Hubo una época en la que los detractores de los videojuegos esgrimían como argumento el progresivo aumento de la violencia. Estamos creando monstruos – decían - niños que perderán el miedo a la sangre, que se acostumbrarán a la violencia y que acabarán causando un disgusto a la sociedad. Por supuesto que los culpables eran los videojuegos, del cine y la literatura ni hablar.
Y es que en el cine y la literatura, decían los entendidos en la materia del desprestigio, el niño no adopta un papel activo, en ningún momento se desdibuja la barrera que separa ficción y realidad. Ahora, tal y como se ha particionado la industria con la llegada de nuevas consolas y la inauguración de nuevos géneros, el mercado se divide en dos (a grandes rasgos, que estamos generalizando). Ahora tenemos juegos radicalmente concebidos para los niños (sin tener que ser software educativo forzosamente) y juegos concebidos para los adultos.
Diferentes lenguajes, diferentes temáticas, diferentes narrativas e incluso diferentes esquemas de interacción. Además si os fijáis, los juegos que tienen como target el mercado infantil son cada día más infantiles. Es más, me atrevería a decir que tratan al niño como a un pequeño ser atontado y esto va, por desgracia, en aumento. Cada vez más estereotipos, cada vez roles más definidos, cada vez consiste en pensar menos y actuar más como los demás… en definitiva, un asco, pero ese no es el tema.
Hoy quiero hablar de los juegos para adultos. Y es que si observamos que los juegos para niños, maldigo a las etiquetas ya que no dejan de ser videojuegos y punto, evolucionan hacia sub productos, no podemos dejar de apuntar que los juegos para adultos son cada vez más violentos.
Y me surge esta reflexión después de haber leído la opinión de los desarrolladores de ‘Army of Two’ sobre la popular escena del aeropuerto en ‘Modern Warfare 2’ y después de contemplar la última y polémica imagen de ‘Aliens vs. Predator’.
¿En serio es necesario llegar a estos extremos? Quiero que miréis la imagen que habita debajo de estas líneas y observéis el detalle, el reflejo de los órganos, la posibilidad de arrancarle a un humano la cabeza con nuestras propias manos y llegar a ver la columna saliendo, la sangre chorreando y su rostro de dolor.
Hace 5 o 6 años alucinábamos de los tabúes que Rockstar se atrevía a romper, prostitutas, violencia en las calles, sexo y lenguaje malsonante en ‘GTA’, asesinatos violentos y salvajes en ‘Manhunt’ e incluso violencia escolar en ‘Bully’.
Pero es que en todas las obras de Rockstar podíamos encontrar un tamiz de estilización, incluso en ‘ManHunt’ los asesinatos más salvajes pasaban por el filtro de una cámara de seguridad que lo convertía en algo más cercano a una película.
Somos adultos, está claro que por ver este tipo de imágenes no vamos a salir a la calle a destripar al primer marine espacial norte americano que veamos pero, ¿es necesario llegar a este extremo para que la idea de violencia trascienda la pantalla?
Los chicos de ‘Army of Two’ entendían la escena de ‘Modern Warfare 2’ como provocación y para situar al player en la historia, pero al mismo tiempo aseguraban que no hacía falta llegar a ese extremo y que ellos mismos jamás hubieran llegado, que existían otras formas igual de efectivas y menos salvajes y polémicas.
Polémica, esa es la palabra, ese quizá es el concepto que buscan algunos publishers y developers cuando afrontan el desarrollo de su juego. La saga ‘Zelda’ la componen juegos sublimes, obras maestras que han vendido lo que no está escrito y que jamás se han visto rodeadas de polémica. ‘Uncharted 2’ es el juego del año y pese a tener violencia no ha sido censurado en ningún país. Existen muchos más ejemplos de auténticos juegazos que no necesitan salir en prensa demostrando lo salvajes y violentos que son, sino enseñando lo divertidos que parecen.
Así que llegados a este punto quiero volver al título del post, cuando hablamos de juegos violentos, ¿debemos llegar a esto?
Yo sinceramente aún no se qué responder… a ver cómo lo veis vosotros. Quiero leer vuestras opiniones ya que seguro tenéis mucho que decir sobre el tema, sería genial llegar a un punto en común entre todos.
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