Análisis de PlayStation Portal: toda la experiencia PS5 en la palma de tus manos

Ni consola portátil, ni un simple mando al que le han añadido una pantalla entre los botones: PlayStation Portal pone la tecnología de PS5 en tus manos y la libera por completo de la televisión. Con sus propias limitaciones, todo hay que decirlo, ya que su función es reproducir en remoto. Conservando todo lo que aporta el DualSense a la experiencia de juego a través de un rediseño que, a todos los efectos, se siente bastante más cómodo que las tradicionales portátiles. Y eso, al final, acaba marcando la diferencia y jugando en su beneficio.

PlayStation Portal nace para ofrecer nuevas soluciones a los jugadores y cubrir esas mismas funciones de uso a distancia que en generaciones anteriores han llevado a cabo PS Vita o PSP, habilitando que continuemos nuestras partidas independientemente del televisor al que esté conectada nuestra consola, pero sin la autonomía de ser una consola, porque no lo es. Ahora bien, como dispositivo PlayStation Portal se resiste en todo momento a ser considerado un accesorio. Un periférico que tener por capricho. Es algo más.

Entre otras cosas, porque PlayStation Portal no se limita a mostrar lo que ocurre en el juego, sino que traslada las sensaciones y aprovecha las conectividades y tecnología de PS5. Sintetiza aquello que distingue la propuesta de Sony como consola de novena generación sin renunciar a las ventajas de propias de su diseño: una estupenda ergonomía y una enorme pantalla que invita a improvisar partidas o sumar cien horas más a ese juego que nos tiene atrapados.

Una pantalla que no ofrece las 4K de los televisores actuales, las cosas como son, dado que su LCD ofrece una resolución de 1080p. ¿Se le debería exigir más? Tras probarlo en juegos como Gran Turismo 7, God of War Ragnarok o el remake de Resident Evil 4 no echarás de menos los detalles más sutiles, dado que al final estamos hablando de ocho pulgadas. Pero al final logra exactamente lo que se propone: que le dediquemos mucho más tiempo a nuestros juegos favoritos.

A partir de aquí, una segunda mención obligada: PlayStation Portal no sirve de nada si no tenemos una PS5. De hecho, nada más sacarla te das cuenta que no se puede conectar a PS4 y tampoco da márgenes a que transmitas contenidos de PC y otros sistemas. Sony deja patente que no se trata de una tablet con botones y tampoco permite emparejarla a cualquier dispositivo. ¿El motivo? Su razón de ser es ofrecer una legítima extensión de la experiencia y la filosofía de PS5. Y, como veremos, tener un Wi-Fi decente tampoco es opcional.

Lo cual nos lleva a reconducir la pregunta que posiblemente te estés haciendo: el verdadero valor de PlayStation Portal no es estrictamente lo que hace, ya que la posibilidad de jugar en remoto a PS5 lleva años entre nosotros y solo se necesita un móvil para ver cómo funciona. Lo que marca la diferencia pasa por aquello que aporta al jugador. Y eso, como verás, requiere algo más que emparejar el dispositivo a la consola. Pero no mucho.

El proceso de instalación de PlayStation Portal

El desempaquetado de PlayStation Portal es fascinantemente sencillo, y Sony se asegura de que no haya disgustos al retirar el papel protector de la pantalla: la caja está doblemente asegurada y los dos únicos artículos que acompañan al dispositivo están convenientemente separados del mismo: una guía en papel, que no aporta nada más allá de las recomendaciones elementales de uso, y un cable USB de Tipo C en los dos extremos cuya función es cargar la batería del mando. No hay nada más.

El proceso de encendido pasa por presionar dos veces el nuevo botón de "Power" dedicado, situado encima de la pantalla y un poquito a la derecha del reubicado botón "PlayStation". Una vez conectado el Wi-Fi, usando la pantalla táctil a modo de teclado, se inicia una primera descarga de software de casi 150 Megas. Es en ese punto cuando empiezas a ver que hay algunos botones nuevos entre los gatillos y otros del DualSense han sido recolocados, como el del micrófono. ¿Y qué pasa con el panel táctil? Al tocar la propia pantalla aparecen dos versiones reducidas próximas a los sticks.

