Reseña de Ask Iwata, una carta de amor los videojuegos a través de los recuerdos, enseñanzas y pasiones de Satoru Iwata

"En mi tarjeta de presentación, soy un presidente corporativo. En mi mente, soy desarrollador de videojuegos. Pero en mi corazón, soy un jugador." Satoru Iwata

Quizás no exista una fórmula exacta que explique ese fascinante fenómeno que comúnmente conocemos como la magia nintendera. Un patrón, una referencia o un modo de ver y hacer las cosas que pueda ser extrapolable a todo para insuflarlo del genuino espíritu de los videojuegos y sistemas de Nintendo. ¿Se trata de un concepto abstracto? Más bien, de un modo de ver las cosas. Una visión personificada en una persona: Satoru Iwata. Y, a falta de una biografía, el libro Ask Iwata logra ser esa inspiradora charla con un genio apasionado por los videojuegos.

Decir que Iwata fue el presidente de Nintendo, lo cual no es precisamente poco, sería quedarse muy cortos. Él fue el alma de la compañía, una persona honesta y coherente, el heredero de un legado y una responsabilidad enorme, el amigo y compañero de risas de Shigeru Miyamoto y, sobre todo, un auténtico enamorado de los videojuegos. Alguien que dedicó su vida a entender ese fenómeno desde todas las perspectivas posibles y, en el proceso, logró transformar la industria desde dentro y también la manera de jugar en cada casa.

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Curiosamente, Iwata rara vez hablaba en público de él mismo más allá de ilustrar con anécdotas los Iwata Asks, una sección dedicada a humanizar los nuevos juegos producidos por Nintendo y recordar los juegos más emblemáticos de la Gran N. Un espacio informal y ameno donde compartió sus propios recuerdos y experiencias, estableciendo que Nintendo no debía ser una corporación, sino un espacio en el que los creativos y técnicos comparten la misma pasión por los videojuegos y el constante empeño por ser mejores.

Satoru Iwata dejó este mundo el 11 de julio de 2015. Su visión sigue viva. Su manera de entender los videojuegos quedó inmortalizada en incontables juegos, sus divertidísimos eventos digitales y su trato con aquellos que lo conocieron. Precisamente, esa pasión tan contagiosa encontró una nueva forma de florecer: el diario Hobo Nikkan Itoi Shinbun (Hobonichi) fue uno de los medios más cercanos a Iwata debido a la amistad de éste con Shigesato Itoi, su Editor Jefe, con lo que sintieron especialmente el vacío de su pérdida. Lo suficiente como para darle uno de los mejores tributos jamás hechos: Ask Iwata.

Ask Iwata: un inspirador viaje hacia la pasión genuina por los videojuegos

El título del libro, Ask Iwata, es muy sencillo de entender: es un giro total a su programa de entrevistas Iwata Asks en el que, a base de recopilar y ordenar cronológicamente artículos, entrevistas y reflexiones, se busca ofrecer la visión completa de quién fue Iwata, qué le apasionaba y cómo llegó a interiorizar esa filosofía que hoy definimos de manera tan abstracta como magia nintendera. Y, pese a tratarse de un tributo a una persona muy concreta, en el proceso se le regala al lector una verdadera carta de amor a los videojuegos.

La edición española de Ask Iwata: Estas fueron las sabias palabras de Satoru Iwata el legendario CEO de Nintendo, son casi 200 páginas de recuerdos, anécdotas y entrevistas que se disfrutan de manera muy amena. Sabiendo darle su merecido espacio y valor a las frases más importantes; lecciones aprendidas en los momentos más delicados y, cuando toca, también logrando transmitir el humor y humanidad de uno de los presidentes más importantes e influyentes de la historia de los videojuegos. Y pese a esa responsabilidad, una figura que siempre se mostró humilde y cercana. A veces, incluso cómplice del propio jugador.

Porque la historia de Iwata en los videojuegos no comenzó el día en el que fichó a tiempo parcial en la recién fundada HAL Laboratories como su único programador (de hecho, él mismo debía ser su propio supervisor), sino el día en el que se encontró una calculadora Hewlett Packard de camino a clases que le cambió la vida. Un trocito de hardware que le obsesionó y con el que comenzó a experimentar creando juegos para su compañero de asiento. Ahí nacería una inquietud y curiosidad que le acompañará toda su vida.

