Shiva es un personaje técnico, pero sencillo de controlar, capaz de hacer combos espectaculares y que se luce todavía más en el combate aéreo.

El que fuese el matón de confianza de Mr. X es todo un prodigio de las artes marciales y funciona muy bien a todas las distancias. Eso sí, rechaza usar en combate cualquier cosa que no sean sus puños y sus patadas: lanzará automáticamente cualquier arma sin llegar a cogerla.

Max Thunder, el wrestler que hace temblar el escenario con cada paso

El coloso de Streets of Rage 2 regresa a la acción, y si ya nos habíamos enfrentado a él como jefazo de uno de los últimos niveles, su nuevo repertorio de movimientos, agarres y llaves lo convierte en el héroe más intimidante del juego.

Sus ropas lo delatan: el estilo de Max Thunder se basa en la lucha libre, y eso no solo lo desmarca totalmente del estilo de Floyd, el otro peso pesado del juego, sino que le da una presencia única en los combates mientras vacía barras de salud con pocos golpes pero muy, muy rotundos.

Los tres nuevos personajes de Streets of Rage 4 no solo se suman al Survival de la expansión, sino que están presentes en todos y cada uno de los modos del juego, de modo que podemos pasarnos la Historia y el Arcade con ellos o dejarnos los pulgares en los modos Combate y Combate con Jefes. Y sí, como los héroes originales, también pueden desbloquear nuevas técnicas y ataques especiales. Incluso, estrenar aspectos.

Streets of Rage 4: todavía más más y mucho mejor

Junto con el nuevo modo Survival con todos los nuevos contenidos, los tres nuevos personajes y el sistema de personalización de estilos de combate incluidos en Mr. X Nightmare, todas las copias de Streets of Rage 4 reciben una serie de contenidos interesantes y gratuitos -es decir, sin coste adicional- empezando por nuevos aspectos para cada personaje jugable.

En esencia, cada uno de los héroes seleccionables, tanto los nuevos como los originales, recibe tres variantes de color adicionales que le dan un extra de personalidad en partida. Ver una Blaze rubia y con otro estilo de color no la convierte en un personaje totalmente nuevo -al menos, no como el sistema de nuevos movimientos- pero el cambio no le sienta nada mal.

Dicho lo cual, las dos verdaderas novedades estrella del lote de contenidos gratuitos también refuerzan la pretensión de Dotemu de elevar drásticamente la rejugabilidad de Streets of Rage: de partida, a los modos ya disponibles se ha incluido el nuevo grado de dificultad Mania+, el cual viene literalmente acompañado de la sugerencia en pantalla "¿has perdido la cabeza?". El que avisa no es traidor.

Por otro, no se nos deja indefensos ante esta drástica escalada de dificultad y los desafíos del modo Survival: Streets of Rage 4 incorpora un espectacular modo Entrenamiento en el que además de poder practicar libremente recibiremos tutoriales, trucos, consejos y estrategias y hasta desafíos de combo con los que dominar al máximo las habilidades de cada personaje del juego.

Una adición mayúscula y un verdadero laboratorio de combos que vendrá de perlas a los machacabotones, da la bienvenida a los jugadores más casuales y hará las delicias de los jugadores más competitivos y dedicados.

La opinión de VidaExtra

El legado de los exitazos de SEGA sigue vivo y está en buenas manos. El retorno de Sonic con Sonic Mania, Alex Kidd y hasta Wonder Boy a manos de fans declarados les ha dado nueva vida a los personajes que marcaron una generación. Y el trato que Dotemu le ha dado a la saga Streets of Rage ha sido y sigue siendo para quitarse el sombrero. Incluso, con el desafío que implica hacer une nueva entrega numerada prácticamente tres décadas después del original.

La expansión Mr. X Nightmare aporta un valor nuevo y original a Streets Of Rage 4 y en el proceso eleva la propia cantidad de horas del juego hasta el infinito. Lo cual, teniendo en cuenta su precio, lo convierte en una compra obligada para todo aquel que disfrutó de la trilogía de Mega Drive. De hecho, el mimo que hay detrás de este nuevo set de contenidos es equiparable al puesto en el juego de 2020.

Con todo, Dotemu, Guard Crush y Lizardcube no se olvidan de aquellos que apostaron por el juego y buscaban una excusa para volver. Durante meses se han introducido balances y equilibrios en las mecánicas de combate del juego (algo habitual en los grandes juegos de lucha e insólito en los títulos de corte más indie) y saben como atraer a aquellos que disfrutaron de Streets of Rage 4 hace un año y solo necesitaban un pequeño empujoncito para volver a las calles de Wood Oak City. Eso sí, muy posiblemente, salgan trasquilados con la dificultad Mania+.

Streets Of Rage 4 - Mr. X Nightmare no solo es una celebración muy especial  del merecido éxito del nuevo capítulo de la saga, sino también una carta de amor a los Beat'em Ups clásicos. Y el modo en el que lleva la esencia de los máximos exponentes del género a las exigencias de los jugadores actuales a base de promover el multijugador local y online, un sistema de progresos soberbio o el nuevo generador niveles aleatorios son mucho más que un acierto: son un regalo para los que nos dejábamos los duros en los arcades y los pulgares en los botones y la cruceta de la Mega Drive.

Y, en el proceso, la mayor genialidad de esta expansión redondea lo que ya era un juego excepcional: su manera de concluir la cuarta entrega de Streets of Rage con una especie de página en blanco que se escribe sola con cada nueva partida y que el propio jugador podrá descubrir y disfrutar cada día. Niveles que aparecen de manera fugaz, creados con el mero propósito de ser disfrutados poniéndolos patas arriba.