La saga Mana nos ha estado acompañando desde hace 30 años con numerosas entregas. Algunas de ella han regresado en los últimos años en forma de remasterizaciones o remakes, como ha ocurrido con Secret of Mana y Trials of Mana, de ahí que Square Enix haya querido seguir reviviendo más títulos de la serie y eso es lo que sucederá esta semana con Legend of Mana.
Se trata del cuarto juego de la franquicia que fue publicado hace 21 años en exclusiva para la primera PlayStation y en su momento se convirtió en un título fantástico y realmente único por contar con propuestas y mecánicas que se utilizaron por primera vez en la saga y que nunca más se han vuelto a ver. Tal vez porque no terminaron de encajar o porque la compañía no repetir la misma fórmula.
Sea como sea, nosotros hemos tenido la oportunidad de jugar a fondo a esta remasterización sobre la que nos disponemos a contaros en el siguiente análisis qué nos ha parecido y si realmente será un RPG al que debéis de seguir la pista.
Construyendo desde cero el mundo de Fa'Diel
La historia de Legend of Mana no es especialmente diferente en comparación a la de otros capítulos de la serie. En este caso hace siglos el árbol de Maná fue quemado y reducido a cenizas. A raíz de esta situación, el poder con el que contaba el árbol se esparció en las piedras del Maná, unos instrumentos encantados y unos artefactos muy valiosos, lo que provocó que las diferentes razas trataran de apoderarse de todos estos elementos.
Tras cientos de años en guerra, el poder del Maná comenzó a desaparecer poco a poco y las batallas cesaron. Sin embargo, muchas de las tierras del mundo de Fa'Diel, donde transcurrirán los acontecimientos, quedaron almacenadas en estos artefactos, así que nuestro héroe o heroína tendrá la misión de buscar la forma devolver a la vida al árbol de Maná para que el mundo regrese a su estado normal de paz y tranquilidad.
Así pues, como hemos destacado, Legend of Mana puede presumir de contar con una mecánica poco habitual a lo que estamos acostumbrados en la saga o en la mayoría de RPGs. Por lo general nuestro héroe comienza un viaje en el que recorre diversas regiones y mazmorras mientras la historia va cogiendo forma con el tiempo. En cambio, aquí el mundo estará completamente vacío desde un principio y seremos nosotros los que lo iremos construyendo a nuestro ritmo y dándole la forma que queramos.
Lo primero que veremos será el mapa del mundo arrasado, sin nada por ninguna parte, hasta que establezcamos nuestro hogar o base de operaciones. Acto seguido nos tocará situar en el mapa el pueblo de Domina y a partir de ese momento deberemos buscar artefactos que servirán para colocar por el mundo más lugares para visitar, los cuales serán los que nos permitirán avanzar con la trama principal o llevar a cabo misiones secundarias dependiendo del que utilicemos.
Cada uno podrá avanzar al ritmo que quiera y las misiones que nos irán apareciendo transcurrirán en forma de episodios, dado que al finalizar cada uno de ellos nos aparecerá la palabra "fin" y regresaremos al mapa del mundo para volver a nuestra casa o colocar un artefacto nuevo. Por eso mismo, la forma en la que se narrarán los sucesos es un tanto atípica, algo que en parte también puede chocar un poco porque a la larga no termina de atrapar tanto como la de otros juegos del mismo género y eso provoca que el interés a veces decaiga un poco.
Aun así, el argumento no es malo en absoluto y el ver cómo el mundo va cogiendo forma con el tiempo es algo que nos animará a seguir adelante. Sobre todo porque la mayoría de misiones nos entregarán nuevos artefactos para colocar, de forma que durante las primeras horas ya tendremos una buena parte del mapa bastante cubierta. No obstante, un gran problema con el que nos hemos encontrado es que algunos objetivos, aparte de no resultar muy interesantes, son muy poco intuitivos y no faltan las ocasiones en las que cuesta un poco averiguar qué es lo que hay que hacer exactamente, especialmente en los primeros compases ante la falta de tutoriales o algún tipo de ayuda.
A pesar de que los artefactos podremos colocarlos como queramos y no hay un orden fijo, sí que es cierto que hay algunas misiones que son obligatorias de completar u otras que no aparecerán dependiendo de ciertas acciones o decisiones que tomemos. Por otro lado, cada lugar es diferente al resto, tanto desde el propio mapa como dentro de las respectivas zonas, lo que nos llevará a atravesar bosques, montañas, cavernas, desiertos, playas, etc. Es más, el apartado visual de todas ellas es espléndido al dar la impresión de que han sido dibujadas a mano.
De hecho, en esta remasterización se ha mejorado cómo se ven los escenarios para que ahora luzcan mejor todavía con unos gráficos más definidos. Todo lo contrario a lo que sucede con los personajes, que se les ve más pixelados que en el título original, dando como resultado una combinación un tanto extraña por ver algunos detalles muy definidos y otros no tanto, por lo que al final es un tanto cuestionable el esfuerzo que se ha depositado en esta remasterización. En definitiva, una sensación muy similar a la que nos produjo recientemente Shin Megami Tensei III Nocturne HD Remaster.