Es a partir de ahí, una vez actualizado el PlayStation Portal, cuando empieza el emparejamiento. A diferencia del DualSense o cualquier mando tradicional, no es suficiente con enchufar el cable USB a la PS5 con la consola encendida, sino que requiere tener instalada la app de PlayStation en el móvil y un proceso que pasa por actualizar la consola a su software más reciente y, a partir de ahí, activar el "Uso a distancia" desde los ajustes de sistema.

Habilitar el Uso a distancia de PS5 es obligatorio para poder usar PlayStation Portal. A diferencia de otros mandos, accesorios o dispositivos, no se hace uso de ningún tipo de conexión Bluetooth o vía cable (salvo para cargar la batería de ion litio) y, como veremos un poquito después, sus sistemas de conexión pasan por el Wi-Fi y la tecnología PlayStation Link. Precisamente esto es lo que marca la diferencia de calidad al reproducir de manera remota en móviles.

Como comentamos, el proceso de emparejado de PlayStation Portal con PS5 requiere un paso adicional y pasa por la app de PlayStation para móviles. No tiene mucho misterio, que conste, ya que se puede escanear un código QR que te dirige directamente a la aplicación y el ajuste a modificar. Si prefieres hacerlo manual, hay que ir a "Ajustes" y de ahí a "Gestión de la consola". Lo cual no quita que se trate de una serie de pasos que deben hacerse desde fuera de la propia PS5. La buena noticia es que solo hay que hacerlos una única vez.

Como último detalle, puedes emparejar PlayStation Portal con diferentes PS5. Si tienes varias o quieres usarla en otra consola no hay problema y se puede hacer en cualquier momento, ya que hay una función para detectar cuál queremos usar y hacer la transición de manera sencilla. Sin embargo, y esto es importante, sólo es posible tener conectado un PlayStation Portal a cada PS5. Si quieres jugar a dobles a EA Sports FC o Street Fighter 6 tocará compartir pantalla y sofá.

Especificaciones de PlayStation Portal

El diseño de PlayStation Portal es bastante descriptivo, pero no le hace mucha justicia a su premisa principal. De partida, Sony emplea la misma tecnología que los DualSense para envolver una pantalla 8 pulgadas que, puesta en las manos, tiene unas dimensiones muy similares a las de dos mandos de PS5. Y lo cierto es que no se hace aparatoso: su longitud es dos centímetros mayor que la de una Steam Deck, pero su pantalla es notablemente más generosa en tamaño y dimensiones. Su peso: 529 g frente a los 280 g del DualSense.

En lo que respecta a su tecnología, características y especificaciones, aquí tienes la tabla de referencias completa.

Se podría decir que, a priori, la característica principal de PlayStation Portal es su pantalla de 8 pulgadas. Ésta es táctil y cuenta con tecnología LCD Full HD, aunque más allá de las funciones de teclado y los ajustes que hagamos de cara a la iluminación, la vibración o el uso de los leds servirá para sustituir al panel táctil del DualSense. Dicho de otro modo, no podremos navegar por la interfaz de PS5 con el dedo del mismo modo que en Nintendo Switch.

Lo que sí llama la atención, de cara a las especificaciones, son sus conexiones: a diferencia del DualSense, PlayStation Portal no ofrece tecnología Bluetooth, de modo que no se puede emparejar a otros dispositivos y si queremos asociar unos auriculares inalámbricos las opciones pasan por PlayStation Link, teniendo un botón dedicado, o hacerlo a través de la conexión Bluetooth de la consola. Con todo, y a diferencia del mando de PS5, cuenta con sus propios altavoces integrados y su calidad juega en otra liga al compararlo con el DualSense.

Por otro lado, la carga de PlayStation Portal se hace a través del cable USB-C, el cual se conecta desde el espacio que queda entre la pantalla y el puente entre ambos agarres de los mandos. A su lado, la segunda y última ranura del dispositivo: un conector para auriculares del mismo tamaño de la base de los DualSense que queda igual de disimulado.

Que la carga no sea desde la parte superior, entre los gatillos, como se ha visto los mandos DualSense y todos los mandos de las consolas de Sony, es algo que choca inicialmente. En parte, dado el miedo inicial a quedarnos sin batería en el peor momento de la partida. Sin embargo, la razón de ser de PlayStation Portal es que juguemos apartados tanto de la televisión como de la propia consola y, pasados unos días, entendemos que la clave pasa por su batería.

