Jugamos a Advance Wars 1+2: Re-Boot Camp, el arte de la guerra según Nintendo sigue siendo terriblemente adictivo

La estrategia bélica Made in Nintendo ha regresado, y no lo vamos a negar ¡Cómo la echábamos de menos! Advance Wars 1+2: Re-Boot Camp sabe encontrar ese punto intermedio entre la nostalgia y los aciertos atemporales y, en el proceso, es capaz de obsesionar a cualquier jugador. A los grandes y a los pequeños. A los apasionado por los combates por turnos que buscan retos desenfadados y a quienes hoy llenan sus estanterías de juegos de mesa para disfrutar en familia. Porque la manera en la que está planteado este regreso de los originales de GBA también tiene un muchito de juego de tablero, y hasta eso acaba jugando a su favor.

La saga Advance Wars (o más bien Nintendo Wars) regresa más completa que antes, con un nuevo estilo visual que deja atrás el pixel art y conservando exactamente la misma diversión, que no es poca. Con mejor aspecto, eso sí, por cortesía de una WayForward que le toma el relevo a esa Intelligent Systems completamente centrada en la saga Fire Emblem. Y pese a que hay elementos comunes, el resultado no tiene mucho que ver: Advance Wars 1+2: Re-Boot Camp no es rol, sino un tipo de estrategia sencilla, divertida y para todo el mundo. Sin excepciones.

En VidaExtra hemos podido jugar a fondo a este clásico restaurado por partida doble y, pese a que nos vamos a centrar en el primero de los dos títulos incluidos, si eres fan de los clásicos de Game Boy Advance ya puedes ponerte cómodo y empezar a frotarte las manos: todo lo que te gustó sigue en su sitio. Y si nunca has jugado, ten cuidado: puede que al adentrarte en Advance Wars 1+2: Re-Boot Camp te topes con tu próxima obsesión.

Y es que, si bien, el propio título de Advance Wars 1+2: Re-Boot Camp ya nos adelanta -sin margen a confusión- que estamos ante un remake muy fiel a los juegos originales de Game Boy Advance. También hay sorpresas, algunos cambios bien planteados y novedades que logran extender aquellas ideas originales en Nintendo Switch. Incluyendo la posibilidad de jugar con hasta cuatro amigos con un solo cartucho. Aunque no te emociones demasiado con esto último, que tal y cómo se ha planteado el multijugador aquí también tiene su propio truco. Ya llegaremos a ello.

Advance Wars: estrategia para todos con el toque de Nintendo

Casi todos los juegos de estrategia beben de un modo u otro de los clásicos juegos de tablero. Algunos se inspiran en los más modernos como Risk y otros en los de toda la vida como el ajedrez. En Advance Wars se heredan los elementos más distintivos de ambos ejemplos y otros tantos, pero sus ideas están tan bien integradas que sus partidas siempre se sienten intrigantes y su desarrollo se siente completamente original. Y eso que al final toda se reduce a lo mismo: derrotar al ejercito enemigo. Algo que no se consigue a base de los mejores tanques y simple fuerza bruta, sino de entender qué está pasando y, a partir de ahí, dominar el escenario.

Si vienes de nuevas, no te preocupes: como en el original, Advance Wars te da la bienvenida con unos tutoriales en los que se te explica lo básico y a lo largo de la campaña te van introduciendo de manera escalonada unidades y mecánicas un poquito más avanzadas. Eso sí, todo es deliciosamente sencillo: nunca te vas a ver abrumado. Otra cosa muy diferente es que el juego, con una estética muy colorida, sea fácil y la reconquista del país de Orange Star sea un paseo: ya te adelanto que no lo será.

De hecho, hasta la quinta misión de la campaña de Advance Wars no podrás crear nuevas tropas, con lo que tendrás que tener un cuidado muy especial con cada ataque planteado, con cada movimiento y posición final y con cómo quieres abordar la victoria: ya sea eliminando todas las unidades enemigas o conquistando su base. Dos los objetivos más comunes de un juego cuyas partidas pueden estirarse a los diez, quince o veinte minutos en base a lo inspirados que estemos.

