Puede que no sean evidentes, pero para Patrice Désilets hay claros vínculos entre su nuevo juego, Ancestors: The Humankind Odyssey, y la saga que creó y a la que dio forma cuando trabajaba en Ubisoft, Assassin's Creed. Así lo explica, al menos, en una reciente entrevista a VG24/7, llena de detalles curiosos con respecto a su próxima obra.
El más obvio, explica el creador francés, tiene que ver con la escalada, una de las mecánicas principales en los juegos de Ubi que aquí tendrá también mucha importancia. Según él, la cosa va más allá de trepar fachadas en uno o árboles en otro, sino que estaríamos hablando también de "cómo se mueve el personaje, cómo se comporta"; factores que se podrían englobar en una especie de "sello personal".
Uno de los detalles llamativos que menciona tiene que ver con ocultarse. Désilets explica que ni él mismo se dio cuenta de esto al diseñarlo, pero que nada más empezar el juego la primera acción que se nos pide es buscar un sitio para escondernos, tal y como haríamos en cualquiera de sus anteriores obras. Una casualidad con la que bromea, recordando una serie de entrevistas a distintos creadores emitida en televisión el día anterior que se resumía, según él, en que "solo tenemos un truco, que repetimos una y otra vez hasta hacerlo mejor".
Interrogado también por cómo se relaciona el juego con respecto al ADN y a la existencia de distintos linajes, Désilets reconoce ciertas similitudes, pero aquí la cosa será bastante distinta...y retante. Podremos ir saltando entre los distintos miembros de nuestro clan, controlándolos para llevar a cabo distintas acciones, pero si morimos perderemos a ese miembro para siempre y, en el caso de que muera todo el clan, tendremos que volver a empezar el juego, independientemente del tiempo que hayamos invertido en él. Algo muy cruel si tenemos en cuenta la existencia de mecánicas que se refieren a la evolución, pudiendo fastidiar potencialmente horas y horas de avance.
Ya como curiosidad, el entrevistador aprovecha para preguntarle qué opina sobre Assassin's Creed hoy en día y si cree que de seguir él hubiera tomado la ruta más RPG de las últimas entregas, a lo que Désilets da largas diciendo que él está concentrado en lo suyo y que no ha jugado ni es capaz de hacerlo:
El último que jugué fue Assassin's Creed III. [...] Jugué dos horas, pero tenía que trabajar y además no me lo estaba pasando bien.