Hilando y organizando artículos escritos por el propio Satoru Iwata y fragmentos de sus entrevistas, el libro de Hobonichi va más allá del tradicional formato de las biografías para ofrecernos los pensamientos, reflexiones e ideales de Iwata desde sus inicios a su ascenso como presidente de Nintendo; dividiendo la obra en siete capítulos que, si bien pueden ser leídos en dos tardes de manera reposada, invitan constantemente a ser releídos.

Siete capítulos, desde luego, aunque no todos llevan la firma de Iwata: otras personalidades como el mismísimo Shigeru Miyamoto también han querido recordar y sumarse al tributo. A fin de cuentas, para Miyamoto, Iwata no fue un jefe corporativo, sino un compañero de risas, alguien a quien admiraba profundamente y, sobre todo, un amigo. Una química única que quedaba patente en cada videojuego y traspasaba la pantalla en sus divertidísimos eventos digitales.

Lógicamente, a lo largo del libro no solo se nos ofrece una visión completa y coherente del aspecto creativo o la manera de pensar de Iwata, sino también una visión sincera de una Nintendo que atravesó varias crisis. Las cuales fueron sorteadas a base de creatividad, excelencia y, de vez en cuando, magia muy tangible: bajo el liderazgo de Iwata nacieron revoluciones a contracorriente dentro de la industria del videojuego como la Nintendo DS y su Touch Generations o el fenómeno de Wii y los controles de movimiento.

Más allá del aspecto biográfico del libro, repartidas entre las páginas de Ask Iwata encontraremos artículos como Primero, crea la plataforma y la experiencia de juego, El temor de mantener el mismo rumbo o Aunque la idea parezca imposible, inténtalo que son y deben ser lectura obligada para cualquier desarrollador y creativo. Incluso más allá del videojuego. Palabras que nacen de momentos y situaciones únicas dentro de Nintendo, pero que se pueden llevar a prácticamente cualquier circunstancia con el enfoque adecuado.

A fin de cuentas, Iwata nunca dejó de aprender en vida sobre esta pasión. Estudiando y recibiendo lecciones de los mejores, de aquellos que admiraba y de quienes acabaron siendo sus amigos. Como Shigeru Miyamoto o Masahiro Sakurai, con quien tuvo la loquísima idea de hacer Smash Bros. Siendo, precisamente Super Smash Bros. Ultimate el esfuerzo definitivo de Sakurai por rendir un tributo a la altura de su amigo.

El libro Iwata Asks se niega a ser una mera biografía de la figura de Satoru Iwata o un compendio enciclopédico de sus logros e hitos. En su lugar, nos permite entender a través de su palabra a la persona en diferentes etapas de su vida. Y, en el proceso, busca transmitir su legado y su visión a una nueva generación de apasionados por los videojuegos. Logrando ser una lectura tan amena como ilustrativa, un bonito homenaje de aquellos que compartieron su filosofía y. ¿por qué no? también un pedacito de pura magia nintendera.

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Ask Iwata: Estas fueron las sabias palabras de Satoru Iwata es una de esas lecturas que calan con fuerza en el apasionado por los videojuegos. Un vistazo diferente a la compañía que hizo que generaciones enteras se enamorasen de esta pasión, y un conjunto de reflexiones que nos hacen entender mejor lo que diferencia lo que hace Nintendo de todo lo demás. Un tributo que va más allá del propio homenajeado y humaniza a ese presidente de una gran corporación que, debajo de ese traje, también fue uno de nosotros, los jugadores.

La edición de Planeta Cómic de Ask Iwata es tan sencilla y amena como la original japonesa. Sus 194 páginas se pueden disfrutar a pequeños sorbitos, aunque seguramente los más incondicionales de la compañía lo acabarán devorando en una tarde. Eso sí, es esa clase de libro que conviene tener cerquita, tanto para encontrar inspiración como para recuperar citas y pensamientos que no solo no pueden perderse, sino que deben servir de cimientos para todo lo que está por venir.

Eso sí, también es una fascinante colección de divertidísimas anécdotas y recuerdos muy convenientemente repartidos. Enterarse de que a Iwata le apodaban cariñosamente en su compañía como Kirby por su manera de acabar con todos los caramelos y dulces a su paso hace que el mito rebose humanidad y despierte un nuevo tipo de admiración.

Y es que, quizás, la llamada magia nintendera sea un fenómeno casi inexplicable pero, a falta de una fórmula matemática que nos haga comprenderla mejor, el gran hito de Ask Iwata: Estas fueron las sabias palabras de Satoru Iwata es su manera de transmitir que todo ese conjunto de ideas y filosofías a toda una nueva generación. De delegar la llama y el legado de Satoru Iwata a los apasionados por los videojuegos de hoy y del futuro.