El desarrollo de las partidas no tiene mucho misterio: a través de casillas, movilizamos unidades cuyo daño y alcance varía en un escenario planteado como si fuese -literalmente- un tablero. Antes de atacar veremos en el enemigo el porcentaje de daño al que podemos aspirar, basado en nuestra unidad, las condiciones ambientales o el tipo de terreno en el que se encuentra el atacante y el objetivo.

¿Uno de tus escuadrones ha visto drásticamente reducidas sus unidades? Combina dos que estén tocados y vuelve a la carga con fuerzas redobladas.

Y pese a que los tanques hacen más daño que las unidades de a pie, solo éstos últimos pueden conquistar bases y, además, se pueden fabricarse en mayor cantidad. De modo que hay un relativo equilibrio de fuerzas en base a coste de producción, alcance, tipo de arma y hasta terreno en el que se desenvuelven, ya bien sea carretera, montaña, tierra, mar o aire. Pero no te preocupes por los tecnicismos, la propia estética de Advance Wars y el diseño de sus unidades hace que lo asimiles todo a un simple golpe de vista.

Con todo, en cada misión hay un elemento adicional que le da un punto de variedad a la partida: los OC (básicamente, los comandantes) acceden tras determinados hitos durante la partida a unos superpoderes únicos, de modo que en función del que usemos ganaremos la capacidad de reparar unidades por arte de magia un turno, aumentaremos enormemente el daño e incluso extenderemos el alcance de nuestras tropas. Lógicamente, nuestros enemigos también disponen de sus propias ventajas distintivas.

Eso sí, no te dejes engañar por su agradable estilo visual, el cual parece recrear soldaditos de juguete y divertidísimas maquetas de tanques aviones y submarinos: puedes verte realmente atrapado en el juego. Obsesionado incluso cuando estás contra las cuerdas. Incluso cuando estás perdiendo la partida o directamente sabes que no la vas a ganar. Lo bueno de esto último es que este remake lo ha tenido en cuenta de cara a los jugadores actuales y más impacientes.

Cómo WayForward actualiza los clásicos más allá del modo campaña

La puesta a punto visual de Advance Wars 1+2: Re-Boot Camp quizás divida opiniones, pero en lo personal el salto a los modelos 3D me ha parecido un acierto. Quizás se echan de menos esos tanques y batallas a pantalla partida en pixel-art, pero los rediseños de las unidades, los escenarios e incluso los personajes, muy en sintonía con esa estética de anime de WayForward, revalidan el paso dado de cara al remake siendo especialmente reverentes con el material original. Aunque, claro, dónde notaremos los cambios será en aquello que se ha ganado en el proceso.

Si bien, la estética del juego es completamente nueva, Advance Wars 1+2: Re-Boot Camp gana tres aspectos clave que hacen que las partidas se disfruten todavía más:

• De entrada, nada más empezar a jugar tienes dos niveles de dificultad: clásico o relajado. Sobra decir cual es más desafiante, pero si es tu primer juego de estrategia o no buscas muchos retos vas a disfrutar muchísimo más del segundo.
• Además, incluso si te van las situaciones complicadas es posible que tarde o temprano te arrepientas de una acción. En estos remakes equivocarse y experimentar no penaliza, ya que puedes rehacer el último turno desde la pestaña de opciones.
• Pero lo mejor de cara a los que echamos ojeras jugando siempre la penúltima partida es que, además de poder elegir si ver todas nuestras animaciones y los turnos completos de los enemigos, podemos acelerar el ritmo (algo así como un FastForward) con tan solo un botón.

Con todo, hay aspectos que llaman la atención, como que no se haya aprovechado en absoluto la pantalla táctil de Nintendo Switch. Y pese a que hay un sistema de atajos a la hora de seleccionar unidades que nunca vienen mal, se podían haber añadido elementos rápidos que nos permitan estudiar el alcance de las unidades o su estado de manera más dinámica.

Nuestras impresiones de Advance Wars 1+2: Re-Boot Camp se basan en lo jugado al original, aunque el mítico Advance Wars 2: Black Hole Rising de Game Boy Advance también forma parte del remake. De hecho, está relativamente bloqueado al principio, en parte por los giros de la historia de Advance Wars en sus compases finales, pero sobre todo para que interiorices los conceptos del juego, aunque acceder a él es tan sencillo como elegirlo en el menú de selección de juego tras aceptar los spoilers. Tanto las razones como el proceso en sí es algo que se agradece.