Adaptando el estilo de combate a nuestra forma de jugar
Hasta el momento solo nos hemos parado a hablar del diseño del mapa o todo lo relacionado con el argumento, pero Legend of Mana es mucho más que todo eso, porque no deja de ser un RPG de acción en el que habrá momentos en los que no pararemos de librar combates en tiempo real contra los enemigos que nos vayamos encontrando por los escenarios.
En ningún caso habrá encuentros aleatorios y comenzaremos a luchar al instante en cuanto nos acerquemos a las criaturas por las que pasemos cerca. En verdad al principio da la impresión de que el sistema de combate es la mar de sencillo hasta que a medida que vas avanzando te das cuenta de que tiene una enorme profundidad que lo hace de lo más variado, ofreciendo la posibilidad de que cada uno lo adapte a su forma de jugar.
Nuestro personaje dispondrá de una amplia variedad de armas diferentes. Si bien empezaremos la aventura con una sola de ellas, la que queramos, con el tiempo nos podremos ir agenciando al resto. Cada una se diferencia por los ataques que nos permiten ejecutar, los combos o las habilidades especiales que iremos aprendiendo y a las que iremos dando rienda suelta. Asimismo, también habrá golpes más rápidos y débiles y otros más lentos y demoledores, aunque no podremos dedicarnos a golpear sin más sin parar o nos quedaremos brevemente paralizados y un poco vendidos.
Esto supone que los combates tienen su parte de estrategia de pensar bien cuándo es el mejor momento para atacar, esquivar, bloquear los impactos o utilizar las habilidades que vayamos desbloqueando, que serán decenas diferentes. Por eso habrá quien prefiera pegar tajos con la espada o empuñar una lanza para atravesar a sus adversarios, pero en ninguno de los casos habrá una que sea la mejor en general, dado que la dificultad está muy bien ajustada para que cada uno disfrute de la aventura a su ritmo y sin sufrir demasiado en líneas generales.
Además, a nuestro personaje le podrá acompañar una criatura a la que criemos. Durante nuestra travesía iremos obteniendo huevos de bestias desde los que surgirán monstruos en forma de compañeros que se unirán a nuestro grupo. La inteligencia artificial de estos no es que sea demasiado buena, pero nunca viene mal contar con algo de ayuda en cualquier momento. De hecho, si alguno cae derrotado deberá esperar a que se recupere su barra de vitalidad para volver a la acción, lo que supone un gran motivo de peso para llevar a alguien siempre con nosotros.
Incluso este aliado puede ser controlado por un segundo jugador, por si tenéis a alguien que os quiera acompañar mientras jugáis, algo que a la larga es más recomendable que dejar el trabajo sucio a la inteligencia artificial. Aun así, los combates los hemos disfrutado muchísimo, sobre todo aquellos contra jefes finales con unos tamaños imponentes y que nos han planteado un reto en más de una ocasión.
La opinión de VidaExtra
Por mucho que Legend of Mana se trate de una remasterización, los cambios que se han aplicado tampoco es que sean especialmente llamativos. El juego original ya lucía de maravilla y en esta ocasión simplemente se ha mejorado algo más el aspecto de los escenario o la resolución. Por el contrario, la banda sonora, que ya era excelente en su momento, sí que se ha renovado por completo bajo la supervisión de la compositora Yoko Shimomura.
Más allá de todo esto, podemos resaltar el añadido de un minijuego que nunca llegó a occidente o el hecho de que está localizado al castellano por completo, que eso siempre es un punto a favor y más aún si el resultado es magnífico, como ocurre en este caso. No obstante, para tratarse de una remasterización se siente más como si estuviésemos rejugando a la aventura de hace 20 años que a una mejorada.
En resumidas cuentas, si os gustó Legend of Mana, os volverá a enamorar como en la primera PlayStation, porque es un RPG formidable, con mucha personalidad gracias a su mecánica de permitirnos crear el mundo a nuestro ritmo o de la forma que queramos. Sin duda, uno de esos clásicos a los que siempre merecerá la pena volver, independientemente de la cantidad de años que pasen.
Legend of Mana
Legend of Mana
Plataformas | Nintendo Switch, PC y PS4 (versión analizada) |
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Multijugador | Sí (dos jugadores) |
Desarrollador | Square Enix |
Compañía | Square Enix |
Lanzamiento | 24 de junio de 2021 |
Lo mejor
- La posibilidad de avanzar al ritmo que queramos.
- Los escenarios ya lucían de maravilla y ahora más todavía.
- La banda sonora sigue siendo una auténtica delicia para los oídos.
Lo peor
- Las primeras horas pueden resultar un tanto complicadas al no tener muy claro qué hacer.
- Se echa en falta más mejoras o novedades para tratarse de una remasterización.
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