PlayStation Portal incluye una batería de Batería de ion litio recargable 4.370 mAh frente a los 1.560 mAh del DualSense que le da mucha más autonomía. Y eso, sumado a que en realidad no ejecuta juegos, sino que los reproduce en remoto, hace que las sesiones de juego duren más que la carga habitual del mando de Sony y nos permita jugar más tiempo que en Switch o Steam Deck. Aunque, siendo justos, la experiencia al jugar no depende del hardware, sino de nuestra conexión. Ya llegaremos a ese punto.

En lo que respecta a la distribución de los botones, es exactamente la misma que la de los DualSense con varias diferencias: el botón "PlayStation" y el botón para silenciar el micrófono han pasado a colocarse sobre los sticks izquierdo y derecho respectivamente, muy cerquita de "Crear" y "Menú". Ahora bien, tal y como se ha dispuesto no nos equivocaremos al querer pulsarlos.

La pantalla táctil hace las veces del panel táctil del DualSense y, en el proceso, se han añadido cuatro nuevos botones: un botón de encendido y uno de emparejamiento de PS Link, más dos para ajustar el volumen de los altavoces. A estos hay que sumar que los sticks son un poquito más altos que los de los mandos de PlayStation. No demasiado, que conste. Y dado el cambio de dimensiones con respecto a la pantalla, al final se agradece.

Por último, pero no menos importante, el PlayStation Portal ofrece todas las características del DualSense: gatillos adaptativos, giroscopios, un sistema de detección de movimiento. Puedes hacer el tour completo de Astro PlayRoom y te quedarás igual de alucinado que la primera vez que lo pusiste en PS5, aunque en las partes en las que toca agitar el mando -cuando te metes en la Jungla de la GPU- tocará renunciar a ver en pantalla lo que pasa.

Y sí, apuntar y sentir los gatillos es una pasada con el PlayStation Portal. Ya bien sea con un arco, con un hacha o al jugar online a Fortnite. Pero lo que más impresiona es jugar a Gran Turismo 7 con la misma calidad y tiempos de carga que en PS5, pero desde un dispositivo que, sin ser una consola, ambiciona jugar en esa liga. Algo que se manifiesta siempre y cuando la conexión del Wi-Fi sea lo suficientemente buena.

La experiencia PS5 lejos de la consola. Pero no mucho

PlayStation Portal solo funciona si está asociado a una PS5. Lo pone en la caja y en diferentes idiomas. Se trata de un dispositivo de juego en remoto, con lo que al final lo que estás haciendo es ejecutar tu consola a distancia. Lo que no pone lo suficientemente grande en ninguna de las seis caras del cartón es que contar con una buena conexión de internet es completamente esencial. Y da igual que se trate de un juego competitivo o un sencillo juego de plataformas.

Si tu conexión es buena, jugar a PlayStation Portal es una delicia. Al punto que te olvidas de que se trata de un sistema de juego a distancia, ya que la respuesta es precisa, la imagen es muy estable y tienes todas las ventajas añadidas de PS5, como los tiempos de carga ultrarrápidos o el audio espacial si juegas con unos auriculares preparados para ello. Si prefieres jugar sin cascos, los altavoces demuestran la experiencia de Sony como fabricante y el micrófono está igual de disimulado que el DualSense.

En lo que respecta a la pantalla, es una grata sorpresa: sin alcanzar las 4K, se puede ver a todo detalle en Full HD (1080p) con lo que tiendes a configurar todos tus juegos al modo rendimiento, y PlayStation portal hace que dar ese paso merezca la pena. ¿Echaremos de menos las texturas a máxima resolución? Si no juegas en una tele UHD, no vas a notar la diferencia. Y si realmente es algo que necesitas para tu experiencia de juego, siempre puedes encender la tele: PlayStation Portal quiere que sigas jugando más allá de la pantalla a la que tienes conectada tu PS5, ya bien sea tumbado en el sofá o reposado en la cama.

La ergonomía de PlayStation Portal es otro paso al frente si lo comparamos con sistemas que sí son consolas portátiles: no es tan ligero como Nintendo Switch, pero sostenerlo en las manos es realmente cómodo. Y que disponga de unos sticks y botones más generosos en tamaño que otras consolas o máquinas portátiles acaba jugando en su favor. Es más, supone un punto a favor en todos esos títulos que se disfrutan por simple diversión.