Eso sí, la experiencia de juego de este remake va mucho más allá de las campañas. Porque puede que recuperar los clásicos sean para los nostálgicos el plato fuerte, y están en lo cierto, pero la idea va más allá ofreciendo un divertidísimo editor de niveles, una tienda fuera de ambos Advance Wars con la que adquirir todavía más mapas, un modo de batallas libres que le da todo el sentido sentido a los otros dos modos, la correspondiente galería (cómo no) y un muy interesante multijugador que acabará siendo el otro gran engranaje de la propuesta.

Si bien, todavía no hemos podido poner a prueba el multijugador online (el cual extenderá la rejugabilidad de Advance Wars 1+2: Re-Boot Camp hasta el infinito, tenemos a nuestra disposición dos interesantes variantes offline:

• El tradicional modo inalámbrico para hasta cuatro jugadores en el que se necesita una consola y una copia del juego por cada participante
• Y un mucho más interesante modo multijugador también para hasta cuatro jugadores con una  única consola (y copia del juego) en la que básicamente consiste en pasar la Switch al acabar cada turno.

Todo esto se complementa con la posibilidad de importar los mapas creados por nosotros mismos, con lo que al final se cumple un doble objetivo muy interesante: no solo revalidar lo que ya gustaba hace veinte años, sino extender los aciertos y la obsesión por Advance Wars durante las siguientes décadas. No a base de DLCs, sino abriendo la puerta a que sean los propios jugadores los que creen y compartan los contenidos. Y eso, se mire como se mire, es un acierto.

Advance Wars 1+2: Re-Boot Camp, el juego de estrategia que echabas de menos, quizás sin saberlo

La saga Advance Wars tenía que regresar. ha habido una infinidad de juegos que han intentado con más o menos acierto cubrir ese espacio vacío que ha dejado  la ausencia de la estrategia bélica nintendera, y lo cierto es que el delicado contexto internacional obligó a hacer maniobras extrañas de cara a su lanzamiento. Pero lo ya jugado a Advance Wars 1+2: Re-Boot Camp convence y revalida lo que ya gustaba. Y lo que nos queda por delante de cara a nuestro veredicto final todavía pinta mejor.

Ya te podemos confirmar que Advance Wars 1+2: Re-Boot Camp es un renacer y una vuelta a los orígenes de una pequeña gran saga de fuerte calado que hereda ese empeño por Nintendo de hacer que sus juegos puedan ser disfrutados por todo el mundo, pequeños y grandes; y a la vez destila ese toque especial que le pone WayForward a sus pequeños grandes proyectos con extra de mimo. Con secuencias animadas y personajes pintorescos.

Y ojo, que este remake además está totalmente localizado y con las voces en español. Doble acierto, especialmente para ofrecer una divertida experiencia de estrategia que, sin ser simplona, está al alcance de los jugadores más pequeños.

Sin embargo, y pese a las buenas sensaciones en términos generales, eso no quita que todavía nos queden por delante tareas pendientes de cara a emitir una valoración integral de Advance Wars 1+2: Re-Boot Camp. Porque todavía tenemos que hablar de los compases finales de Advance Wars, de cómo se han abordado las novedades de la secuela y, sobre todo, de cómo es la nueva experiencia online de este remake.

Pero, como ocurre en cualquier juego de estrategia, no te preocupes: todo se dará a su tiempo y en su debido orden.

Lo que sí te podemos adelantar es que, tras varios retrasos y sonadas ausencia, los coloridos tanques de Advance Wars 1+2: Re-Boot Camp ponen rumbo a la eShop y las estanterías: su lanzamiento está fijado para el 21 de abril de 2023. Una fecha a marcar en el calendario ya que no solo se trata del enésimo rescate con mejoras para la consola de Nintendo: es un grato reencuentro con esa misma estrategia que nos fascinó  en Game Boy Advance, y que encuentra un nuevo hogar en Nintendo Switch.

• Plataformas: Nintendo Switch
• Multijugador: Sí (online y local)
• Desarrollador: WayForward
• Compañía: WayForward / Nintendo
• Lanzamiento: 21 de abril de 2023