Hace un año entre los equipos de 3DJuegos y VidaExtra iniciamos la andadura de tener un canal en Twitch en el que pudiésemos disfrutar de los juegos y los dimes y diretes de la industria en vuestra compañía desde una óptica completamente distinta.
Yo, que era completamente ajeno al mundillo, he tenido que aprender entre tropiezo y tropiezo no sólo a conducir el programa que hacemos de lunes a jueves de 15h a 16h, sino también a controlar todos los aspectos técnicos de un formato del que, ya os adelanto, no tenía ni repajolera idea.
Entre pruebas y cacharros, hace poco me enfrenté a uno de los retos que más cuesta arriba se me hacía, el de intentar mejorar la calidad del sonido de la mano de una interfaz de audio de la mano del Creative Live! Audio A3 y, para los que os estéis planteando dar el salto a grabar un podcast, stremear o crear contenido para YouTube, esta ha sido mi experiencia.
Así es la Creative Live! Audio A3
Acostumbrado a ver esas inmensas mesas de mezcla de sonido que ahora mismo todos los inexpertos en este tema tenemos en la cabeza, lo que más me ha sorprendido del Creative Live! Audio A3 son sus dimensiones. Ideal para hacerse un hueco en cualquier mesa por pequeña que sea, con apenas 10 x 5 x 1,27 cm, os podéis imaginar mi cara al esperarme un considerable mamotreto y encontrarme ese pequeño cacharro dentro.
De la mano de una cubierta de metal que ha resultado ser un imán para las huellas, sus 810 g de peso ofrecen la robustez necesaria para que, junto a las almohadillas inferiores, la interfaz esté siempre a tu alcance para juguetear con sus opciones sin miedo a que se resbale cada vez que la tocas.
Mientras que en la parte frontal tenemos dos jacks para auriculares de ¼, en la trasera monta dos salidas estéreo balanceadas y no balanceadas para eliminar posibles interferencias que ensucien el audio, dos conectores jack combo a los que enchufamos los micrófonos (también vale para instrumentos, de ahí los interruptores que les acompañan), un jack para enchufar el teléfono, por si lo usas como micrófono o quieres monitorizar una grabación del móvil, y un puerto USB-C que sirve como alimentación y conexión al PC.
En la parte superior, la de los controles, los mandos para el puerto de entrada de móvil y el de las dos entradas de audio con sus respectivos indicadores de potencia para ajustar el volumen, los botones para mutear y monitorear el audio directo sin latencia junto a otros tres controles de volumen, uno para cada pista principal de micro/instrumento y otro general.
Creative - Live! Audio A3
Mi experiencia con una interfaz de sonido
Asomarse a sus controles brevemente es la forma más simple de entender hasta qué punto utilizarlo como interfaz de control es bastante más fácil de lo que cualquier principiante en este ámbito podría llegar a pensar. Cero problemas a la hora de conectarlo y conseguir que el programa de grabación que utilices, desde Audacity hasta Audition, capten el sonido sin problemas.
Algo más de enjundia tuvo el salto a OBS para hacer streaming porque cada entrada de audio principal saltaba a su respectiva oreja por separado, pero buscando una solución di rápido con la opción de cambiar a audio mono, en vez del estéreo que viene por defecto en la aplicación de retransmisión, para solucionar el problema.
Acostumbrado a grabar siempre con el clásico Blue Yeti, que requiere de conector adicional para enchufar mediante jack, me dejaron prestado un micrófono XLR para ver qué tal rendía el cambio y, estando lejos de ser uno de calidad profesional, me sorprendió gratamente lo limpio que llegaba el audio.
Pese a mi inexperiencia, y una notable reticencia a meter más cacharros y cables sobre la mesa, la experiencia de tener tan a mano el control de audio en un cacharro tan pequeñito y accesible como el Creative Live Audio A3 ha sido toda una sorpresa.
Con él en mente más en la grabación de vídeo que en streaming, para subir la calidad de sonido un buen par de escalones, la prueba ha sido más que suficiente para invitarme a usarlo y empezar a buscar un buen micro XLR con el que sacarle aún más partido. Si estás en una situación similar y buscas algo bonito y pequeñito para colocarlo sobre tu mesa y subir el nivel de tus podcast, streaming o creación de contenido sin que el precio se te vaya de las manos, vale la pena echarle un ojo.
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