Las sensaciones al jugar a los títulos de PS5 optimizados para el DualSense están en su sitio. Es más, puedes jugar a Gran Turismo 7 usando PlayStation Portal a modo de volante a través de los giroscopios. Y lo que es mejor: sientes el motor y las marcas del asfalto en las manos. Lo cual no quita que también sea peligroso para quienes, como yo, se pasan más tiempo del necesario en el editor de fotografías del juego.

La imagen recibida es exactamente la misma que la que vemos en la consola. Entre otros motivos, porque (insistimos) lo que estamos haciendo es jugar con PS5 de manera remota. Si hacemos una captura de pantalla o grabamos gameplay a través del botón de PlayStation Portal, lo que queda almacenado es lo que ocurre en la consola, con la misma calidad que ésta ejecuta. Dicho de otro modo: si jugamos al remake de Resident Evil 4 en 1080p en PlayStation Portal, pero se ejecuta en 4K, la captura es en esa calidad.

En este aspecto, PlayStation Portal no cuenta ni con un sistema de almacenamiento ni da demasiado margen a la hora de trastear con sus opciones. Como comentamos, las funciones táctiles de la pantalla son las mismas que las que podemos aspirar del panel táctil del DualSense, apareciendo en pantalla a través de dos zonas superpuestas justo al lado de los sticks en caso de ser necesario.

Si tocamos la pantalla en la zona en la que muestra la batería restante (no se indica el porcentaje) veremos cómo se despliega un pequeño menú táctil que, además de indicar la hora, el estado de la conexión o la batería, nos permite acomodar rápido la iluminación o acceder pequeños ajustes de PlayStation Portal como la conexión de red, la actualización de sistema, la vibración y las luces led o cerrar la sesión. Pero todos los cambios significativos que queramos hacer de cara a la experiencia de juego pasan por acceder en remoto a los ajustes de la consola o desde el propio juego.

Ahora bien, hay un aspecto crucial a la hora de valorar PlayStation Portal: nuestra conexión condicionará totalmente la experiencia de uso. Si falla, no es estable o nos colocamos en algún punto en el que la cobertura es escasa veremos una imagen completamente empañada, brutales caídas en la resolución y un incómodo carraspeo en el sonido. Pero lo peor es que la jugabilidad se irá al traste. Hasta la respuesta al manejarte en los menús será un desastre.

De cara a nuestro análisis hicimos toda clase de pruebas con PlayStation Portal. Sabíamos que mientras más nos alejábamos de la señal peor sería la experiencia, pero también nos topamos con desconexiones esporádicas al conectarnos a redes menos estables. La solución pasó por conectar el dispositivo a una red Wi-Fi 5G con pocos dispositivos conectados y saber de antemano dónde funciona mejor y dónde vamos a encontrarnos con problemas al jugar.

¿Es recomendable jugar en competitivo con PlayStation Portal? A nivel de ergonomía sí y el retardo es mínimo, pero al final todo deriva en la confianza que tengas en que tu red Wi-Fi no te de sustos.

A quién va dirigido el mando con pantalla de PlayStation

¿Por qué ofrecer un dispositivo para jugar en remoto y no una consola portátil? La razón de ser de PlayStation Portal se manifiesta sola:

• Dividir a la comunidad de jugadores de PlayStation con una PS Vita 2 es un enorme paso hacia atrás en un contexto en el que Nintendo, Steam o Xbox se han volcado de lleno en aunar las propias.
• Restar presencia a una PS5 que ambiciona vender 25 millones de unidades en este año fiscal, un error letal.
• Lanzar una PS5 portátil no solo es carísimo a nivel comercial, sino que tiene que consumir una barbaridad de recursos y, viendo su reciente revisión, sería una máquina enorme y que generaría mucho calor.

Sin embargo, ofrecer una alternativa para seguir jugando a distancia a nuestros juegos, o al menos más allá de la tele, es algo que en 2023 se ha convertido en una prioridad para Nintendo, Microsoft y toda la industria del videojuego. Y Sony no podía quedarse rezagada.

PlayStation Portal no es una respuesta al éxito de Nintendo Switch, como bien podría ser Steam Deck. Son dispositivos diferentes. Lo que Sony ofrece es un reproductor remoto y Nintendo una consola que puedes jugar dónde quieras sin depender de nada. Y eso está muy bien. Lo que ofrece, sin embargo, Sony es que tengas todas las ventajas de una PS5.

