Puedes haberte preparado, entrenado y practicado hasta el hastío que hay algo contra lo que no podrás luchar: la desgracia. No importa si es un examen, una entrevista de trabajo o una partida en un videojuego, un instante negativo y todo se puede derrumbar.
Si bien las consecuencias de esta situación no son tan graves, resulta sorprendente comprobar el bucle de mala suerte en el que se ve sumergido English Ben, un speedrunner de la saga GTA. Durante un intento de superar GTA III, Vice City y San Andreas de forma consecutiva, acabó siendo golpeado por las matemáticas.
Durante el recorrido con el viejo Claude Speed, Ben necesitaba conseguir robar y conducir una ambulancia. Debido a un error que cometió con anterioridad, se veía en la necesidad de utilizar un vehículo que diese pie a una misión secundaria, por lo que la ambulancia era perfecta.
Tal y como explica Ben, existe un 30% de posibilidades de que la ambulancia esté cerrada. En la primera ocasión, esta probabilidad sucede, por lo que rápidamente provoca una muerte intencional para reaparecer en el hospital. Su sorpresa, y la de todos, es cuando comienza a comprobar que no es capaz de abrir la dichosa puerta.
0,0066% de posibilidades de que tras ocho intentos de abrir una ambulancia, ésta no lo haga. O lo que es lo mismo, una ocasión entre 15242. Si te preguntas por qué no robó un coche de policía, Ben lo explica a través de la publicación en Reddit y es que otro error que cometió impedía su uso.
"Los coches de la policía no funcionan debido a otro problema técnico sucedido al principio de la partida y que inutiliza las misiones de este trabajo. Técnicamente, un taxi habría funcionado, pero la zona de aparición fija está mucho más lejos, por lo que intentar llegar a la ambulancia es la opción más lógica"
Lo cierto es que Ben puede contar que ha experimentado uno de esos momentos que seguramente no se repitan en mucho tiempo en los juegos de Rockstar.
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