Con eso por delante, el gran propósito de PlayStation Portal es exactamente el mismo: que puedas apagar la tele y seguir jugando en otra habitación. O ponerte una serie o una película de fondo mientras continúas enfrentándote a marcianitos o viviendo grandes aventuras.

PlayStation ofrece una solución para quienes tienen una PS5 y no les apetece estar moviéndola de una habitación a otra, pero también una excusa para ir un poquito más lejos en ese RPG que nos tiene obsesionados, desde la cama o tumbados boca arriba en el sofá. O arrancar el día retomando la partida tras dejar la consola en reposo.

Que, en el proceso podamos jugar con las prestaciones que se le exigen a los juegos de novena generación hace que PlayStation Portal esquive la denominación de ser un simple mando con pantalla. Dicho lo cual, no hay margen para que hagamos experimentos, ya que sus opciones, conexiones y configuraciones son bastante limitadas. Y si Sony habilitase el juego en la nube de PS5 a lo Xbox Cloud Gaming tampoco podríamos jugar en el tren o al ir en autobús: se trata de un dispositivo para usar a distancia de nuestra PS5. Ni más, ni menos, pero con todo lo bueno que eso conlleva.

La opinión de VidaExtra

PlayStation Portal es una legítima extensión de la experiencia y la filosofía de PS5 más allá de las pantallas de la televisión. No busca ser una nueva revolución, sino habilitar que la tecnología de la consola de novena generación de Sony se pueda disfrutar sin las ataduras de los sistemas de sobremesa. Y pese a que no enriquece la experiencia de juego, logra que jugar sea más cómodo. Más sencillo. Que demos más vueltas en ese nivel que tanto nos gusta o que, antes de saltar al siguiente título, intentemos sacar un trofeo más.

Ahora bien, la comodidad a la hora de jugar en PlayStation Portal está condicionada a tu conexión de internet. Puede que la idea sea muy parecida al mando de Wii U, pero la manera en la que se conecta a PS5 es diferente y está condicionada a diferentes factores que influyen drásticamente en la experiencia de juego. Si pierdes la conexión Wi-Fi, el "portal" que abre este dispositivo entre la consola de sobremesa y tus manos se cierra.

En este aspecto, PlayStation Portal da lo que promete: la posibilidad de jugar a distancia a PS5 sin perder ninguna de las características de la consola. Ni más, ni menos. Y pese a que hay alternativas de juego remoto en PS5, también por Wi-Fi, ninguna de ellas ofrece la totalidad de las opciones. Menos, con una calidad comparable si la señal de conexión es decente.

A título personal, considero el resultado habría sido más atractivo si se hubiesen ofrecido un dispositivo más versátil. No solo que permitiese reproducir en remoto de diferentes maneras, sino ofreciendo funciones adicionales a través de más tipos de conexiones o nuevos ajustes. No es que estén bloqueadas de cara al jugador, sino que Sony delega esas opciones a que las hagamos a través de la propia PS5. Tiene su lógica, desde luego, pero podría ser más sencillo.

Por otro lado, PlayStation Portal no es un mando Premium, como el DualSense Edge, ni tampoco lo pretende. Si bien, es lícito medirlo más con los DualSense que con otros accesorios, más que un mando es un dispositivo de uso a distancia. Aunque, por otro lado, se hubiera agradecido que por su precio (219,90 euros) en la caja hubiésemos encontrado una funda protectora. O, al menos, una mopa con la que limpiar la pantalla.

En cualquier caso, PlayStation Portal cumple con todo lo que se propone: exhibir todo lo que hace diferente a PS5 como consola, ofrecer una solución realmente interesante a la hora de jugar más allá de nuestro televisor, redondear el atractivo de las consolas de Sony y sus juegos y, en el proceso, tentarnos a que juguemos un poquito más de lo esperado. Garantizándose un más que merecido sitio en la mesita de noche de los más jugones.

Precio de PlayStation Portal

El precio oficial de PlayStation Portal es de 219,99 euros. Sin embargo, tener una PS5 es totalmente obligatorio: no es compatible ni con PS4 ni tampoco se pueden reproducir otros dispositivos. En la caja, además, se incluye un cable con USB-C en ambos extremos para cargar la batería.

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